Capitulo 51

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DULCE.

Desido ser sincera con ellos, diciéndoles como en mi anterior escuela no dejaban de molestarme. Ellos escondían mis cuadernos y rompían mis tareas siempre que las llevaba, por eso la gente me decia qué era muy tonta y no me pasaban de grado.

Nunca supe porque lo hacían, yo jamás los moleste y sin embrago ellos cada ves eran más crueles. Intente decirle a la maestra pero uno de ellos era su sobrino y nunca me ayudo. Y cuando intente decírselo a Amelia ella solo se rio diciendo que no fuera cobarde, qué me defendiera y ya pero no me ayudo en nada.

Cuando intente defenderme y les dije que no me molestaras, sacaron el papel de los baños y mojados me lo tiraron. Eso dolió mucho y llegue a mi casa con muchos morados. Claro, se lo oculte a papá, no quería que supiera que era cobarde.

--Ay bebé, lamento mucho lo que te paso. Pero prometemos qué si algo así llegase a suceder, siempre te creeremos y si es necesario sacarte de la escuela lo haremos con tal que estés bien.

Abrace a Daddy y luego mis otros daddies se unieron, un poco más tranquila por ese abrazo y su promesa dije:

--Esta bien, estoy lista.

Cok un beso me dejaron ir y camine directo a la maestra, ella me sonrió.

--No se preocupen por nada, ella está en buenas manos. Y yo también prometo que si alguien te trata mal te ayudaré y llamaremos a tus papis. Ahora vamos a conocer a tus compañeros.

--Adiós daddies, los voy a estañar.--se me corto un poco la voz.

--Nosotros también pequeña.--dijeron a la vez.

Cuando se fueron no pude evitar temblar un poco, y a paso lento camine detrás de la maestra entrando al aula. Adentro habían muchos niños pero no tanto.

--Buenos días niños.

Todos contestaron, estaban sentados y no hacían desorden, no como en mi antigua escuela.

--Ella es Dulce, es su nueva compañera. Espero puedan llevarse bien y darle una bienvenida cariñosa.

Todos dijeron "si maestra" como si fueran robots. Luego me guió a mi asiento qué era el último de la segunda fila. Luego empezaron las clases, y nos enseñaron los números antes de salir a receso.

Fue cuando más asustada estaba, no quería que me molestaran pero ma agradaría tener a un amigo con quien hablar.

Cuando salimos con las loncheras todos se sentaron en grupo y como nadie parecía notar mi presencia, tuve que sentarme en una banca para comer sola mi merienda.

Termine la mitad de mi sandwich y comí todas mis fresas con un poco de agua para pasarlo. Sin embargo, no logré terminar mi comida, estaba muy triste para terminarla.

Después del receso regresamos a clases, y todo fue muy normal y aburrido. Cuando nos pusieron a jugar con los peluches qué habían ahí me fui a un rincón para que no vieran lo sola qué estaba.

Luego la mañana termino y nos listamos para salir de ahí. Me quede esperando a mis daddies o al menos a uno de ellos, y cuando papi aprecio por la puerta no pude evitar saltar para salir corriendo en su direccion. El al verma se agachó con una gran sonrisa y me atrapó en sus brazos, me aferre fuerte a él y espere que me sacara de esta tortura.

--Hola mi amor, te extrañe mucho.

--Yo también te extrañe papi.

--¿Como se porto maestra?.

--Muy bien, es una niña muy educada. En su cuaderno lleva la plana qué tiene que hacer en su casa para mañana.

--Excelente, hasta mañana.

Papi empezó a caminar y cuando le dio la espalda a la maestra agite mi mano hacia ella en forma de despedida.

Ya quería llegar a casa y no sentirme ignorada o insibible, insi... Como sea.

Me sentó en el asiento trasero y me aseguro, luego el se fue detrás del volante y nos fuimos a casa. En el camino hablamos.

--¿Como te fue mi amor?

--Bien, aburrido.

--¿Hiciste amigos?

--Si, hubo un par de niños que me hablaron pero no fue mucho tiempo.--menti.

--No te preocupes bebé, es tu primer día. Veras como mañana o pasado tendrás a alguien con quien hablaras todo el tiempo.

Y aunque quise creerle no fue así, pase toda la semana con el mismo resultado, por más que intente hacer amigos y asercarme a alguien ellos me hablaban poco y luego solo se iban sin más.

El sábado por la tarde todos estábamos en casa. Y quería aprovechar ese tiempo para pasar juntos ya qué casi no nos veíamos.

--Daddy...

--Dime bebé.

--¿Podemos ver una película hoy?

--¿Terminaste tus tareas?

--Si.

--Bien, solo dejame avisarle a tus otros papás para que bajen y la veamos todos juntos.

Aplaudi emocionada, por fin pasaría tiempo con ellos. Extrañaba esas tardes de películas y mamilas.

--¿Podrías hacerme una mamila? De chocolate.

Río un poco.--Claro que si bebe.

Cuando mis daddies no bajaban, subimos a buscarlos y juntos volvimos a bajar al salón de cine. No sin antes llevar a nube con nosotros.

Nos acomodamos y disfrutamos de una tarde relajada y después de mi mamila y casi la película a terminar me quede dormida en los brazos de papi en medio de los tres.

Sin duda esto es lo mejor que me a pasado.





Mabel dice:

Holiiii, se que prometí que ayer subiria un cap pero ahora estoy trabajando de niñera y me dejan rendida esos pequeños demonios jajaja.

Lo siento, pero prometo que hoy en la noche tendrán no uno si no dos caps para compensar el de ayer, solo no me maten 😭.

Gracias por leer, los amo. ❤️

Mi Dulce InfiernoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora