-¿A dónde llevas a mi hijo?- la reunión había terminado al fin y luego pasamos a dejar en papel los nombres de quienes podían retirarlos, Park y mi hermana incluidos.-El mocoso y yo vamos a comer fuera. ¿Te unes?
-Sigues sin pedir permiso.- gruñó
-Sube- señalé el auto y el mocoso lo hizo. -Tu también- dejé una sonora nalgada antes de caminar hasta el asiento del conductor. -No soy chofer, sube adelante.- alzó una ceja y subió al asiento trasero.
Nena, no sabes donde te metes.
-Quiero comer mariscos.
-Um- afirmé con ese sonido mientras ajustaba el retrovisor hasta encontrar los ojos penetrantes de su madre sobre mí.
Cuando llegamos al restaurante pedidos y el mocoso corrió a los juegos dejándonos a ambos en la mesa -¿Qué intentas? Porque follamos una vez no quie...
-¿Crees que estoy jugando a la familia feliz?- dije con burla. -El mocoso me agrada, es como yo- lo señalé -Y de ti, de ti me gusta lo receptiva que te pones con mi polla dentro de ti.
-Voy a ignorarte desde ahora.
-Dejemos el mocoso y vallamos a un hotel.
-No
-Iré a tu cuarto entonces
-No, dije no
-Deberías dejar de apretar las pierna a entonces- aflojó ambas mientras miraba en dirección a su hijo.
-Deja de jugar conmigo, soy tu superior
-Cuando estamos trabajando, no ahora. No cuando te quiero tocar.
-Lo cual es siempre- gruñó
-Se que te encantaría que así fuera.
-Esto sigue estando mal
-Yoori lo sabe- abrió los ojos en demasía -Deja de resistirte así vemos donde nos lleva esto.
-Al desastre
-Puede, pero puede que no.- volvió a mirar a su hijo.
-No voy a poner en riesgo la vida de mi hijo al irme de aquí porque quieres echar un polvo conmigo sabiendo que somos...
-No somos hermanos, no te atrevas a decirlo- zanjé
La comida llegó y como si nos observara el mocoso también, aún estaba molesto cuando acabé lo que había en mi plato. No dijimos una palabra más hacia el otro, ni en la mesa, ni en el transcurso del camino.
Los dejé en la casa de mis padres y seguí mi camino. Necesitaba liberar algo del enojo que de pronto me recorría. No podía correr o luchar, tampoco entrenar, así que usaría el tiro al blanco.
Le entregué las llaves de la camioneta a uno de los soldados de bajo mando para que la llevara al lugar de renta de vehículos y caminé hasta el campo de tiro.
Agradecí haber acomodado las pastillas en mi pantalón porque la puta pierna me dolía como el infierno. Tomé asiento, pero luego de unos minutos me recosté esperando a que el dolor cesara.
No se en que momento me quedé dormido, pero desperté por los toques en mi pecho con un dedo, acabé agarrando su muñeca, pero era ella.
-Son las 6- tomé asiento ¿tiene complejo de reloj? -Yoori ya se fue.
-Voy a dormir aquí- comencé a caminar pero un leve mareo me atacó al moverme muy rápido. -Mierda
-Maldito terco. Te dije que debías descansar.- acabó ayudándome a caminar, -No vas a dormir aquí
-No me mandas Lee, voy a mi cuarto.- caminé a paso lento pero atrapé sus dedos en mi mano y la arrastré por el pasillo. -Duerme conmigo para no desmayarme.- bufó
-Entonces ven a la casa- negué
-Si voy allá no puedo follarte.
-No vas a follarme
-Oh sí, si lo haré- giré sobre mis talones para mirarla, tenía cara de disgusto, esa que se le quita follando. -Entra- dije al fin cuando llegamos, solté su mano y cerré tras ambos.
-Espera- interpuso sus manos entre ambos
-¿Te crees una virgen?
-Debo bañarme antes idiota- me carcajeé -Estoy sudada.
-La vez anterior también y se sintió de puta maravilla.- puso los ojos en blanco y caminó hasta la ducha luego de dejar sus cosas en la mesita.
Recordé que no había cenado y moría de hambre. Pedí la cena para ambos en uno de los restaurantes de la zona y a uno de los soldados traerla cuando llegara a la base.
-Esperemos la cena- la miré -Voy a bañarme, no te atrevas a irte.
-Yo no voy a salir a recibirla, si los soldados me ven aquí- esta vez quien puso los ojos en blanco fui yo.
-Yo lo hago, que enfermera tan desconsiderada- dejé la puerta abierta para escuchar cuando toquen y me metí bajo la ducha para quitar el agotamiento del día. Pero no hice nada. Solo jugué en la mañana con el mocoso y era sentado, creo que estoy envejeciendo.
Apenas envolvía mi toalla en la cintura cuando tocaron la puerta, Lee tenía solo una toalla cubriéndola como hace rato mientras veía su teléfono -Gracias- tomé las bolsas y cerré antes de que terminara de pronunciar su saludo. -Atiéndeme
-Niño de mami
-Envidiosa- bufó, comenzó a preparar todo de manera en que solo debíamos tomar los palillos y tomar de cada plato.
-Oye- dijo al fin -¿La vasectomía, te la hiciste porque...
-Si me me pones en tu boca quizás te diga.
-Pervertido- reí y di otro bocado, me encanta picarla.
-Si digo algo mío también espero escuchar algo de ti. Te he preguntado muchas cosas pero ninguna respondes.- dejó de comer, supongo estaba satisfecha, ya casi no quedaba nada. La vi tomar de su jugo antes de responder.
-Te la prefiero chupar.
-Mierda- mi miembro dio una sacudida con solo escucharla. -Ven aquí nena.
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¿El Jefe?
FanfictionÉl acostumbra a no obedecer, problemas de autoridad le llaman. Él entiende que no nació para seguir órdenes, no cuando quien las da no se arriesga. Ella será su karma. Sexto libro de la Saga Militar Primer Libro: Por Favor (Oneshot) Segundo Libro: D...