・⁺ 𝐎𝐍𝐋𝐘 𝐘𝐎𝐔《𝙺𝚘𝚘𝚔𝚅》

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Jimin se sentía profundamente agradecido por tener una llave de repuesto que le permitía entrar a la casa de su mejor amigo. Ya que en esa situación, dudaba siquiera que le hubiera abierto la puerta. Sobre todo luego de haberle dicho que deseaba un tiempo a solas. Al adentrarse, fue recibido por la habitual atmósfera de soledad y silencio que siempre parecía envolver el hogar de los Kim. Esta triste realidad calaba en lo más profundo de su corazón, ya que conocía a la perfección el impacto que la soledad tenía en su mejor amigo. Por ello, se había propuesto evitar en la medida de lo posible que Taehyung se sintiera solo.

Un suspiro profundo se escapó de sus labios, mientras que la noche parecía impregnada de tristeza, como si hubiera sido testigo de los acontecimientos recientes. Sabía que las cosas podrían haber terminado de una manera mejor y esa noción le generaba una carga adicional de culpa, ya que se consideraba responsable de la situación en la que se encontraban.

Con determinación, comenzó a ascender por las escaleras que lo llevarían a la planta alta, donde se encontraba la habitación de Taehyung. El latido acelerado de su corazón retumbaba en su pecho, revelando su mezcla de miedo e incertidumbre. A pesar de saber lo que tenía que hacer, se sentía perdido respecto a las palabras que debería decir. Aun así, se esforzaba por dejar a un lado sus miedos e inseguridades, recordándose constantemente que todo saldría bien y evitando que estas lo dominaran. Estaba decidido a no permitir que esas emociones negativas tomaran el control, manteniendo viva la esperanza de que su intervención pudiera traer consuelo y encontrar una solución para la difícil situación.

Admitía que sentía un profundo temor por el estado en el que pudiera encontrar a su amigo. La sola idea de verlo sumido en la tristeza le resultaba aterradora, y el pensamiento de que pudiera ser en parte responsable de ello lo abrumaba de sobremanera.

Desde que Taehyung entró en su vida, todo cambió de forma sorprendente. A pesar de las dificultades que podía estar enfrentando en su relación con sus padres, tuvo la dicha de experimentar la felicidad que él le brindó. Se dio cuenta de que durante mucho tiempo había anhelado algo por parte de sus propios padres, algo que Taehyung e, incluso su hermano ya le estaban proporcionando. Sentía un profundo remordimiento por el dolor que su egoísmo les había causado, especialmente ahora que era consciente de los sentimientos de su mejor amigo hacia Jungkook. Solo con pensar en eso, sentía una oleada de tristeza que lo embargaba y deseaba llorar. Había vivido con un miedo constante durante todo ese tiempo, sabiendo que si algún día perdiera a Taehyung o a su hermano, no se sentiría capaz de seguir adelante.

Sin embargo, ahora las cosas eran diferentes. Comprendía que el apoyo y la fortaleza que podía recibir de los demás eran importantes, pero lo más crucial residía en la fuerza que él mismo era capaz de generar. Había llegado a un punto en su vida en el que valoraba su propia fortaleza interior y estaba decidido a desarrollarla aún más, a pesar de saber que tenía un largo camino por delante. Aunque los desafíos podían resultar abrumadores, se sentía feliz y satisfecho de haber dado el primer paso en esa dirección.

Al igual que siempre, la puerta de la habitación de su mejor amigo estaba abierta. La razón era que desde muy pequeño, Taehyung creía que así sería capaz de escuchar a sus padres en caso de que volvieran a casa. Lleno de preocupación, Jimin se acercó a la habitación con cautela y se asomó al interior. Un dolor punzante se apoderó de su corazón al escuchar los sollozos entrecortados que provenían del bulto oculto bajo las sábanas.

Jimin se acercó lentamente, sintiendo un nudo en la garganta mientras observaba a su amigo sumido en la tristeza. Quería aliviar su sufrimiento, encontrar las palabras adecuadas para consolarlo y hacerle saber que todo estaba bien. Su corazón latía con fuerza en su pecho, la preocupación y la culpa se entrelazaban en su mente.