Capítulo 10

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La primera vez es la que se debe evitar. Otra de muchas mentiras que en este mundo te enseñan, solo preparándote para lo inevitable.

Solo un año después de haber iniciado nuestra aventura, nuestro tour por Alemania, llegó otro. Pero él no se iba a quedar.



Los niñeros se encontraban nerviosos, sentados junto a los gemelos en la sala de espera. Jisung y Yongbok estaban tranquilos, pero todos eran conscientes de que algo malo ocurría. Cuando la recepcionista los llamó pudieron ingresar al consultorio junto a los niños. El lugar transmitía confianza, en una zona había juguetes y lapices de colores. Los gemelos inmediatamente fueron ahí, mientras los dos mayores se sentaban frente al escritorio.

— Recibí su correo —le indicó el profesional a Christopher—. Leí lo que me explicaba y entiendo, puedo comenzar a trabajar con los niños, a menos que deseen agregar algo más.

— Únicamente qué han seguido con las pesadillas durante las noches —añadió Christopher—. Y, aunque durante el día parecen estar bien, se les nota tristes cuando no están jugando.

— Entiendo —asintió el psicólogo.

El profesional estaba preparado para cualquier situación. Antes había trabajado ya con los Lee, por lo que entendía que el contexto nunca era tan favorable.

Cuando Christopher y Seungmin salieron, él pudo acercarse a los gemelos, inmediatamente ambos se mostraron reacios. Le extrañaba verlos iguales, la única vez que los recordaba, Yongbok era aparentemente una niña y gustaba ser llamado Félix. Como era evidente, el psicólogo necesitaría más que una cita con los gemelos para poder dictar un diagnóstico de la situación.



Hyunjin ingresó a la habitación de Seungmin durante la madrugada, sin un cuchillo esta vez. Él se despertó al sentirlo a su lado, lo abrazó como anteriormente lo había hecho. Parecía que su acuerdo para compartir cobijas estaba funcionando, el miedo mutuo poco a poco desaparecía.

— No puedo dormir —le contó Hyunjin. Seungmin espabiló inmediatamente, por primera vez el chico intruso estaba dispuesto a charlar—. ¿Como les fue con el psicólogo?

— Dijo que, prematuramente, puede decir que los niños han enfrentado un fuerte trauma, sobre todo Yongbok, qué lo hizo cambiar drásticamente en su persona.

— Él se veía muy bonito con sus vestidos y su cabello largo...

— Según el psicólogo vestirse así le hacía sentir seguro, bonito y único. Es inteligente y comprende lo que sucede a su alrededor mejor de lo que aparenta.

Hyunjin se sentó con cuidado, el frío nocturno le hacía pensar demasiado en la situación. Cierto temor rondaba su mente. Seungmin se sentó también, para observarlo. Sentirlo cerca le era grato, lo mucho que había evolucionado en su relación con él le gustaba, pero a medida que avanzaba en su diario podía llegar a concluir qué Hyunjin lo veía como una protector.

Ese asunto, sin embargo, fue el último de sus pesares durante, por lo menos, las dos semanas siguientes. Con los gemelos sin acudir al colegio, con Yongbok y su nueva forma de vida, además del psicólogo, tanto Christopher como él sentían qué ya no podían seguir. Mas, al concluir la tercera semana desde que comenzó su gran angustia, el problema vio la cúspide.

Christopher tomó la mano de Minho, este la de Seungmin, los tres frente al escritorio del profesional. El psicólogo los había llamado después de su última sesión con los gemelos, dijo que era algo de seriedad. Los miró con pena, acomodó sus gafas antes de tomar un poco de aire y valor para contarles su conclusión.

— Hay un hombre... Aparentemente el profesor de Idiomas. Pude averiguar por medio de Jisung qué es eventual.

— Sí, su profesor estaba incapacitado y el colegio asignó uno temporal —asintió Christopher. El psicólogo los miró, a cada uno, con comprensión.

Corazón de un cuento roto (Hyunmin )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora