—Tranquila Bulma, si sigues así de inquieta, no podré finalizar tu maquillaje.
—Lo siento Milk, sólo es que estoy demasiado nerviosa, me voy a casar y nos presentaremos cómo reyes.
—Y estoy muy feliz por los dos, ha pasado un año desde aquel caos, después de todo ambos se lo merecen, es increíble ver cómo su alteza logró reconstruir el reino, quedó intacto como alguna vez lo tenía el rey Vegeta III.
—Mi futuro esposo es capaz de todo, estoy muy orgullosa de lo que ha hecho por el reino desde que volvió, ahora sí me siento como en casa, pero dime... ¿Qué tal vas con Goku?—las mejillas de Milk se pusieron rojas
—No sé de lo que estás hablando.
—Oh claro que sí, ¿Acaso crees que no me he dado cuenta de la atracción que hay entre ustedes? Se verían lindos juntos.
—El me pidió que fuéramos juntos a la boda y que bailará cada pieza musical con él.
—Ya vamos avanzando.
..
.
Bulma se encontraba parada en la entrada, esperando a Goku quien personalmente la entregaría a Vegeta, miles de sentimientos la invadieron, le hubiera gustado que su padre lo hiciera, pero no debía llorar en su boda, al menos no de tristeza. Sonrió cuando vio al saiyajin llegar con una armadura bastante elegante.
—Lo siento por la tardanza Bulma, pero Milk me obligó a utilizar esto, es demasiado incómodo, por cierto te ves muy bonita.
—Gracias, además luces muy bien, sólo será durante la ceremonia, después puedes ponerte otra cosa—Goku le agradeció con la mirada y le sonrió
—¿Estás lista?—le pregunto al tiempo que las puertas del palacio se iban a abriendo
—Por supuesto.
Goku le extendió su brazo y la música tradicional comenzó a sonar, todo el mundo se quedó en silencio y admiraban la belleza de Bulma, había dejado impresionados a todos, pero más al saiyajin que estaba esperando por ella. Ambos se miraron con una sonrisa, se admiraban el uno al otro, habían organizado esa boda durante meses, pero sobre todo Bulma quería que todo fuera perfecto.
Cuando llegaron al altar Goku le extendió la mano de Bulma y Vegeta la tomó y la posicionó a su lado. El saiyajin al ver a los futuros esposos tan felices, las ganas de casarse se hicieron presentes y había llegado una cierta pelinegra a su mente, sonrió y se dirigió a su asiento, la cuál lo estaba esperando dicha pelinegra.
—Te ves preciosa, mujer.
—Gracias, tú estás muy guapo.
La ceremonía transcurrió normal, hasta que llegaron los votos.
—Yo Vegeta Ouji, te tomó a tí Bulma Brief para amarte siempre, en las buenas y en las malas, en la salud y el dolor y atesorarte por el resto de mi vida.
Echallote había llegado con los anillos en un cojíncito blanco y Vegeta tomo uno de los anillos para ponérselo en el dedo a Bulma.
—Yo Bulma Brief, te tomó a tí, Vegeta Ouji, para amarte siempre, en las buenas y en las malas, en la salud y el dolor y atesorarte por el resto de mi vida.
La peliazul tomó el otro anillo y se colocó a Vegeta. Los dos se miraban con un profundo amor, la que alguna vez fue reina estaba tan contenta, su labor había terminado, así que se fue a sentar con su consuegra.
Ahora seguía el pacto de sangre, los dos se hicieron un corte en la mano y la derramaron sobre una copa, los que los solían casar eran una especie de brujos, ya que solían decir un hechizo y si la sangre de ambos cambiaba a dorada era porque ambos estaban destinados y tendrían una descendencia poderosa, pero sin embargo si se ponía negra y viscosa, era todo lo contrario.
Para buena suerte de los nuevos reyes, la sangre se puso dorada y así finalizó la ceremonia, el brujo había notado otro detalle mientras hacía el hechizo, pero prefirió no decir nada, más adelante ellos se darían cuenta por su propia cuenta.
ESTÁS LEYENDO
Reino Caído. || V.B ||
RomansaLa hermandad es un lazo que jamás se puede romper o al menos eso era lo que pensaban el rey Vegeta y su hermano Bardock, cuando el primero tomó el trono, su relación cambio y para mal. ¿Serías capaz de asesinar a tu hermano para tomar el trono y en...