29. Tu perdón

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Tn Lowell

Llegué con Sasha lo más rápido que pude y su cara cuando me observó fue de susto, al parecer había decidido venir al colegio en pijama y la idea de peinarme no había pasado por mi mente esa mañana. Así que en pocas palabras era la viva imagen de la bruja de Blancanieves después de transformarse.

- Demonios. ¿Qué te pasó? ¿Te pusiste comida de pájaro en la cabeza o porque el curioso nido? - preguntó divertida, dejando la botella de agua en la mesa.

- Me levanté tarde - contesté adormilada.

- Se nota. Pero igual te ves linda - hizo un gesto para restarle importancia -. ¿Y qué pasó? ¿Ahora por qué te levantaste tarde?

- ¿Has visto a Aidan? - ignoré sus preguntas y la miré desesperada.

- Si, lo he visto, pero dime...

- ¿Vino al club? - corté sus palabras.

- No lo sé, yo no estudio con él, ¿recuerdas? - frunció el entrecejo -. ¿Por qué tan desesperada?

- Necesito hablar con él. Me ha estado evitando desde hace tres días - respondí esperando que entendiera un poco de la situación, pero por la cara de confusión que me lanzó entendí que no sabía de lo que hablaba -. Después de tu presentación Patrik me buscó. Dijo que quería hablar conmigo, entonces fuimos al parque cerca de mi casa, comenzamos a platicar luego me pidió perdón pero luego la plática se volvió tediosa y decidí ir a mi casa...

- TN, ve al grano - interrumpió.

- Patrik me besó - solté sin más.

Sasha abrió los ojos al tope y sentí que sus ojos se saldrían de sus cuencas.

- Bueno, no es tan terrible - dijo un poco asustada y nerviosa -. Digo, el problema hubiera sido si Aidan los hubiera...

- Y Aidan nos vió - agregué entre dientes.

- Ahora si estás jodida.

- Agh - cerré los ojos y oculté mi cara con las palmas de mis manos.

- ¿Y que harás? ¿No has ido a su casa?

- Ya lo hice, pero nunca está, o al menos eso es lo que le dice a su mamá que me diga - dije aún con mi cara oculta.

- ¿Cómo sabes eso? - cuestionó.

- Porque ella me lo dijo - me descubrí el rostro -. Sus palabras fueron "Cariño, Aidan está algo triste y no quiere ver a nadie. Él es que me dice que te diga que no está"

- Oh, vaya.

- Dime algo - bramé histérica.

- ¿Cómo qué? Ve y haz que ese chico te escuche, explícale lo que pasó y listo - alzó las manos -. No te compliques la vida.

- Si Aidan nota que me acerco a él correrá como si quisiera matarlo - hice un puchero.

- Hmm - hizo un puchero y reí internamente por lo tierna que se veía -. ¡Lo tengo!

Juntos en esta realidad [PARTE 2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora