👑05.

115 23 4
                                    

—Escucha Vegeta, todo lo que toca la luz es nuestro reino, habrá cierta edad en la que yo no podré seguir gobernando y es ahí cuando tú tomarás tu puesto como el rey, junto a la mujer que será tu esposa a esa edad—los ojos negros de su hijo lo mir...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Escucha Vegeta, todo lo que toca la luz es nuestro reino, habrá cierta edad en la que yo no podré seguir gobernando y es ahí cuando tú tomarás tu puesto como el rey, junto a la mujer que será tu esposa a esa edad—los ojos negros de su hijo lo miraron con curiosidad

—¿Esposa? ¿Tendré que casarme papá?—dijo con una mueca

—Claro que si, es importante que tengas una compañera para compartir todo esto, además son demasiadas obligaciones en el trono, agregándole que la descendencia también lo es, deberás de traer por lo menos un heredero o heredera para que tome tu lugar, pero aún falta mucho tiempo para eso.

—Yo quería reinar sólo todo esto, además las mujeres son demasiado empalagosas mi madre y Bulma lo son, incluso llegan a estresarme y hacerme sentir muy incómodo—el rey se ríe ante la queja de su hijo

—Son así contigo porque te quieren, escucha hijo—se hincó a su altura y lo tomo de los hombros—a mi me educaron que los sentimientos te hacen ser débil, tan sólo debías de conseguirte a una esposa para tener hijos, pero las mujeres no son objetos, al igual que tú y yo son saiyajines, crecí con ese estúpido pensamiento hasta que me case con tu madre, tenía planeado educarte de la misma forma, pero sabes lo único que conseguía ser así?—el crío tan atento a la plática de su padre nego con la cabeza—Era ser odiado y despiadado, el reino que tenemos ahora no era lo mismo hace años, tan solo había miedo reflejados en los rostros de las personas, odio y soledad, así no te podrías ganar la lealtad de tu gente, tan sólo te obedecerian por el miedo que les transmitias y aunque no lo creas ser así era ser débil, los sentimientos de tan la fortaleza para seguir adelante, yo entreno y lucho por mantener este reino por ti y tu madre, porque es nuestro hogar y porque el día de mañana, quiero que seas un rey respetado, no uno que inflige el miedo.

—Entiendo, ¿Pero que hay de mi tío?—el rey se desconcertó un poco con la pregunta de su hijo

—¿Qué ocurre con el?

—¿El también recibirá órdenes mías?

—Por supuesto, así como el recibe y obedece las mías, también recibirá las tuyas, no deberás de ser un rey egoísta y avaricioso, los saiyajines tenemos la fama de ser fríos y despiadados y todo por nuestros antepasados y eso digamos que nos sirve para mantener a los enemigos lejos, pero no por eso, vas a ser igual o peor que ellos, tan sólo escucha a tu corazón príncipe.

—Claro padre, lo haré, pero...—los oscuros ojitos del príncipe se desviaron hacía un lugar donde había oscuridad, los rayos del sol no golpeaban esa zona, dándole un aspecto escalofriante—¿Qué hay de las sombras? ¿Ahí también podré ir y gobernar?

—Está muy lejos de nuestro reino, nunca debes de ir allá.

—Creí que un rey podría hacer lo que quisiera—el rey sólo se rió y comenzó a caminar hacía el lado contrario

—Ser rey es mucho más que hacer lo que quieres—dijo mientras lo miraba de reojo, despertando curiosidad en su hijo

—¿Hay más?—le pregunto emocionado

—Por supuesto hijo, nosotros tenemos la élite, deberás de ponerles arduos entrenamientos para que estén listos para cualquier batalla, cuidar de los saiyajines que habitan este planeta, hacer negocios con otros seres de distintos planetas a cambio de comida, minerales, piedras preciosas, entre otras cosas que pueden ser vendidas y tener una buena solvencia económica y una cosa importante es que siempre debes de tener a tus enemigos de cerca.

—Mmm para así tener que vigilar sus movimientos y no haga un ataque contra mi, ¿No es así? Además podrías vender algunas máquinas de curación que tenemos para ganar más dinero, escuché que le decías a mi madre que habían demasiadas, así que sería un buen trueque—el rey se sorprendió ante la inteligencia de su hijo, a pesar de tener cuatro años tenía un coeficiente intelectual muy alto

—Exactamente hijo, que buena idea me acabas de dar, regresando a casa le diré a Turles que se haga cargo de todo.

Padre e hijo se sonrieron, ambos tenían una buena conexión, al rey se le hinchaba el pecho de orgullo al ver el potencial que tenía su hijo, sabía que sería un buen rey.

Padre e hijo se sonrieron, ambos tenían una buena conexión, al rey se le hinchaba el pecho de orgullo al ver el potencial que tenía su hijo, sabía que sería un buen rey

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Reino Caído. || V.B ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora