Havva, Sultan [ Principe Mehmet Fanfic ]

026

"Hoy voy a estar ocupada, deje a Facria a cargo de todo. Así que no me busquen, voy a salir del palacio".

Eso decía la nota que dejé en mi buró antes de salir del palacio mientras todos dormían.

Si bien mi plan no era el mejor, era el más arriesgado, por lo que no lo dudé dos veces y me aventé a la adrenalina.

Empecé a seguir a este hombre desde muy temprano por la mañana, antes de que saliera el sol incluso. Tuve que reunirme con Emir aga, y luego buscar a este bastardo; una vez lo encontramos nos dedicamos a seguirlo y ahora es momento de emboscarlo.

—Disculpe... —Dije llamando su atención con una voz suave.— Estoy perdida...

El sol apenas se asomaba en el este, por lo que no había tanta luz y llevaba encima una capa oscura con capucha que lograba tapar mi cara, asimismo mi cabello cubriría parte de mi rostro también por lo que le sería casi imposible reconocerme.

El hombre miró a los lados antes de acercarse un poco a mi.

—Señorita usted no debería estar aquí, este bosque puede resultar peligroso. —Explicó aún manteniendo la distancia.

—No... No lo entiendo, empecé a caminar y ahora... no se donde es la salida. —El solo me miraba expectante.— Podría... mostrarme el camino? Parece que conoce muy bien el lugar.

El hombre miró el papel en sus manos y luego volvió a ver de un lado a otro, nervioso.

— Está bien.. solo.. sígame.

El hombre en ese momento dio la vuelta, dándole la espalda.

Emir aga y un soldado lo inmovilizaron inmediatamente se dio la vuelta y yo tomé el papel en sus manos, lo abrí y sonreí al ver lo que contenía.

—Suéltenme! Que hacen?! La sultana Mahidevran Lira de esto!

Chisté y puse un dedo en sus labios.

—Dile a tu sultana, que recuerde su lugar. Aunque no puedo dejar cabos sueltos... es una pena que no podrá oír de esto —Sonreí a labios cerrados y me gire mientras mis hombres hacían lo suyo

Camine de vuelta al palacio, tranquilamente mientras veía el sol salir completamente iluminando el cielo que hasta hace unos minutos era oscuro, era una vista simplemente realmente agradable, y relajante a la vista,

Suspire un poco el aire puro que emanaba la mañana y entre en el predio del palacio, me encontré con Mehmed y un par de guardias en la entrada, me sorprendí un poco y me escondí por las dudas.

—No está su alteza, por ninguna parte.

—Tiene que estar en algún lugar! No han buscado bien —Dijo nervioso mientras miraba de un lado a otro.— Encuentren a mi sultana maldición! —Lo soldados se movieron y se alejaron de él.

Está buscándome a mi?

Me acerque a él sigilosamente y toque su hombro por detrás.

Su mirada se iluminó inmediatamente y me acorraló en un fuerte abrazo que duró varios segundos.

—No me vuelvas a asustar así —Acaricio mi cabello con suavidad mientras murmuraba agradecimientos a Allah.

Me reí un poco.

—Al principio pensé que ibas a dar un paseo, pero no volvías, envié a alguien a buscarte y ni te encontró por ninguna parte entonces me preocupe y temí lo peor. —Explicó aún en el eterno abrazo que parecía no terminar.

—Estoy bien, tienes que confiar en mi, en que siempre regresaré a ti —me separé y le di un besito en la mejilla.

—Si te sucediera algo... yo no... —Chisté callándolo.

—No pienses esas cosas. Aquí estoy.

La mañana paso con normalidad, en cuanto me separe de Mehmed me dirigí a mi habitación y en mi baúl guardé la carta que recién había conseguido, lo puse debajo de una tabla levantada en mi habitación.

Me arregle un poco y me vestí con uno de mis vestidos nuevos, el cual era de una tela bastante ligera, de hecho el vestido era muy al estilo inglés, era importado desde ese lugar, a mi parecer era hermoso, aunque sabía muy bien que algunas personas no estarían de acuerdo.

— Se ve hermosa sultana —Me sonrieron mis criadas.

—Podrían alcanzar el collar de Rubíes que me obsequió el príncipe ? —Pedí señalando mi collar que se encontraba en lo más alto de un estante.

—En seguida sultana.

Tocaron mi puerta y entró mi príncipe.

— Bienvenido Su alteza —Lo saludó cihan.

En ese momento la criada que estaba buscando mi collar de Rubí cayó haciendo un gran estruendo.

—Hasret! —Gritó Cihan preocupada.

En un abrir y cerrar de ojos vi como Mehmed corría hacia la criada preocupado, ella aún estaba consciente pero se quejaba del dolor.

Me levante de mi asiento y me dirigí a ellos, para ver cómo Mehmed tomaba su mano con delicadeza preguntándole donde le dolía.

—Estoy bien... solo duele un poco ahí —Mehmed la examinaba detenidamente, me sentía mal por ella pero un sentimiento estaba creciendo en mi... que es esto? Enojo?

—cihan llama a la doctora, que revisen a Hasret. —Pedí de manera fría, Mehmed me miró.

Me encontraba parada frente a ellos que estaban en el piso aún.

—La llevare a la enfer... —Interrumpí a mehmed inmediatamente me di cuenta lo que iba a decir

—Le pediré a los guardias que te carguen a la enfermería. — me moví rápidamente y llame a mis guardias, quienes la cargaron y salieron de la habitación.

Asimismo pedí a mis criadas que salieran de mi habitación, sentía una furia muy extraña, Mehmed se incorporó y trató de acercarse a mi. Yo di algunos pasos en retroceso.

El extendió una de sus manos hacia mi pero se contuvo y bajo su mano, sin decir ni una sola palabra.

miré sus ojos y entendí que no sabía que decir en este momento. El ambiente de torno incómodo para ambos, esto no me estaba gustando. Suspire pesadamente antes de hablar. Pensé bien mis palabras, para no decir algo equivocado o fuera de línea.

—Ja... a esto le llaman celos ? —Sonreí forzadamente y tape mi cara con una de mis manos, solté una corta risita.