𝙂𝙤𝙤𝙙 𝙆𝙞𝙡𝙡𝙚𝙧𝙨.

Plan

Hoseok modula su respiración despacio. Siente el dolor punzante de la herida y la sangre escaparse lentamente. Su lobo está inquieto, ansioso, aullando en un intento de llamar al alfa...

Si...

El omega en estos momentos solo puede pensar en el detective... en que realmente quisiera verlo, quisiera saber que está bien... en estos precisos momentos está anhelando el aroma a café y a menta más que cualquier cosa.

Sus pensamientos son interrumpidos cuando alguien desde afuera, entra con violencia al cuarto que está bajo la oscuridad.

— Seguro están aquí. — Hoseok escucha, trata de acomodarse de mejor manera para evitar ser visto, aunque sabe que no será posible. — Aquí está el omega. — exclama uno de los hombres en cuanto ve al chico en el piso y lo apunta con su linterna. — Vaya... vaya pero si está herido.

El omega trata de ponerse de pie, ahora mismo no puede pensar en una salida, quizá morir así es lo que le queda.

— ¡Bastardos! — Namjoon grita entrando al lugar con un bate y empieza a pegar a quien se le pone en frente de forma hábil. Estuvo por breves segundos considerando que podría dejar al omega ahí.

Pero no... le guste o no, le debe una y a Namjoon no le gustan las deudas.

El alfa recibe algunos golpes, y por la cantidad de hombres, esto parece imposible. Hoseok trata de ayudar ayudar empuñando algunas de las camillas contra los atacantes, pero sabe que no es mucho lo que puede hacer, se siente mareado.

Cuando parece que no hay salida, Yoongi llega bajo la mirada aliviada de Namjoon, los dos almas son capaces de lidiar con ese grupo de hombre de Madame Soo Hwang, mientras Hoseok recarga su cuerpo contra la pared y respira profundo nuevamente, tratando de ignorar un poco el dolor que siente.

En cuanto logran controlar la situación Namjoon ayuda al omega a caminar y se mueven despacio por la oscuridad del pasillo saliendo de ese cuarto hasta llegar a otro, que parece desocupado, en donde ayudan al omega a tomar asiento.

— No luce nada bien. — murmura Yoongi hacia Namjoon.

— Nunca me alegré tanto de ver a alguien, como hace un momento cuando te vi hermano. — ríe Namjoon, pareciendo inocente y divertido en medio del caos.

— ¿Escucharon a Soo Hwang?

— Por supuesto... la muy maldita. — protesta el más joven. — ¿Cómo vamos a salir de aquí? Y por cierto ¿Dónde anda el detective Kim? ¿Será que ya lo abrieron y le sacaron los órganos? — Namjoon dice lo último simulando un corte de cuchillo con sus manos. Hoseok frunce el ceño al escuchar la suposición.

— Así me abrieran ¿Qué podrían quitarme ya? — la voz del detective, que ha escuchado lo que Namjoon mencionaba, los alerta enseguida. — Me alegra verlos aún vivos.

Taehyung está por reír un poco, solo por mera burla o para bajar la tensión que ya hay en el ambiente por lo que está pasando, pero su expresión cambia drásticamente cuando al terminar de acercarse observa al omega sentado con su mando cubriendo su espalda baja y con una mueca de dolor.

Algo en él gruñe enojado y errático.

— ¿Qué-qué ha pasado? — pregunta acercándose con rapidez a Hoseok.

— Lo hirieron por supuesto.

Hoseok observa como el alfa se inclina hasta quedar a la altura de su cuerpo y sin mirarlo al rostro lleva sus ojos a la herida, retirando la mano del omega con suavidad.

— Estos mal nacidos... — Taehyung gruñe al ver la herida, la ropa manchada de sangre y el rostro pálido del chico. No puede evitar preocuparse de formas exageradas al verlo así. — ¿Te duele demasiado? — la pregunta sale con un tono de voz melancólico y todos se sorprenden por el repentino cambio del detective.