°𝑳𝒆𝒕 𝒎𝒆 𝒕𝒆𝒂𝒄𝒉 𝒚𝒐𝒖° ʸᵒᵘⁿᵍᴴᵉᵉ/ᴷᵉᵒⁿᴶᵒ - ＯＮＥＵＳ

45•🐈‍⬛

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Llegamos al lugar puntuales, debo admitir que los nervios me estaban comiendo vivo pero tenía que hacer esto para terminar con todo de una vez. Le eché una mirada a Subin desde mí asiento, el asintió con la cabeza dándome a entender que estaba listo, así que salimos del auto despidiéndonos de Keonhee y Seungsik.
Ambos nos paramos delante de la puerta del gran restaurante al que íbamos seguido cuando éramos pequeños. Luego de unos segundos suspiramos y nos dedicamos a entrar.
El lugar estaba casi vacío, miramos para todos lados buscando a nuestros "padres", pero no estaban en ninguna de las mesas. Y, de repente, se nos pasó una idea a la cabeza.

—Deben de esperarnos en la terraza—
Dije empezando a caminar hacia la escalera, Subin me siguió.

A medida que pisaba cada escalón, sentía como volvía el recuerdo de lo ocurrido ese dichoso lunes, junto con lo que había sentido en ese momento. Mí enojo aumento al ver a ambos a lo lejos sentados en la mesa que compartíamos como "familia" hace muchos años atrás. Miré a Subin y me sorprendió la seriedad que tenía, el realmente había madurado y se había vuelto fuerte, más que yo incluso.
Ellos se dieron cuenta que habíamos llegado y esperaron a que nos acerquemos. Ya cuando nos sentamos al frente de ellos, sentimos aún más la atmósfera pesada que teníamos a nuestro alrededor.

—Buenas tardes, Youngjo y Subin—
Subin se tenso al escuchar a mí padre. Con solo llamarnos de esa forma entendimos que se iban a deshacer de nosotros.

—Buenas tardes—
Contestamos al unísono manteniendo nuestra seriedad.

—Creo que habíamos aclarado que solo queríamos que tu vinieras, Youngjo—

—Asi era, pero yo insistí en venir. Este problema es de todos no solo de Youngjo y ustedes—
Me sentí orgulloso de solo escucharlo.

—Tu eres el que más nos decepcionó, Subin—
Comentó nuestra madre mirándonos con desagrado.

—Ahora se parecen en actitud y en vestimenta. Debes de estar feliz de haber cambiado a tu hermano por completo, ¿No, Youngjo?—

—Claro que lo estoy—
Sonreí con picardía, ellos fruncieron el seño. Detestaban que me las personas se pusieran de mí lado.
—Ya vayan al grano, tenemos cosas que hacer—

—Esta bien, joven Youngjo—
Mí padre sacó de abajo de la mesa un sobre color cartón y me lo pasó. Lo agarré con seguridad y lo abrí para ver qué contenía.

Adentro habia un documento, con unas 8 hojas aproximadamente. Con cuidado lo saqué del sobre y leí el encabezado: "Tenencia Legal". Desvié la mirará por un segundo a mí padre asintiendo con la cabeza, dando a entender que ya sabía lo que querían. De todas formas, leí todo el documento dos veces. Tenía que estar seguro de que no me te dieran una trampa con eso.
Apenas termine dejé los papeles sobre la mesa y saqué la lapicera que habían pedido para firmar pero no lo hice.

—Me parece bien que me den la custodia de Subin a mí—

—¿Entonces? Firma, ya—

—No, porque este documento no menciona nada sobre su responsabilidad parental—
Me crucé de brazos, parecieron molestarse por lo que mencioné.
—A mí no me importa su dinero, es más, no lo necesito. Puedo trabajar por mí cuenta y pagar mis cosas, el año entrante estaré en la universidad después de todo. Pero Subin aún está en la secundaria y mí dinero no alcanzará para los dos—

—Nos vamos a ir a otro país dentro de dos días, así que no pueden tener nada de nosotros—
Se adelantó a decir nuestra "madre".

—Oh, así que se irán...—
Sonreí y miré a mí padre.
—Espero que puedan ir con una denuncia de abandono familiar—

—¡No serías capaz!—

—Claro que si, después de todo abandonarian a sus dos hijos, siendo uno menor de edad. Mientras no firme ese documento puedo denunciarlos sin problemas—

—¡¡Eres un dolor en el culo!!—
Se levantó mi progenitora exaltada aunque su pareja rápidamente la hizo sentar.

—¡Callate! ¡Estamos tratando de no tener problemas legales!—
Ella le hizo caso y se cruzó de brazos volviendo a sentarse ignorando nuestras miradas.
—¿Vas enserio?—

—Si, el padre de Seungsik es abogado y tiene muchos contactos. Además de compañeros fiscales. Sería bastante facil presentar una denuncia—

—¡Maldita sea!—
Se tapó el rostro frustrado, con Subin nos miramos con complicidad. No se iban a salir con la suya.

—Si no quieren tener un juicio en la próxima semana, van a tener que darle una compensación mensual a Subin para mantenerse y a sus estudios—

Nos quedamos en silencio mientras nuestros padres discutían que hacer en voz alta, enojados porque su plan no les salió como querían, mientras que con Subin nos reíamos en silencio. Luego de un rato llegaron a un acuerdo.

—¡Esta bien! Le daremos una cuenta a Subin donde dejaremos dinero pero tu no podrás tocar nada de eso, ¿escuchaste?—
Me señalaron y sonreí victorioso.

—Claro—
Abrí el documento de nuevo, busqué donde había que firmar y lo hice.
—Oficialmente, no somos sus hijos señor y señora Kim. Ojalá tengan mucha suerte a dónde sea que vayan—

—Nos irá mucho mejor sin ustedes—
Subin y yo nos levantamos, dispuestos a irnos.

—¡Eso esperamos!—
Ambos les regalamos las sonrisas más brillantes que verán en sus vidas y así nos fuimos.

Por fin somos libres.