Konoverso : Dos caras de la misma moneda

20. El primer novato

Un golpe cayó en la cara de Ninja, provocando qué este cayera en el suelo de golpe.

Poom*

Luego de tocar el lugar del golpe, Ninja solo levanto su vista enojado.

Ahí estaba Arquero junto con otras variantes.

Arquero comenzó a hablar, siendo el que le había dado el golpe.

-¿Qué crees que estas haciendo?

-No es de tu incumbencia.

-¡Si pones en peligro vidas entonces si! ¡Qué crees que pasara si buscas a Renegado en ese estado!

Arquero tomo a Ninja por el cuello de su chaqueta para alzarlo a su altura.

-Casi matas a Horóscopo, el es de tu compañero a partir de ahora.

-No murió, ¿verdad?

-¡No! ¡Esta en la clínica recuperándose de varias misiones consecutivas!

-¡¡Solo estoy haciendo mi trabajo!!

Ninja empujó a Arquero hacia atrás con fuerza, dejando a ambos con una ligera distancia.

-Se que quieres acabar con el, pero piensa por encima de ti mismo.

-¿Qué haga qué?

Ninja apretó sus puños después de escuchar eso.

-¡No me jodas! ¡Te haces llamar Kazuma Satou diciendo esa mierda! ¡Qué a ninguno se le olvide quienes somos!

Ninja comenzó a apuntar a todos y a cada uno de aquellos que estaban a su alrededor.

-Somos basura qué haría lo fuera con tal de ganar o no morir. Ya sea por conveniencia o venganza, somos ovejas negras. ¡No se atrevan a verse como ovejas blancas! ¡No frente a si mismo!

Aquellas palabras lograron adentrarse mucho en algunas variantes.

Pues era verdad, la mayoría de los presentes había hecho cosas que moralmente eran desagradables.

Incluso Lujuria qué estaba presente, sabiendo que el no era mejor que nadie, decidió quedarse en silencio.

Entre la multitud se acercó Fem, quien trato de tomar a Ninja por su brazo.

-... ¡!

Pero Ninja zafó su mano con fuerza para evitar cualquier contacto.

-Si quiero buscar venganza es mi puto problema, no se metan.

Ninja se dio la vuelta para comenzar a irse del lugar.

Arquero solo pudo suspirar cansado y estresado por la situación.

*Suspiro*

-Qué le pasa a ese tipo.

Este tenía intenciones de irse de una vez por todas a descansar.

Pero había un mal sentimiento en su boca, algo que lo estaba molestando.

Claro y por supuesto que sus sentidos estaban mejor refinados qué la mayoría.

Tanto que... casi nunca se confundían.

***

Erudito se acercó corriendo hacia el cumulo de variantes a toda prisa.

Arquero lo vio confundió por esto.

Pero fue lo que dijo Erudito poco después de estar frente a él lo que le detendría el corazón.

-¡S-son ellos...! ¡Apareció Renegado! ¡Ellos están!