Caso 7B: Casa Vieja

Entrada 32

Aunque conocía la forma de trabajar de estos muchachos, sinceramente no esperaba que la máquina estuviera lista para las 7 de la mañana.

Para variar Arminda no estuvo contenta con Elena (aunque le explicamos de manera bastante coherente como fue que se enteró de la situación) formará parte de la misión ahora, principalmente porque en sus propias palabras "Conozco putas a las que les confiaría más información que ella", pero al ser Arminda realmente poco o nada de atención le hicimos, irónicamente tampoco sus hombres en esta ocasión. Aunque al final ella también admitió que ella sobrevive en un negocio en el cual no sobrevives si eres muy confiado.

"Espero no te moleste que tenga una pistola cargada para eliminarte en caso de ser necesario" dijo en un tono que no pude adivinar si lo decía en serio o no.

"Me ofendería si no me considerases una amenaza" contestó Elena,

Ambas soltaron una risa que tampoco pude saber si era genuina o fingida.

Aparentemente tener el ego inflado como un globo aerostático, ayuda a llevarte bien con personas paranoicas, lo cual aún con años de estudios aún no entendía, pero al menos nos servía.

Al recoger el dispositivo bajamos junto con los gorilas de Arminda, quienes llevaban chalecos militares y estaban bastante bien armados como para ser simples civiles, el joven dueño de Ein Sof abrió los ojos como platos cuando nos vio pasar, pero de algún modo al salir los dos gorilas salieron cargando la maquina ya reparada, además de un par de audífonos y reproductores MP3

"Ese chico es un genio" dijo Joan al entrar al auto.

Llegamos a la discoteca, pese a que preguntamos no habían noticias de don Carlos, solo que se encontraba en un cuarto inconsciente.

Pero Cristian estaba esperándonos junto a la misma entrada del primer día en el lugar. Su cara se veía más cansada que ayer, no parecía haber dormido mucho, su rostro no era tan expresivo como el primer día.
Nos acercamos Elena y yo para presentarlos.

El nos informó del estado de la organización de don Carlos, si este moría, habría una disputa interna por el poder, debido a eso están haciendo guardias para vigilar el cuarto y al doctor con su enfermera mientras lo atienden, en caso el intento de asesinato haya sido coordinado con algún miembro interno.

Esto también nos daba una fecha límite a nuestra alianza, porque quien mantiene unida la coalición de Arminda y Reynaldo era justamente aquel hombre al que le pusieron 3 plomazos, quien sea que lo suceda en el poder no podría ser ni la mitad de benevolente.

"Esto es demasiado estresante" resoplé.

Elena parecía algo desentendida de la conversación como si estuviera pensando en otra cosa, y justo en medio de toda la información que estaba soltando ella simplemente se dió la vuelta yendo en dirección a Arminda quien estaba hablando con Joan

"Arminda, disculpa" dijo mientras caminaba en su dirección "¿Dónde fue que encontraron la máquina?"

"La encontramos en la casa en Chorety de la que hablaron, Reynaldo también conocía el lugar así que fue fácil dar con el lugar"

"¿Cuando fueron había alguien?"

"En realidad no" respondió haciendo una mueca de descontento "pensamos que habría más resistencia por eso mandamos a nuestros mejores hombres bien armados pero en realidad solo estaba la máquina tirada"

"¿Sabes cómo llegar ahí verdad?"

"Si"

"Entonces tenemos que ir pronto para conocer los puntos de los rituales, si hay alguien que lo sabe, serán los espíritus que le hablaron a mi hermana"