22. ¿Lo amas?

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Maratón 1/5

Aidan

Abrí lentamente mis ojos cuando sentí que algo se removió a lado de mi en la cama. Entre la oscuridad y los pocos rayos de luz que ocasionaba la luna pude contemplar a TN recostada junto a mí con un brazo rodeando mi torzo.

Tenía los párpados cerrados y su respiración era tranquila, su mejilla estaba levemente pegada a mi pecho mientras con su brazo se forzaba a mi cuerpo.

Me quedé quieto unos segundos mirándola, o mejor dicho, admirandola.

No sabía si esto era algo normal, que a tan pocos días de conocerla podía sentir algo tan fuerte con tan solo verla. Había resultado tan fácil quererla que creía que ya lo había hecho antes, en otra vida.

Y no podía sacarme de la cabeza el hecho de que yo pudiera ser Número Cinco. Algo dentro de mi temía que fuera cierto, pero la parte más importante de mi anhelaba que fuera cierto.

TN removió su mejilla contra mi pecho y yo me quedé quieto. Cuando volvió a quedarse inmovil sonreí como idiota con tan solo verla.

¿Como era posible sonreír así por una persona?

Siempre me había limitado a las relaciones o sentimientos más allá de la amistad y era porque creía que algún día alguien llegaría. Que todo el amor que tenía para dar estaba reservado solo para una persona en especial.

Y ahora sabía quién era esa persona, porque TN fue la primera chica por la cual no me repetí mil veces en la noche que no debía sentir nada, al contrario, solo deseaba volver a verla, aún así fueron unos segundos, no importaba cuánto tiempo fuera con tal de estar cerca de ella.

Retiré un mechón de pelo que cubría su rostro y lo llevé detrás de su oreja. Esto parecía irreal, el estar aquí con ella. Porque no había pasado ni una semana que había terminado con el imbecil de Patrik y ya estaba aquí, abrazado de ella. Tal vez sus sentimientos aún no estaban claros, tal vez mis sentimientos no son correspondidos. Tal vez ella aún no sentía nada por mi. Tal vez y todo esto de los sueños era una locura.

Y recordé sus palabras «Acabo de terminar con Patrik, y lo amé, de verdad lo hice, no estoy lista»

Mierda.

Quería solucionar esto, y la única manera sería aquí, donde solo estuvieramos nosotros.

No quería volver a casa.

¥

- Estuve pensando en lo de anoche - rompí el silencio y la miré.

TN apartó la vista del lago y se giró para prestarme atención. Sus ojos ya estaban sobre los míos con curiosidad emanando de ellos.

- ¿Qué cosa?

- En esto de los sueños, de todo lo que dijimos - expliqué.

- ¿Hablas de cuando te dije que había posibilidades de que fueras Cinco? - preguntó con temor a la respuesta.

Asentí.

- Aidan, esto igual es extraño para mí. Pero quiero decirte que no había sentido lo de anoche con nadie más - dió un paso hacia mi, pero tomé sus muñecas evitando que se acercara más a mi.

- ¿Ni con Patrik? - la pregunta salió de mi garganta sin más.

Los ojos de TN me miraron confundidos y con una pizca de duda. No dijo nada, solo se quedó de pie frente a mi. Mirando como mis manos tomaban sus muñecas, y la forma en que mis ojos la observaban expectante, esperando una respuesta.

Juntos en esta realidad [PARTE 2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora