¿El Jefe?

Capítulo 39

-¡Que no!- esta mujer no escucha. -¿Cómo es que me entero al último minuto que planeas mudarte en la casa del lado? Con mi hijo.

-Pues estaba en venta- recogíamos las cosas del cuarto del mocoso cuando su madre llegó, creo que la mía se chivó pues ella estaba en el pelotón hasta hace rato.

-¡Esa no es excusa!

-Mamá- pronunció tranquilo -Esa casa es más grande, estaremos cerca de la tia Yoori y el tio Jimin, también al lado de los abuelos, además de que Sussy vive muy cerca también- se le iluminó la carita.

-Me dan dolor de cabeza ustedes dos- se quejó

-Pues ve a acostarte.- propuso su hijo -Cuando terminemos con mi cuarto pasaremos tus cosas. El mayor ya organizó la ropa- parecía que echaría humo por la boca cuando escuchó aquello, el niño salió con una caja con juguetes.

-¿Tu...

-Las vi, vi todas y cada una.- me acerqué a ella a paso firme -Incluso un sexy trozo de tela que espero. De verdad espero sea para mañana.

-¿Y qué hay mañana?

-Ambos sabemos que planeabas darme tu coño envuelto para la noche- alcancé a robarle una sonrisa y aproveché ese momento de debilidad para anclarme a su cintura haciéndola sentirme. Mañana era mi cumpleaños, supongo se enteró y planeó algo para ambos, pero se avergüenza y prefiere mostrarse ruda.

-No me cambies el tema. ¿Cómo es que tu y un niño de 7 años consiguieron como buena idea mudarse en una casa cuando ninguno cocina?

-Yo cocino, delicioso por cierto. Pregúntale a mamá

-¿Y crees que voy a dejarlos...

-Como sabes, el mocoso es mío. Yo decido donde vive. Le pregunto por cortesía, cortesía que tu no posees.- me encanta picarla. -Pero si estás tan preocupada puedes mudarte con nosotros- la vi abrir la boca en demasía. -Miento noona, sabes que estás invitada.- dejé una dura nalgada sobre su trasero y la vi morder su labio con ganas. -En unas horas traerán la cama donde voy a follarte.

-¿Y los otros muebles?

-El mocoso y yo iremos a comprarlos mañana.

-¡Ósea que planeas no trabajar hoy, ni mañana!- tomé el televisor y comencé a caminar hacia las escaleras.

-¿Pretendes que trabaje el día de mi cumpleaños? Tirana.- nos encontramos a mi madre en la entrada, -Mamá, tú hija me trata mal, regáñala mientras dejo esto.- si hay algo que prefiera más que picar a Fary, eso es picar a mi madre. Quién aún no está de acuerdo del todo con esto.

Pero pronto.

Mi teléfono comenzó a vibrar en mi bolsillo así que le tendí el objeto a mi padre y lo tomé.

-Jeon

-Tenemos trabajo- su tono duro era extraño.

-¿Qué pasó?

-Envié un helicóptero por ti. Ven a Seúl, ahora. Viajaremos a Rusia.

-Bien- cerré la llamada luego de aquello, mi padre supongo que por mi cara sabía que tenía trabajo así que no tuve que explicarle.

-Nena- la llamé con la mano, -Voy a trabajar, elige los muebles con el mocoso.- le tendí mi tarjeta y me acerqué a su oído -Resistentes para cuando te folle sobre las mesas.- su rostro rojo me hizo reír. -Te amo- besé sus labios y escuché el bufido de mi madre. -¡Nos vemos mamá!- el mocoso se había anclado a mi pierna.

-Tráeme un regalo Mayor

-Mmm, pórtate bien- lo vi alzar una ceja -Trata al menos.- aquello si lo aceptó.