Convivencia

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Algunos días después de que las citas concluyeran, las fusiones vivían de una forma tranquila, pues no han habido actividades especiales o extrañas para ellos.

Honey: al fin, tres días de descanso solo para nosotros, no tenemos que preocuparnos por esas locas. —relajandose en una amaca—

Obsidian: pues...ni tan locas, al menos una de ellas no...

Cobalto: —suspira— es que, Honey, salir con una de ellas te hubiera dado una perspectiva diferente a lo que crees que son.

Honey: no quería perder la dignidad saliendo con una... —pone sus brazos detrás de su cabeza—

Obsidian: ajá, ¿cómo perder algo que no tienes?. —toma la amaca de un lado y hace un movimiento brusco—

Honey: ¡ah!. —cae al suelo— hey, ¿y dónde está Olivo?.

Cobalto: seguro se fue al ático, lo he visto subir, pero no sé qué hace exactamente allá arriba.

-Buenas tardes, chicos, hoy tendrán una visita especial, así que por favor comportense.

Obsidian: uff, espero que venga Mint, hace tiempo que no lo veo.

Tocan la puerta principal.

Obsidian: —va hacia la puerta— hace tanto que no los vemos, y la verdad empiezo a extrañarlo. —abre la puerta—

Yuni: ho... —iba a saludar—

Obsidian: —le cierra la puerta en la cara— ... —vuelve a abrirla—

Yuni: laa...

Obsidian: —vuelve a cerrar la puerta— no puede ser, no, no, no... —se recarga en la puerta y cubre su rostro con sus manos—

Cobalto: —se acerca— hey, ¿entonces no son nuestras parejas?

Obsidian: no, son nuestras vigilantes... —seguía de la misma forma—

Cobalto: oh vaya, jeje... —lo mira y alza una ceja— ¿está todo bien?.

Obsidian: mgh...no le vayas a decir a nadie... —destapa su rostro—

Sus mejillas estaban muy rojas, se acerca al de mechas azules, tomándolo de los hombros.

Obsidian: eres el único que es confiable aquí, así que no digas nada...

Cobalto: claro, ¿pero qué sucede?. —empezaba a preocuparse—

Obsidian: en mi cita con Yuni...casi la beso...

Cobalto: —sus ojos se achican— ¡¿QUEEEÉ?!.

Obsidian: ¡shhh!. —le tapa la boca— toda la cita se sentía como si de verdad fuéramos novios, y al final hubo ese momento...no la besé, tengo a Mint, y no lo traicionaría de este modo...

Cobalto: ¡mm!. —toma la muñeca del contrario, alejandolo— al menos no lo hiciste, pobre de él...aunque Mint no es celoso.

Obsidian: sé que no, pero no es correcto, por favor, si ves que las cosas se ponen tensas entre ella y yo, por favor lanzame una sartén o algo.

Cobalto: mm...bueno, está bien...

Obsidian: bien... —se da la vuelta y vuelve a abrir la puerta—

Yuni: ¿ya podemos hablar?...

Obsidian: si...supongo que son las visitas que la creadora dijo...

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