Paracaidismo

25 5 6
                                    

Después de regresar a la mansión, y que todos se quitaran los disfraces y se pusieran sus ropas habituales, todos se juntaron en la sala de estar.

Kira: oye Obsidian, ¿sabes quién eligió tu disfraz?.

Obsidian: seguro un completo imbécil que no tiene conocimientos de mis poderes. —cruza sus brazos—

Kira: jeje, pues Yuni lo escogió.

Obsidian: ... —mira a su pareja— ¿de verdad?.

Yuni: siii, me estás diciendo imbécil?!. —pone una mano en su rostro y finge indignación—

Obsidian: no, no, lo siento, no sabía que habías sido tú. —le toma la mano— lo lamento.

Yuni: ahhh, ¿entonces si hubiera sido alguien más si le estarías diciendo así?.

Obsidian: pues...

Yuni: ohhh, Faty, ¿cuánto falta para ir a la siguiente actividad?.

Faty: mm, pues unas dos horas, pero tenemos que salir una hora antes, porque el lugar está lejos.

Yuni: perfecto... —mira a su pareja— ve a la Sala de castigos, te alcanzo allá.

Obsidian: hm, ¿es en serio?.

Yuni: sii, por insultarme e insultar a los demás, ve y esperame frente al cepo.

Obsidian: tch, ¿superior o inferior?.

Yuni: inferior, andale, grosero.

Obsidian: si, si, acabemos con esto de una vez, no me dan miedo esos aparatos. —se va—

Faty: jeje...Yuni, hay un control que puedes usar, está en el primer gabinete del mueble cerca de la puerta.

Yuni: Sipi, no tardaré. —se aleja—

Faty: je, bueno, Charlie, Kira, ¿pueden ir adelantándose?, es necesario que terminen de preparar todo, nosotros iremos en un rato más.

Charlie: no hay problema. —va hacia la puerta— vamos Kira.

Kira: claro. —va con él— nos vemos allá.

Se fueron.

Faty: Dalia, Nocturna, en cuanto lleguemos, le pediré al chofer que las lleve al punto de encuentro, para que reciban a los cinco.

Dalia: claro que si, cuenta con nosotras.

Honey: Emm, ¿qué tipo de actividad vamos a hacer?.

Faty: Oww, si les digo no será sorpresa, solo diré que quien dio la idea fue Magenta, así que se pueden ir dando una idea.

Cobalto: uff, es que a Mage le gusta mucho lo extremo y no le teme a nada.

Honey: —traga— no me quiero imaginar qué es...

Faty: nada del otro mundo, lo sabrán cuando lleguemos.

Después de algunos minutos, ya todos estaban preparados, las fusiones junto con las vigilantes restantes, salieron de la mansión, entrando a la limusina y yendo a donde sería la siguiente actividad.

Obsidian: hm... —miraba por la ventana con una expresión de molestia—

Yuni: yaaa, no te enojes. —lo toma del hombro y lo sacude—¿para qué me decías idiota?.

Obsidian: je, pues ya saben que no puedo usar manga larga. —voltea con ella— no estoy enojado, tranquila. —le da unas palmaditas en la cabeza—

Con-fusiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora