Juntos en esta realidad [PARTE 2]

15. Te seguiré en cada universo

Aidan Gallagher

Nos sentamos ambos en la cama ya con las palomitas y los chocolates calientes servidos en dos tazas.

- Muy bien, comienza tú, en el auto no me dijiste muy bien - Tn dijo emocionada como una niña pequeña a punto de ver su caricatura favorita.

- Está bien. Son siete chicos los cuales sus rostros no los recuerdo, usan uniforme y viven como en una gran mansión - comencé a recitar -. Pero siempre hay una chica, alguien con quién siempre salgo en un jardín y la Luna siendo nuestro escenario. Recuerdo observar un tipo iglú de cristal cubriendo el gran jardín.

Tn ponía atención a cada palabra que salía de mi boca, escuchando con mucha emoción mi historia y sus ojos jamás abandonando mi rostro en ningún momento.

- Recuerdo un pastel y una vela, solo una de color azul - continué -. Y su sonrisa, la primera vez que soñé con ella desperté y sentía su ausencia, cómo si la hubiera conocido de toda la vida.

Hice una pausa para poder tomar poco chocolate de mi taza y calentar mi garganta antes de seguir.

- Solo una vez e escuchado algo, un apellido - confesé -. Hargreeves. Tal vez así se llaman los chicos.

- Sueñas todo eso, ¿y aún así no crees en la vida pasada? - soltó con indignación.

- Ahora lo hago - reí y ella igual -. Tu turno.

- Bueno, yo solo e soñado esto de pequeña y de milagro me acuerdo - soltó una risa -. Era un chico pelinegro de uniforme, estábamos sentado en una banca blanca siendo rodeados por flores de todo tipo. La luna frente a nosotros era la vista más hermosa que podía haber visto.

Tenía las cejas fruncidas desde que escuché la palabra uniforme y jardin. ¿Era coincidencia o se parecía a mis sueños?

- Recuerdo perfecto su tacto y es algo extraño porque por los sueños no sientes, pero sentí perfectamente como su mano tocaba mi mejilla - sonrió a la nada -. Y entonces me miró, sus ojos eran verdes, ese color que ante el brillo de la luna causaban un lindo color de ojos.

Por algún razón recordé mis ojos, eran verdes, y eso me hizo sentir un poco bien, el como se refería a ellos, hasta que entré en razón y recordé que no hablaba de mis ojos, hablaba de los de él.

- Aún recuerdo lo que me dijo ese último sueño - musitó un poco decaída, con la voz baja -. Te seguiré en cada universo.

- ¿Qué? - la interrumpí, al darme cuenta que esa frase la había escuchado en otro lado.

- El último sueño que tuve él me dijo eso, "Te seguiré en cada universo". No sé de qué se trate - ella se encogió de hombros.

- Entonces tu novio te va a venir a buscar a esta realidad - dije divertido -. ¿Cómo dijiste que era?

- Pelinegro de ojos verdes - respondió con calma mientras me miraba expectante.

- Oye eso es raro, se parece a mi... - fuí bajando el tono de voz con cada palabra que decía.

- Cualquier parecido a la realidad es mera coincidencia - alzó las manos y se encogió de hombros.

- ¿Sabes cuándo volví a sentir esa ausencia de no tenerla a ella? - cuestioné cambiando de tema.

- No lo sé, ¿cuándo?

- Ese día después de ir a la cafetería. Cuando te ví alejarte sentí como si te hubieras llevado una gran parte de mi contigo - respondí -. No pude dormir en toda la noche por pensar en ti, porque te quería conmigo y dejar de sentir ese vacío.

- Aidan...

- Tn...

Nos quedamos viendo en silencio, sus ojos relajados mirando cada parte de mi rostro con lentitud hasta volver a mis ojos, dónde ambos fruncimos el entrecejo y sonreímos cómo si pudiéramos pensar lo mismo.

Tn se puso de pie y tomó su teléfono que estaba en una mesa a unos metros de nosotros. Volvió a su posición y abrió Google, presionó la opción de buscar y comenzó a teclear ese apellido.

Hargreeves.

¥

Nuevo capítuloooo

Nos estamos acercando más a la verdad. Que nervios

¿Cómo les parecío?

Nos vemos en el siguiente

Los amo.

Con amor, Esme.