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A pesar del orgullo que sentía, la preocupación me invadió en cuanto Mehmed Tiró la espada, y apretó la reciente herida de su brazo.

Corrí hasta el y vi la cantidad de sangre que salía, era una herida profunda sin dudas.

—Maldita sea, llamen a un médico! — pedí mientras desgarraba la manga de mi vestido

—Estoy bien —Dijo suavemente mientras yo colocaba el trozo de tela en su herida para detener la hemorragia — No rasgues tu ropa, me gusta ese vestido

—No estás bien. —Respondí inmediatamente.— Llamen a un médico! Hablé en chino o qué! Es una orden, muévanse ! —Grite histérica.

—Tranquila, Havva, no voy a morir por esto.

—Que sucede si se infecta? Y si...

El me abrazo para callarme.

—Estoy bien.

Los demás se acercaron a nosotros y miraron con un poco de asco la sangre que salía de la herida de Mehmed.

—Su alteza yo... tengo un ungüento muy bueno. —Dijo Ilias .— Puedo aplicárselo si así lo desea

—En tus sueños —murmuré.

—Discúlpeme?

Carajo. Lo dije muy fuerte, ahora que..

—Sultana! —Me llamó una de mis criadas. —Ese hombre! —señaló a Ilias .— quiere asesinar al príncipe!!! —Gritó

Justo a tiempo

Suspire aliviada, y me prepare para hablar.

—De qué hablas?! Espero que no estés mintiendo mujer porque las consecuencias serán graves!! —Exclame en voz alta para que todos me escucharan.

—No sultana! no miento, a este hombre le asignaron la misión de matar a su alteza!

Los presentes se miraban entre ellos mientras que yo sonreí en mis interiores, esperando el espectáculo principal.

— Aquí—Ella sacó una hoja de papel de su bolsillo.— Esta, es la prueba! Este hombre no solo quiere matar al principe, si no que... también fue enviado por una de nuestras sultanas!

Mi criada volteó su mirada a Mahidevran y me entregó la carta, yo la leí, e inmediatamente la entregué a su majestad.

—E.. esto, no puede ser verdad... —Dije en un hilo de voz.

Mehmed estaba siendo tratado por un médico del palacio, vendando su herida.

—Qué, qué dice la carta? —Pregunto Mehmed.

—Por allah... Mahidevran... como pudiste? —El sultán puso una de sus manos en la boca con asombro.

Empecé a soltar algunas lágrimas.

—cómo se le ocurrió tal atrocidad!!! —Le grité con la voz quebrada.— Usted merece la muerte ! —Grité otra vez.

—Qué es lo que dice la carta.

—Esta mujer! —La apunte.— Envió a este bastardo específicamente para matar a su alteza el príncipe Mehmed! Iban a enfermarlo con un ungüento infectado con la plaga! —Tomé la espada de Mehmed que estaba en el suelo.— Eres un maldito! El príncipe confiaba en ti!

Grité muy furiosa, a pesar de estar actuando, en parte si estaba furiosa, por el hecho de que intentaron vernos la cara de imbeciles.

—Y-Yo no! —La sultana Mahidevran trato de excusarse. —yo no hice tal cosa!

—Ah si? No lo hizo? Porque está su sello en la carta! —Le levanté la voz una vez más.— Porqué le quitaron la carta a su escolta?!

—No ven lo que está tratando de hacer? Falsificó la carta! Yo no haría tal cosa! Es la sultana Havva que me odia!

Me acerque a ella y le di una bofetada.

—Merece morir — Murmuré para que ella me escuchara.— Y en cuanto a ti. — Apunte a Ilias con la espada en mis manos.— Vas a morir en mis manos ahora mismo! —Dije en voz alta para clavar la espada en su estómago.

La sangre salpicó un poco en mi mano y mi ropa.

—Cihan, Tráeme un pañuelo húmedo . —pedí y ella se fue.

El hombre cayó al suelo soltando mucha sangre rápidamente, intentaba hablar pero se ahogaba con la sangre saliendo por su boca.

—Ojalá te pudras en el infierno. Guardias ! —Pedí por ellos y llegaron rápidamente.— Llévense a la sultana Mahidevran a nuestro calabozo.

—Sobre mi cadaver —Dijo Mustafa sosteniendo su espada. Bloqueando El Paso a los guardias.

—Mustafa, hazte a un lado! Es una orden —Dijo su majestad pero el hizo caso omiso.

Me acerque a él desarmada y le di una bofetada, y luego otra, y otra hasta que fueron 4 bofetadas y me detuve .

—Cómo te atreves —Una lágrima rodó por mi mejilla. — Siempre has envidiado a Mehmed, tu también deseabas su muerte no es así?! —Lo acusé.— para volver a la gloriosa Manisa, volver a ser el príncipe de la corona.

—Havva...

—El amor al poder te consume pero no quieres aceptarlo. Y te aseguro que aunque Mehmed muriera, tu nunca serás sultán!

—Cómo puedes saber eso! —Me dio una bofetada.— Estoy cansado de ti! Todo el tiempo hablando de tu amado Mehmed que  no hace mucho odiabas! —Me habló en un tono fuerte esta vez.— Me amabas Havva, a mi! Tu y yo estaríamos juntos!

—Te amé en el pasado, pero lo que siento por ti, se esfumo conforme pasó el tiempo. Ves al hombre de allá ?
—Señalé a Mehmed, quien se encontraba de pie con una expresión terrible en su rostro, estaba molesto definitivamente, pero el sultán lo detenía para que siguieran curándolo. — Yo daría mi vida por ese hombre, el me da todo lo que tú nunca pudiste ni podras, Amor incondicional, no te atrevas a compararte con él, jamás en lo que te queda de vida —Lo miré de pies a cabeza.

El estaba al borde del llanto, supongo que la verdad duele

—Llévense a la sultana —Pedí una vez más y los guardias se la llevaron.

—Te odio —Soltó Mustafa.

—Al parecer es un sentimiento mutuo —Le sonreí, y me acerque a Mehmed. Que me tomó de la cintura posesivamente con su mano sana mientras miraba a Mustafa.

Cihan trajo mi pañuelo y me limpié la sangre que había salpicado en mi.

—Mahidevran será expulsada por sus actos y su cabeza será humillada en la entrada de la capital. —Dijo Su majestad muy serio de sus palabras.

Asentí y me acerque a la sultana Hurrem quien miraba todo desde un lugar un tanto alejado.

—Bien hecho mujer, eres más grande de lo que pensaba, pero lo de la carta... ya lo sabias no?

— Por supuesto, no puedo permitirme que este tipo de cosas sea una sorpresa para mi. —Dije completamente seria.

—Creo que esta vez, me has superado.

—Me enorgullece escucharlo, sin embargo me falta mucho para llegar a ser como usted.

—Serás mejor que yo, no te preocupes por eso —Puso una mano en mi hombro y me sonrió

Havva, Sultan [ Principe Mehmet Fanfic ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora