Havva, Sultan [ Principe Mehmet Fanfic ]

013

Lo empujé y me alejé de él.

—Pues adivina quien es el que me ha hecho llorar. —Le dediqué una última mirada y corrí hasta mis aposentos, ya que era el único lugar en el que podía resguardarme

Imbécil, "no quiero verte llorar" es un...

—Como lo odio — Me quejé mientras tapaba mi cara con mis manos. — Déjenme sola y no dejen que nadie entre aquí, Nadie —Les pedí a mis criadas y ellas salieron.

Que difícil es mantener la paz en este palacio, cada día es peor que el anterior, en serio me gustaría solo... desaparecer de este lugar, volver a donde estaba hace unos meses, porque siento que voy a colapsar en cualquier momento

—Havva.— Escuché mi nombre seguido por algunos golpes en la puerta y murmullos.— Havva... déjenme pasar. —Hubo un poco de silencio .— Soy el príncipe déjenme pasar!

Abrí la puerta de golpe y logre ver a Mehmed que estaba frente a esta. Se apresuró a abalanzarse sobre mi en un fuerte abrazo el cual no correspondí.

—Dos palabras, Ya vete! —lo empujé fuera de la habitación y cerré la puerta en su cara

— Pero... —Escuché su murmullo detras de la puerta

—Hazme el favor y déjame en paz, Mehmed

—No. No voy a irme hasta que abras esta puerta —Sentenció.

—Como quieras, porque no pienso abrirla. —Me cruce de brazos frente a esta

No obtuve una respuesta por su parte

Supuse que se fue, por lo que me alejé de la puerta y me topé con mi espejo.

—Allah... —Toqué mi cara, al mirar encontré que mi cara estaba toda roja y llena de lágrimas.

Tomé un pañuelo, lo humedecí un poco y lo pasé por mi cara para limpiarme

Ya me veía un poco mejor, aunque aún estaba algo hinchada, la sensación que había dejado el paño húmedo se sentía refrescante, y para mi eso era suficiente.

La verdad es que, si me sentía bastante mal, por todo lo de Mehmed, t un poco culpable por no poder salvar a su hijo, pero... al menos Melek, no estará aquí. Supongo que es lo único bueno del asuntos, aunque no debería pensar en eso como algo bueno.. o si? Bueno en cuestión, para mi es bueno, pero... no se siente bien.

Sigo pensando en cómo Mehmed puede ser tan mentiroso, claro, es hombre pero... lo que dije era en serio? No quiere verme llorar? O simplemente lo dijo por lastima? Es todo un conflicto, no debo de ser tan confiada pero... quiero saber si lo que decía era real, si eso es realmente lo que piensa, supongo que nunca lo sabré

Ahh, debería rehusarme a casarme y morir sola? Es bastante difícil ya, como sera la vida de casados? Tendré que soportar un haren, concubinas celosas, cuidarme de todo lo que como, bebo y uso. Aún Soy muy joven para tomar la decisión de estar sola toda la vida, pero también soy muy joven para decidir con quien pasar toda mi vida, no?

Pero en este caso no lo decidí yo...

Que sea lo que Allah decida, total el sabe lo que hace...supongo.

Me levante de mi cama y me dispuse a salir de la habitación.

—Pero que.. — Caí sentada en el suelo con la cabeza de Mehmed en mis piernas.— Por allah!

—Lo siento, lo siento —Se levanto rápidamente y extendió su mano hacia mi.

Empuje su mano y me levanté sola.

—No estás de luto? —Pregunté irónicamente caminando por el pasillo.

—Por favor Havva, no seas así.

—Así como? Así como tu eres conmigo ? —seguí caminando sin mirarlo.

—Yo no soy así contigo y lo sabes, yo no te ignoro tan descaradamente.—guardó silencio un momento.— Que hago para que me perdones ?

— Si quieres que te perdone, tendrás que darme un caballo, 300 monedas de oro, 5 vestidos púrpuras, 2 coronas y 4 collares de piedras preciosas . —Dije en tono de burla.— Ahora déjame en paz.

Camine un poco más rápido dejándolo atrás.

Llegue a la cocina principal y entré a esta, todos parecían apurados, sin embargo no entendía el porqué.

—Emm disculpa... porque todos están tan apresurados?

—No lo sabe sultana? Su majestad no a ordenado Repartir dulces y jugo para celebrar el compromiso de el príncipe Mehmed con usted —Sonrió y siguió con su trabajo.

Demonios. Tal vez debí haber esperado la primavera para la boda.

—Podrías darme algo de jugo? —le pedí a un eunuco y me lo trajeron en seguida.  —Gracias.

Lo tomé rápidamente y salí de la cocina para pasearme por el haren.

—Atención! La sultana Havva —Me anunciaron y las criadas hicieron reverencia.

Mientras pasaba entre todas esas mujeres una de ellas, una pequeña y debil chica cayó en mis pies.

—L-lo lamentó sultana —Se levantó rápidamente.

—Cual es tu nombre? —Le pregunté mirándola, pero ella tenía su cabeza baja

— Adalet

— Señorita Afife, por favor prepare a esta criada y envíela conmigo —Ella asintió y se llevaron a la chica.

Pobre, se veía tan pequeña, debil e indefensa.

—Escuchaste los rumores? —Decía una criada

—Sí, todo el mundo habla sobre eso, estoy segura de que ella si lo hizo —Le contestó otra

—De que hablan? — Se unió una más

—La sultana Havva, expulsó a la favorita de su alteza Mehmed.

—No solo eso! También por ella le practicaron un aborto, la mujer casi muere!!

Me volteé y miré a las criadas. Ellas bajaron sus cabezas inmediatamente.

—Ustedes! —

—Como se atreven a hablar así de una sultana?! —Me interrumpió una voz familiar.

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