Entrada 5

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"Camiri tiene un rio llamado Parapety cuya traducción del guaraní de las ramas que migraron al chaco al que pertenece el pueblo lista específicamente las palabras "Muerte tragedia" siendo una buena forma de darse una idea de la fama que este puede llegar a tener.

Cada año suele provocar una o dos muertes, algún niñato que se metió en uno de los remolinos, o algún borracho que fue a parar en una zona en la cual era muy profunda.

Lo realmente aterrador en el río son los cambios bruscos de profundidad en este, durante varios metros puedes caminar con el agua hasta las rodillas y al siguiente paso caes en un pozo de 3 metros de profundidad bajo el agua.

Realmente hay zonas las cuales son completamente seguras con depósitos de arena que asemejan playas en la que las personas suelen ir durante el verano para pasar tiempo con sus familias, además de que hay varios puentes por los que se puede transitar de manera segura.

Yo solía juntarme con varios niños a jugar cerca de un puente que estaba en un terreno que le pertenecía a una familia de norteamericanos que conocían a mis padres, razón por la cual nos dejaban jugar por la zona.

Ese día mis padres estaban peleándose como de costumbre y ya habían pasado a tirarse cosas así que preferí irme una hora antes a esperar a mis amigos de la cuadra. Me senté a esperar al borde de aquel puente colgante por el que no pasaba ningún auto ya que este solo era peatonal; me la pase cantando y moviendo las piernas de un lado a otro balanceándome en aquel viejo puente sobre el Parapety mirando al agua que corría suavemente por la épocas

Ahí lo vi flotando.

Lo primero que vi fue su rostro y cabello, por los cuales durante unos escasos instantes casi saludó como si este aún estuviese vivo, su cabello rubio heredado por su padre debido a que este era un ingeniero petrolero que vino desde EEUU y terminó teniendo un hijo bastardo con una mujer la cual cada día enloquecía un poco más, volviendo su comportamiento errático y cambiante, a la cual abandonó cuando recordó que tenía un matrimonio feliz en Ohio. El aspecto que su hijo adquirió debido al cruce de genes lo hizo especialmente popular con las chicas por su cabello rubio, ojos azules, alto y delgado, llegando a interesarme a mi también por su actitud tan apática además de los constantes moretones y arañazos con los que llegaba a la escuela, dirigida en ese momento por un convento de monjas franciscanas, razón por la cual era constantemente llevado a dirección y durante mucho tiempo fue en realidad el centro de atención de casi todo el colegio.

Él se sentaba a lado mío, siempre podía tener conversaciones gratas con él, aún con lo apático que era, aún con lo violento que se podía comportar con aquellos que intentaban meter con él, él realmente me gustaba tanto como le puede gustar a una adolescente con serios problemas de identidad.

Pero ahí estaba Daniel, me fue imposible no reconocerlo.

Me quedé estática sin comprender lo que sucedía.

Su rostro pálido no tenía emoción.

Sus ojos casi sin color no miraban al mismo lugar.

Su boca estaba abierta dejando pasar agua adentro.

Su cuello aún unía su cabeza con el torso pero por un trecho mórbidamente largo.

No tenía extremidades o no las llegué a ver.

No se movía, solo fluía con la corriente.

Mientras yo lo veía irse durante minutos eternos, sin moverme, sin hablar, solo esperando a reaccionar en algún momento.

Cuando otro de mis amigos llegaron me encontraron pálida, estaba en shock.

Me llevaron al hospital donde reaccioné al día siguiente, y callé lo que observé hasta un día después cuando fui a la policía, en ese momento el policía de guardia era el Oficial Jiménez

Les dije lo que había pasado, como lo vi y exigí una investigación al respecto, llorando del susto.

Pero en su lugar me dijeron que conocían a su madre y dijeron que su papá se lo había llevado a EEUU para que viviese con él.

Contactaron a mis padres para llevarme al psiquiatra y que me diera algo para prevenir alucinaciones.

Fui drogada por más de 3 años mientras aún asistía a la escuela siendo siempre tachada como la loca de la clase además de perder meses enteros de recuerdos de toda esa época, tuve que guardar ese recuerdo en mi bóveda, convenciéndome a mí misma de la falsedad en mi realidad en ese momento"

Bajo una ironía sacada de un mal libro de chistes, aquel niño me mandó con él psicólogo. Raúl tomaba nota de casi todo lo que decía, era un hombre con un trayecto mucho más imponente que el mío a pesar de tener casi la misma edad o tal vez incluso menos.

"¿Nunca tuviste forma de comprobar que si lo que viste era real o no?" preguntó.

"Una vez busqué su nombre en Facebook pero no lo encontré y supuse que se cambió el nombre" respondí.

"Tal vez hablar con su madre te de una..."

"Ella se pego un tiro medio año después" corté.

Hubo un silencio incómodo después de que haya cortado aquel intento de buena fe por ayudarme a superar este trauma suprimido.

Continúe hablando:

"Algunos de los nombres que Alejandro mencionó, si aparecieron en las noticias, locales y departamentales, pero siempre como personas desaparecidas nunca como muertos, además de varios otros los cuales nunca aparecieron en las noticias o fueron anunciados"

Pero no fueron todos los nombres que él dijo.

El simple hecho de que haya mencionado a Daniel, con aquel aspecto de aquel día en el que lo vi por última vez, además que su desaparición nunca fue anunciada como tal, ni siquiera comentada.

El hecho de que dijera muchos otros nombres con tanta seguridad y que los describiera como si fueran niños" se me empezaron a acumular de nuevo las lágrimas en los ojos.

Tome un amplio respiro queriendo evitar la tertulia de nuevo.

"Victoria creo que tu sabes que los niños pueden ser muy imaginativos" añadió Raúl "No es probable que tantas cosas que dijo sean reales, y puede que no sean más que meras coincidencias, tú intentando darles un sentido llegaste relacionarlas con tu propia vida y te llevo de vuelta a un recuerdo que posiblemente sólo haya sido una alucinación creada por tu mente para distraerte de la situación familiar en la que te encontrabas en ese momento"

"Puede que sí" confirme en voz baja casi susurrando pero lo suficientemente fuerte como para que él me oyera "es lo más probable"

"Ves, tu misma puedes llegar a la misma conclusión si lo pasamos por los lentes de la lógica"

Empecé a reaccionar como si estuviera cayendo en cuenta de un chiste que no había entendido, sin sobreactuar, haciéndolo con naturalidad.

"Bueno este fue nuestro tiempo hoy, espero verte la próxima semana" dijo al cabo de 15 minutos.

Salí de la consulta agradeciéndole por su ayuda.

"Mis pelotas verás la próxima semana" dije en voz baja al encontrarme en la puerta de la calle.

Acto seguido le marqué a Patrick.

"Escúchame, necesito que me hagas otro favor..." Dije aún un poco insegura de lo que haría a continuación.

Hablar con el psicólogo en serio fue de bastante ayuda, el nivel de coincidencias en este caso era demasiado grande como para llegar a pensar que esto no había sucedido.

Por fin, haberlo dicho en voz alta me ayudó a tener mis pensamientos en orden.

Espero Luz y Kevin no estén molestos por haber dejado su sesión casi al empezarla, suerte que mi asistente les dijo que tuve una emergencia sanitaria.

Sobre todo porque ahora les tendría que hacer una visita.

No estaba loca, tengo que comprobarlo.

Caso 7B: Casa ViejaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora