Los gemelos Hwang, tienen una gran rivalidad. ¿Por qué?... Por el amor de Lee Felix.
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Aclaraciones.
- La historia es completamente mía, cualquier parecido u otro motivo es netamente coincidencia.
- Posible mención de otros shipp: Minsung, Chanin...
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— ¿Puedo ir hoy a tu casa?, es que realmente te he extrañado mucho. — Dijo Hyunjin una vez que ya no se estaban besando.
Felix se sonrojó y asintió. — Sí, si puedes venir… Y yo también te extrañé. — Le dedico una sonrisa llena de sentimientos.
Ambos chicos salieron del salón y se encaminaron hacia la salida, Karina ya hacía allí, esperando por Hyunjin, para poder volverse juntos.
Cuando la chica lo vio salir junto al pecoso de la mano, su interior se llenó de cólera, no soportaba verlos juntos. Cuando Sam la había llamado desesperado a los Estados Unidos, jamás se imaginó el motivo, ya que ellos tampoco tenían una buena relación de niños, ella solo era amiga de Hyunjin, nunca lo fue de Sam, pero ahora no le importaba unirse junto a él, para poder separar a su Jinnie de aquel chico que le robaba toda la atención de su amado.
Karina, sin más, se acercó hacia ambos chicos, quienes estaban en su mundo, ella carraspeó a sus espaldas, para que ambos se detuvieran y girarán hacia su dirección.
— Jinnie, te estaba esperando, para que volviéramos juntos a casa. — Dijo ella con voz tierna agarrando uno de los brazos de Hyunjin.
Hyunjin algo incómodo, respondió. — Lo siento Karina, no me dirijo hacia mi casa por ahora. — Se disculpó Hyunjin zafándose del agarre de la chica.
Felix era expectante a todo lo que decían, la verdad no se sentía bien con la presencia de esa chica, porque presentía que no le agradaba a ella, y que quería alejar a Hyunjin de él, y no podía aceptarlo, no quería compartir a Hyunjin con nadie, sabía que estaba mal, también tenía en claro que el pelinegro no era un objeto, para decir que era de su propiedad, pero realmente Hyunjin lo hacía sentir tan bien de todas las formas posibles que no podía compartirlo, se sentía egoísta, porque sabía que ellos eran amigos de la infancia, y jamás lo haría elegir entre ella o él mismo, pero rogaba en su interior que lo escogiera a él. Sin darse cuenta apretó la mano del mayor, quien se volteó a verlo y le sonrió dulcemente, para luego volver su vista a Karina.
— ¿Puedo ir contigo?, de verdad quiero recuperar todo el tiempo perdido que estuve en USA. — Dijo la chica con un puchero.
— De verdad lo siento Karina, pero no puedes, iré a la casa de lixie. — Sonrió en forma de disculpas. — Bueno, nosotros ya nos vamos, nos vemos mañana Karina. — No espero respuesta y empezó a caminar junto con Felix, quien había sonreído, porque Hyunjin lo escogió a él esta vez.
Una vez que llegaron a la casa del pecoso, se dirigieron a la habitación de este, ambos se estiraron en la cama, mientras se abrazaban, Hyunjin trazaba líneas imaginarias sobre el brazo de Felix, quien tenía su cabeza apoyada en el pecho del pelinegro.
Vieron películas, también documentales de casos paranormales, mientras que comían dulces, el momento era mágico para los dos, Felix se sentía en paz estando con Hyunjin, el miedo que habitaba en su interior desaparecía a su lado, todo era armonía, tranquilidad y felicidad, también se sentía seguro con él, se imaginaba pasando toda una vida junto a Hyunjin y lo feliz que sería, Hyunjin se metió tan dentro de su ser que jamás podría sentir algún sentimiento negativo hacia aquel chico.
Felix estaba perdido en sus pensamientos hasta que Hyunjin le habla. — Pequitas, tengo que decirte algo, bueno, la verdad, más bien quiero tu opinión. — El mayor sonrió nerviosamente.
— Te escucho, Hyunnie. — Respondió el pecoso calmadamente.
— Bueno… Karina este fin de semana dará una fiesta por su regreso a Corea. — Titubeó el pelinegro.
Felix al escuchar el nombre de la chica, se tensó, esperaba que Hyunjin no lo notará.
— ¿Quieres que vaya contigo?. — Pregunto el pecoso con confusión.
— La verdad, me encantaría… pero ella solo invito a sus amigas de infancia y a mí, y bueno, me dijo que podía invitar a mis amigos, pero… me dijo que tú no podías, porque sabe que si vas tú, te llevarás toda mi atención, y quiere que la salida sea de “amigos”. — Hizo comillas con sus manos al mencionar la última palabra.
— Oh, entiendo. — Dijo incómodo, por dentro se sentía triste, no quería que Hyunjin fuera a esa fiesta, quería que él le dijera que no iría y que prefería estar con él.
— Si no quieres que vaya, no iré lixie. — Mencionó el mayor al ver el semblante triste del pecoso.
Felix quería decirle que no fuera, pero se sentía tan egoísta con Hyunjin, porque él no haría lo mismo, aunque bueno, sus amigos jamás lo excluirán, pero no era culpa de Hyunjin.
— Está bien, Hyunnie, es tu amiga, seguro la extrañaste mucho, y también entiendo qué quiera pasar tiempo con amigos y que no quiera que yo vaya, porque yo no soy su amigo. — Dijo el pecoso fingiendo emoción.
— ¿Seguro?. — Pregunto el mayor no tan convencido y Felix asintió para luego abrazarlo nuevamente.
— Sip, porque luego de esa fiesta no te librarás de mí. — Dijo el pecoso en broma, lo que los hizo reír a ambos.
— Yo encantado. — Se acercó a la cara del pecoso con su mirada fija en los sus labios. — ¿Te puedo besar?. — Preguntó a pocos centímetros de los labios de Felix.
Felix asintió levemente y Hyunjin no dudó ni un segundo en besar los labios de su pecoso, el beso empezó a subir de intensidad, haciendo que el mayor se colocará arriba de Felix, haciendo que sus partes íntimas se rozaran, soltando pequeños jadeos por parte de ambos.
Es tan lindo lo de ellos que Felix no se sentía sucio al ser tocado por Hyunjin, sus traumas de infancia lo hicieron creer que jamás podría sentirse del modo que lo hacía sentir Hyunjin, se sentía como una persona nueva, uno que jamás sufrió en su pasado, su corazón se sentía cálido teniendo así de cerca a su pelinegro.
Aunque claro, no pudieron llegar a más, porque Minho había interrumpido su momento golpeando la puerta para qué bajarán a cenar.
Ambos un tanto acalorados se separaron, dándose cuenta de que los dos estaban sonrojados, se sonrieron y luego fueron al baño para lavar sus manos y sus caras, para que el calor y el tono rojizo en sus mejillas disminuyera.
Luego de eso bajaron como si nada hubiera pasado minutos antes en la habitación del pecoso.
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Holiii, perdón, sé que dije que iba a volver entre jueves o viernes, y ya es sábado, lo siento, no me sentía bien y tampoco mi imaginación funcionaba al 100, así que preferí actualizar hoy, sé que igual no es un cap tan largo, pero es lo que se pudo, y no quería dejarles sin cap, por cierto, ¿Qué les pareció?
no se olviden de tomar agüita, lxs amo, gracias por la espera.