𝙂𝙤𝙤𝙙 𝙆𝙞𝙡𝙡𝙚𝙧𝙨.

Nuevo caso

Todo está oscuro y no puede recordar que fue lo que pasó exactamente. Se siente adolorida y la cabeza le da vueltas, intenta pensar con claridad... estaba camino a su casa cuando la interceptaron y ahora está aquí, en esta habitación desconocida. Busca su pantalón y encuentra su teléfono celular, marca a emergencias temblando.

— Diga... — escuchar al otro lado de la línea.

— A-ayuda por favor... ayúdeme.

— ¿Cuál es su nombre y qué sucede exactamente?

— Soy Lee Dalmi... me-me secuestraron ¡por favor! ¡Ayúdeme!

— No puedo escucharla, levante la voz por favor.

— Por favor, por favor vengan por mí, estoy en alguna casa del barrio Changsin-dong.

— No puedo escuchar la dirección... repítala por favor.

La muchacha observa como la manija de la puerta de la habitación es abierta y se horroriza mirando a su secuestrador.

— ¡Ayúdeme! — alcanza a gritar, antes de que el hombre le propine un fuerte golpe y la deja inconsciente...

— ¿Todo está bien? ¿Qué sucedió? — se escucha al operador de emergencias repetir una y otra vez luego del grito, pero ya no puede obtener ninguna respuesta...

Un inspector de policía de la zona está sentado frente al jefe Jihoo con la cabeza gacha.

— Lo-lo siento señor. No pudimos evitarlo.

— ¿Sabe inspector quien paga su maldito sueldo? — el hombre se coloca en posición formal antes de repetir un "Si, Señor" — ¡Las personas, las personas con sus impuestos pagan su maldito sueldo y a cambio ellas esperan que gente como nosotros los protejan!

— Lo sé señor... pero.

— Pero ¿qué? ¡Maldición! Se que no enviaron a tiempo a sus hombres al lugar. ¡Tardaron demasiado! Ahora Lee Dalmi esta muerta ¡muerta! — el jefe Jihoo golpea su puño contra la mesa lleno de ira.

— Intentamos hacer todo lo posible...

— ¡Claro que no! Han sido varios asesinatos en esa zona. — añade aún más enfadado. — Largo ¡Largo de aquí!

El inspector se retira humillado y Jihoo siente vergüenza por algunos miembros de la policía. Piensa un poco las cosas y decide que a pesar de lo loco que parezca Taehyung es el único capaz de dar todo de si para atrapar a esa clase de asesinos. Solo lo detiene un poco su petición... trabajar con el grupo de criminales que volvió a encerrar hace unos días.

De todas formas, no parece tener otra opción...

Jungkook y Taehyung se dirigen hacia la cárcel en donde están retenidos Yoongi y Namjoon. El inspector Jeon quiere seguir trabajando con el detective porque a pesar de lo tosco y poco comunicativo que pueda ser, esta consciente que es excelente atrapando criminales. Además, siente que en los días pasados pudo conocer algo más de Yoongi, Namjoon y Hoseok, así que trabajar nuevamente con ellos no le parece tan terrible como la primera vez.

— Yoongi no debe de querer verlo detective. — murmura Jungkook hacia Taehyung quien parece concentrado en el camino.

— Es probable. — responde. Aunque el detective sabe muy bien que lo que va a ofrecerles a los tres es una oportunidad que no pueden desperdiciar por mucho que lo odien.

Al llegar al lugar, Kim se reúne con Yoongi en los cubículos de visitas. Están sentados uno frente al otro con un vidrio de separación. Yoongi viste su uniforme azul, lleva las manos con esposas y mira al detective con lo que parece una gran furia.