Bulma abrió sus ojos y giro su cabeza, encontrándose con los ónix del apuesto saiyajin que la miraban intensamente. Ella alzó su mano izquierda húmeda por el agua y la colocó en la mejilla de Vegeta, acariciándola con suavidad de arriba hacía abajo.
El príncipe no podía soportar estar tan cerca de ella y no poder besarla, así que acercó su rostro hacía el de ella, ambos cerraron los ojos y acercaron sus labios, besándose de una manera lenta. Bulma lo abrazó por el cuello, acercándolo más a hacía ella, el beso comenzó a intensificarse, dió un brinco al sentir como una de las manos del saiyajin bajaban hacía su trasero, sancandole un jadeó. Vegeta aprovecho esto para meter su lengua en cavidad bucal para jugar con la suya, el deseo entre ambos era muy notorio, ansiaban tenerse el uno al otro.
Bulma se separó de el por falta de aire, pero eso no evitó que los besos de Vegeta bajarán por su mandíbula y cuello, ella solo suspiraba de placer, un fuego dentro de ella había comenzado a quemarla por completo.
Tampoco quiso quedarse atrás, así que comenzó a hacer caricias por los brazos y pecho del saiyajin. Gimió cuando sintió la caliente lengua del saiyajin jugar con sus pezones que ya estaban más que erectos.
—Eres deliciosa, mujer, tu olor me vuelve loco.
—Ah, sigue, quiero más Veg.
Sintió una mano en su otro pecho que estrujaba su pezón con fuerza, estaba cegada de placer, sus manos curiosas bajaron hasta la virilidad del saiyajin, apenas lo tomo y el lanzó una mezcla de gruñido y gemido, sentir sus pequeñas manos en esa zona lo había puesto aún más caliente.
—L-lo tienes muy g-grande y duro.
—Y es completamente tuyo, aunque...—dijo con su pezón en su boca y alzó su cabeza para darle un corto beso en los labios—Podrías usar esa boquita allá abajo.
Bulma se sonrojó, moría de ganas, pero antes de continuar el tenía que saber algo.
—Soy virgen—soltó de repente dejando a Vegeta sorprendido
—¿De verdad nunca has estado con nadie?
Vegeta era un amante experto y apasionado, claro que miles de mujeres habían pasado por su cama, pero Bulma por ser quien era, era especial, la quería y haría que fuera glorioso para ella, es una saiyajin, pero sería tierno con ella para no lastimarla.
—No, quiero que tú seas el primero—sentía su rostro muy caliente, apostaba a qué estaba peor que un tomate—Tomame, hazme tuya, príncipe.
El le sonrió con ternura y acarició los labios granate de la hermosa fémina con su pulgar y la besó con más pasión e intensidad, se sentía dichoso de ser el primero, aunque a él también le hubiera gustado que ella fuera la primera, nunca se imaginó que se verían de nuevo. Definitivamente la haría disfrutar y enseñarle todo el placer que solo el puede ofrecerle.
ESTÁS LEYENDO
Reino Caído. || V.B ||
RomanceLa hermandad es un lazo que jamás se puede romper o al menos eso era lo que pensaban el rey Vegeta y su hermano Bardock, cuando el primero tomó el trono, su relación cambio y para mal. ¿Serías capaz de asesinar a tu hermano para tomar el trono y en...