XIII

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Desde la llegada de la celebridad a la escuela, cuyo nombre realmente era Hiyoko Saionji, las cosas comenzaron a ser más movidas. Pero no era raro ver grupos de chicas en un pasillos, alrededor de la rubia, mientras elogiaban sus refinadas facciones y su trabajo como modelo. O a veces había grupos de chicos pidiendo su número o invitándola a alguna tarde divertida. No hacía falta decir que la rubia disfrutaba de la atención que recibía, cualquiera diría que le gustaba estar rodeada de sus fans. Claro que ella tenía otros motivos lejanos a la apreciación ajena, y estos quedaron establecidos cuando conoció a cierta persona, o más bien, "reconoció".

Justamente a la hora de salida, Hiyoko se encontraba junto a la gran puerta de entrada al recinto mientras se entretenía mirando las últimas noticias en su celular. Estaba esperando a alguien. Escuchar la voz de un adolescente animado mientras hablaba con su compañero y se despedían poco después fue todo lo que necesitó para desviar su foco de atención y dejar de lado su celular. Ahí estaba él, el chico que tanto estuvo esperando. Una sonrisa se asentó en su rostro y, sin pensarlo dos veces, se acercó a él.

-Ey, Amami. _llamó al susodicho, quién le miró con ligera confusión en el rostro_ Te estaba esperando.

-¿Es así? ¿Con qué motivo?

-Seré directa. Quiero ser tu pareja. _comentó, el peliverde se tomó su tiempo en procesar sus palabras_

-... ¿Disculpa?

-Novia, pareja, ya sabes a lo que me refiero. _aclaró, acercándose a él descaradamente y abraza do su brazo como lo haría una "chica enamorada", aunque su acción, lejos de agradar al chico, le hicieron sentir una incomodidad insoportable. Claro, contuvo la mueca que luchaba por asentarse en su rostro al tenerla tan cerca y con semejante descaro_

-Lo siento, pero eso no será posible. _dijo en respuesta a sus palabras. Apartando gentilmente a la chica, quién contuvo su molestia repentina para mirarle con sorpresa_ Si me disculpas. _se excusó y continuó con su camino_

-E-Espera- _intentó llamarle de nuevo, pero su sorpresa aumentó al verle entablar conversación con otra chica. Una joven de hebras ___ que apenas acababa de cambiar sus zapatos en los pequeños casilleros de la entrada. Les vio marcharse por su respectivo camino en silencio. ¿Por ella? ¿Por esa cualquiera le había rechazado? ¿A ella? ¿Una modelo juvenil de renombre?

Si hablamos de su historia de fondo, Hiyoko conocía a Rantaro incluso antes de que este conociese a Kaito, siendo que este último era su mejor amigo y era prácticamente inseparables. Asistieron a la misma secundaria, por aquel entonces Hiyoko ya era conocida por su belleza a pesar de ser tan joven, incluso si esto se debía, en cierta medida, al maquillaje que ocupaba para incrementar su belleza natural. Por aquel entonces Rantaro no solía llamar tanto la atención ni era muy propenso a socializar con los demás, solo era un chico corriente. Atractivo y gentil, pero corriente. Aún así, eso no evitó que cierto interés surgiera en la rubia e intentó acercarse a él, desgraciadamente, fue rechazada ante el desagrado que Rantaro parecía sentir por las chicas "falsas".

Él lo sabía. Sabía que ella había ocupado una personalidad falsa y había buscado confort en un espejo y un kit de maquillaje para montar su fachada de niña perfecta. Y usó dichos recursos para intentar obtener todo lo que quería: reputación, atención y el chico que le gustaba, cosa que, desagraciadamente para ella, no logró conseguir. Por ello acercó su trabajo como modelo juvenil. Creía que si lograba hacerse un nombre y ser el foco de atención del momento, eventualmente Rantaro comprendería su "error" al haberla dejado ir, en el momento en que le viese de nuevo, tal vez caería ante sus encantos. Grande fue su sorpresa al saber que no había cambiado nada entre ellos. Aparentemente, le seguía desagradado y no le gustaba para nada el saberlo. Irremediablemente, Hiyoko terminó culpando de todo a la peli___ que ni siquiera conocía. Le culpaba por ser sencilla, aparentemente, por haber logrado lo que ella no, y definitivamente se negaba a dejar las cosas fluir tal cual lo hacían.

Love me like you do [Rantaro Amami x fem!reader] ©RoseSanae55Donde viven las historias. Descúbrelo ahora