Una entrega más del primer libro "MIRA AL CIELO|SIEMPRE SERÁ NUESTRA PROMESA", ahora llega la continuación "MIRA AL CIELO |2|. DE LO PERDIDO, LO GANADO"
Una nueva historia donde los secretos y las mentiras ya estan permitidas. Donde la traición cr...
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CAPÍTULO EXTRA DOS
002- SOMETHING RIGTH
ELIAN MONTARCH
-Con cuidado, eso es- entre papá y Gio me ayudaron a recostarme en el sillón de la sala.
-Ahora sí, cuéntenos ¿Qué pasó exactamente?- pidió mi suegra.
-Todo empezó por la nueva Coronela, nos dejó cuerpo a cuerpo, pero a Eli se enfrentó a ella y le pegó sin piedad, utilizó golpes no permitidos y lo mandó directo a revisión- conto mi novia.
-Ok, ¿Y a ustedes porque los expulsaron de sus siguientes 2 semanas?
-Porque intervinimos por los golpes no permitidos. Ella quiso enfrentarse a Bay y aquí doña luchadora no se dejó y le regreso el golpe, Amy y yo la tuvimos que alejar. Pero la vieja estaba ardida y empujo a mi novia y Bay le volvió a pegar.
-Espera, ¿Les pego?- mi suegra miro a mi novia y cuñada enfadada.
-Me dio solo uno pero lo esquive y me dio en el hombro, nada de qué preocuparse, pero a Amy si la empujo fuerte.
-Denme el nombre y rango estable de esa arpía- exigió.
-Sabe de dónde somos, así que es muy probable que te esté esperando.
-Pues ya veremos mañana cuando la tenga cara a cara- habló súper enojada.
Recuérdenme no hacerla enojar nunca, se ve peor que el diablo.
<Miedoso> dijo mi conciencia.
<Sí, ¿Y qué?>
-Bueno pues chicos, es hora de irnos, Elián debe descansar y ustedes también- habló el padre de Amy.
-Mañana vendremos a visitarte, no se te olvide tomar tus pastillas, no vayas hacer mucho esfuerzo, trata de dormir, si necesitas algo marcas o mandas mensaje y vendremos- dijo mi novia y me dio un beso en la mejilla.
-Claro, mamá- nos empezamos a reír.
-Te acordaras de mi cada que no te tomes tu medicamento.
-Nos vemos mañana cuñado, recupérate pronto- se despidió Amy.
-Chao Eli, vendremos a visitarte en unas horas, descansa- se despidió Gio y mis padres los acompañaron a la salida, después de unos minutos entraron.
-Bueno hijo, te ayudare a subir a tu habitación y ahí cenaras, para que no te sea más difícil.
Papá me ayudó a subir hasta la tercer planta de la casa.
Con mucha dificultad logré subir todos los escalones hasta mi alcoba, les confieso que con cada paso sentía que me quitaban un órgano. Después de mi recuperación pediré el cambio de alcoba al primer piso
