CAPÍTULO CUARENTA Y OCHO.
48-GET DOWN.
BAYOLETTHE ALLEN.
Recuerdo que cuando entramos varios chicos se quejaron por el esfuerzo rudo y excesivo al que nos sometían durante los entrenamientos, pero hoy los pocos que al final nos quedamos y aprobamos sabemos que esas horas diarias son todo un dulce comparado a lo que nos vamos a enfrentar.
-Pobre de aquel que no de su mejor esfuerzo y no lo apruebe. Sería lo más vergonzoso- Ed nos miraba con una mirada que si eres hombre traduces a...
"Te humillare ser inferior a mi"
Pero si eres chica, algo más o menos seria así...
"Te are estar de rodillas ante mí y no precisamente para rezar. Serás completamente mía"
-Cadete Allen, ¿Alguna cosa no le parece?- pregunto serio y voltee a ver a Gio y el a mí- Es a usted señorita Allen- especifico y en automático me sonroje. Me las pagara- Repita lo que dije.
-Que... que- diablos estaba nerviosa. Corrijo, me pone nerviosa. Respira y dale en su punto- Seria vergonzoso si no aprobamos- le di una sonrisa y por un segundo él quiso imitar mi acción pero se contuvo.
-Pase adelante.
Rompí fila y mi hermano se burló de mí. Vaya apoyo. Ed me miraba con diversión, pero sabía que ante estos idiotas no me perdonaría nada.
-Usted será quien lidere como capitana a los cadetes. ¿Entendido?
-Sí, señor.
-Bien. ¡Formación!- grito y todos se acomodaron en menos de 40 segundos- Giovannie, Amy y Ann ustedes serán los segundos al mando. El resto más les vale poner atención y realizar todo correcto. Si uno falla durante los entrenamientos será sometido a castigo y por ende, serán reprobados, así sean los mejores- me miró fijamente y las ganas de estamparlo en la pared me empezaban a ganar.
Quería que sacara mi peor carácter. Ni él lo soporta.
-Paso corto ¡Ya!- grito y todos empezamos a marchar.
Benditos sean estos días de martirio. Él se colocó a mi lado marchando también y me miro con burla.
-Pobre de mí pichón, con lo que me gusta verla enfadada.
-Cállate- dije firme y lo hizo- Querías que sacara mi mal genio, pues me obedeces y punto- sentencie y el me dio una sonrisa. Cumpliría todos mis caprichos.
-Cambiaras cada tanto, el que tu consideres, das las indicaciones tu gusto. Tengo que evaluar- dijo e hizo el amago de separarse de mí, pero lo sostuve de la muñeca y entendió que era mío
-Conversión a la derecha. ¡Ya!- di la oren y como avanzábamos giramos a la derecha.
Después de unos muy largos minutos donde me asigno la cabecera, donde saco a varios Cadetes por seguir cometiendo faltas y unos cuantos porque quisieron pasarse de listos nos dejó ser libres y tomar descanso antes de partir cada uno a sus clases. Ultimas horas que compartiríamos como compañeros y con mi familia.
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MIRA AL CIELO |2|. DE LO PERDIDO, LO GANADO
RomanceUna entrega más del primer libro "MIRA AL CIELO|SIEMPRE SERÁ NUESTRA PROMESA", ahora llega la continuación "MIRA AL CIELO |2|. DE LO PERDIDO, LO GANADO" Una nueva historia donde los secretos y las mentiras ya estan permitidas. Donde la traición cr...