Rivals for love ~ Hyunlix

25: Maratón 1/2

Felix se sentía extraño con la presencia de aquella chica, no le daba buenas vibras, Hyunjin por su parte se encontraba en una posición bastante incómoda, no quería dejar de estar con Felix, pero tampoco quería dejar sola a Karina, ya que era nueva y no conocía a nadie.

—  Adelántate tú, yo ahora te alcanzó.  —  Dijo Hyunjin observando a la chica.

—  Bueno, pero no tardes.  —  Respondió ella con un mohín en los labios, y Hyunjin asintió levemente.

—  No sabía que tenías una amiga de la infancia.  —  Dijo el pecoso cuando Karina se fue a su puesto.  —  Supongo que estarás con ella también a la hora del descanso.  —  Su expresión cambio por una triste.

—  Creo que sí… pero tú también pásala con nosotros, así la conoces mejor, seguro no le molestará y quizás se lleven bien.  —  Dijo para luego sonreír forzadamente.

—  No considero que sea apropiado.  —  Rascó su nuca de los nervios.  —  Si tienes tiempo, ¿Podemos hablar?, necesito decirte algo importante, pero a solas, sin tu amiga.   —

—  Claro que sí, pequitas.  —  Le sonrió.  —  ¿Es algo malo?  —

—  No lo sé…  —  Titubeó el pecoso.  —  Bueno, ve con tu amiga, siento que si pasas otro minuto más conmigo es capaz de llevarte con ella arrastras.  —  Río incómodo.

Hyunjin no quería alejarse de Felix, realmente lo había extrañado tanto el día de ayer, que pensar que hoy tampoco estarían juntos por culpa Karina, lo entristecía, pero tampoco quería ser un mal amigo con ella.

—  Está bien, nos vemos más rato, Lixie.  —  Beso la frente del pecoso.

Luego de eso ambos se dirigieron a sus respectivos puestos, Felix se extrañó al no ver a su amigo, tan perdido estaba con Hyunjin que ni siquiera se dio cuenta de la ausencia de Jeongin.

…

Jeongin iba caminando por los pasillos del instituto, para dirigirse nuevamente hacia el salón, pero no contaba con que alguien lo jalara del brazo y lo metiera dentro de un salón totalmente desolado.

—  ¿Qué mierda te pasa?.  —  Pregunto el menor exaltado por el susto que le dio.  —  Casi me da un infarto, imbécil.  —  Soltó molesto.

—  Cállate y escucha.  —  Dijo Sam seriamente.  —  A la hora del descanso te espero en la azotea, y más te vale no faltar.  —

—  ¿Y tú quien te crees para andar mandándome?.  —  Pregunto alzando una ceja.

—  Necesito hablar contigo, así que solo ve a la azotea a la hora de descanso.  —  Resopló con cansancio.

—  Convénceme.  —  Lamió su labio inferior.

Sam sonrió con burla, para luego acortar la distancia que los separaba y junto sus labios con los de Jeongin, transformándolo así en un beso un tanto subido de tono, el cual no duró mucho, ya que Sam se alejó.

—  Espero no faltes.  —  Dijo Sam guiñándole un ojo, para luego salir de aquel salón, dejando a un Jeongin procesando lo que había pasado segundos antes.

—  Qué mocoso más iluso.  —  Susurro Sam para sí mismo, dirigiéndose a su salón.

…

Luego de eso, Jeongin logro componerse de aquel beso y salió corriendo hacia su salón, porque ya iban a empezar las clases y no quería llegar tarde.

Una vez que llegó a su salón, se dirigió al puesto que compartía con Felix, y este le pregunto.  —  ¿Dónde estabas?.  —  Pregunto con preocupación.

—  Fui al baño.  —  Respondió Jeongin un tanto nervioso.

—  ¿Estás bien?, pareces como si hubieras visto a un fantasma.  —  Dijo Felix extrañado.

—  Sí, no es nada, Fefi, no te preocupes.  —  Dijo una vez más calmado.  —  ¿Y tú? ¿Qué tal con Hyunjin?, ¿le dijiste que tenías que hablar con él?.  —  Pregunto el menor cambiando de tema.

—  Bueno… sí, pero ves a la chica que está sentada junto a Hyunjin.  —  Jeongin volteo su cabeza hacia el puesto del pelinegro, para luego asentir.  —  Bueno, ella es amiga de la infancia de Hyunjin, y llegó ayer de Estados Unidos, y no conoce a nadie, así que estará con él… entonces le dije que si tenía tiempo a solas, podíamos hablar y bueno, me dijo que si, así que hablaré con él cuando esté a solas.  —  Dijo desanimado.

—  ¿Cómo es eso de que si tiene tiempo?.  —  Pregunto indignado.  —  Se supone que tú le gustas, el tiempo debería buscarlo para estar con ella, no contigo, si le gustas tanto tú deberías ser su prioridad.  —  Dijo en menor con molestia.

—  Ya, Innie, no importa, ella es su amiga que no ve desde niño, así que lo entiendo.  —  Sonrió quitándole importancia, aunque realmente estuviera triste.

—  Bueno, si tú lo dices.  —  Respondió con resignación.  —  Por cierto, a la hora del descanso tengo que hacer algo importante, pero puedes adelantarte tú con Honnie y yo los alcanzó en el comedor.  —

—  Claro.  —  Respondió el pecoso, sin preguntar nada más.

…

La hora de clase ya había llegado a su fin, anunciando por fin la hora de descanso, Karina le hablo durante toda la hora de clases a Hyunjin, este poco y nada la escucho, ya que su mente estaba perdida en el pecoso, a quien observo más de una vez durante la clase, pero este nunca le devolvió las miradas.

Algo dentro de él dolía, sentía a su pecoso distante, tenía miedo que se arrepintiera de lo de ellos, a pesar de no ser nada oficial, para Hyunjin si eran algo, no quería que por la llegada de Karina ellos ya no tuvieran tiempo a solas.

—  Jinnie, iré al baño, tú adelántate hacia el comedor y te alcanzó.  —  Respondió la castaña, mientras se ponía de pie.

—  Está bien.  —  Dijo sin importancia.

Cuando Karina salió del salón, Hyunjin ni lo pensó dos veces y se acercó hacia el pecoso, quien aún seguía en su puesto.

—  Lixie, podemos hablar ahora, Karina fue al baño, y supongo que se va a demorar.  —  Interrumpió Hyunjin la charla de ambos menores.

Felix se volteó hacia donde estaba Hyunjin y luego asintió.

—  Bueno, yo ya me iba.  —  Dijo Jeongin incómodo.  —  Suerte.  —  Le susurro al pecoso.

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