Una entrega más del primer libro "MIRA AL CIELO|SIEMPRE SERÁ NUESTRA PROMESA", ahora llega la continuación "MIRA AL CIELO |2|. DE LO PERDIDO, LO GANADO"
Una nueva historia donde los secretos y las mentiras ya estan permitidas. Donde la traición cr...
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CAPÍTULO VEINTIUNO
21-I WANT IT THAT WAY
BAYOLETTHE ALLEN
-¿Ya estas lista hermosa?- pregunto desde el marco de la puerta.
-Sí, vamos- tome mi cartera y salimos.
Según mi novio como compensación de estos días sin él, nos preparó una salida como familia, a donde, solo él sabe.
Entramos a la sala y mamá, los señores Pierre ya estaban esperándonos, solo faltaban mi hermano y mi cuñada en aparecer.
-¡Chicos apresúrense o se ara tarde!- gritó el señor Pierre.
Después de unos minutos entraron.
-¿Por qué tardaron tanto?
-Perdón mami, pero estábamos viendo algunas cosas para la boda- respondió feliz mi cuñada, cosa que sorprendió a los adultos ya que según, yo estaría participando también.
<Creo que ya te sacaron>
<No molestes>
¿Alguna vez han querido callar a esa vocecita que es muy inoportuna? Yo si.
-Lamento interrumpir, pero ya debemos irnos- entró Eli. Nadie respondió nada y empezaron a salir.
Realmente no sé cuál es la situación con toda mi familia. ¿Saben? Mi hermano es como papi, no saben esconder sus emociones, y por su actuar sé que le tiene coraje a Eli, solo que no sé porque; por otro lado mami, ya no es tan amigable con él, es como si todos de la nada decidieron que era mala persona.
-¿Qué es lo que ya eligieron chicos?- preguntó el señor Pierre.
-Pues algunas combinaciones suegro, aún falta muchas cosas pero tenemos tiempo.
-Bueno, pero entre todos planearan una boda de ensueño- dijo mientras nos miraba a los tres. Solo que yo no entendí nada.
-No suegro, hubo cambio de planes- me miro serio- Mi boda solo la organizaremos entre mi novia y yo.
-¿Qué? ¿De qué hablas, Gio?- pregunto mamá sería.
-Entendemos que un momento tan importante como es la unión de dos amados solo les compete a ellos dos, ya que buscamos la intimidad- dijo en un tono demasiado acusador.
-¿De qué me perdí? ¿Ya no eres dama de honor?- me pregunto en un susurro mi novio que venía sentado a mi lado.
-¿Me creerás que ni yo sé que está pasando aquí?- lo mire confundida. Y era verdad, hasta donde me quede o recuerdo, era su dama de honor.
<Eras niñas, eras>
-Señor hemos llegado a su destino- escuchamos hablar al conductor de la limusina.