Capítulo 23

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Ya se había echo costumbre que la casa de aquel pelimorado se prestara para sus reuniones masivas, no le molestaba para nada ya que tenía el suficiente espacio allí para recibir todas las visitas que quería.

Estaban Oliver y Fukase encerrados en el cuarto de Gakupo junto a Uni y Seeu por insistencia de sus amigos.

Miku no tuvo mejor idea que les haría bien una charla con una pareja que habían empezado siendo unos adolescentes caóticos y habían durado hasta madurar. Para ello le pidieron a aquella pareja de chicas universitarias que hablaran con ellos sobre sus experiencias y a Kaito junto a Len no se les ocurrió nada mejor que encerrarlos para que sus dos amigos no pudieran escapar de la realidad.

Gakupo decidió poner la casa por insistencia de este grupo y aparte, le gustaba ver arder el mundo, por si acaso las cosas se salían de control. Mikuo fue quien hizo la conexión y le gustaba ver los problemas de pubertos. Luka y Lily solo estaban allí por el chisme y, por último, Rin, Kaiko y Lapis, tan solo fueron por curiosas.

—A ver, yo entiendo porqué todos ustedes estén en mi casa comiendo las cosas que ustedes mismos trajeron —mencionó al ver como todos estaban comiendo papas fritas, galletas y otras botanas felices— lo que no entiendo es que hace ella aquí —señaló a una gótica que también estaba comiendo en absoluto silencio— ¿no que ella es la causante de todo mal de Mikuo versión femenina?

—Más respeto a mi hermana —le dijo su amigo con el ceño fruncido.

—Pues Flower me pidió hablar con Miku y que mejor estar todos presentes para vigilarla que no le haga nada a la pequeña —explicó Kaito.

—Igual tengo de que hablar con ella así que mejor para mí —miró a la gótica que estaba sentada al otro extremo de la mesita de centro— ¿Comienzas tú o yo?

Flower solo le hizo un ademán para que ella empezara primero, estaba muy entusiasmada comiendo como para dejarlo ahora.

—Te quería agradecer por haberme ayudado cuando pudiste, a pesar de que nos llevamos mal no dejaste que eso se fuera de las manos, no te perdono por todo lo que hiciste junto a tu amiga pero reconozco que actuaste bien. Tengo entendido que te dieron la oportunidad de volver a la escuela para el nuevo año pero rechazaste así que vengo a decirte que no es necesario que te vayas si no quieres, con tal de que ya no me molestes y estés vigilada me quedo tranquila.

Pasaron unos minutos antes de que la gótica hablara, primero terminó de comer todo lo que se había echado a la boca y pasarlo con un poco de gaseosa.

—No sabía que ustedes se juntaban solo para comer semejante cantidad de comida, debí haberme relacionado con este azulado hace un tiempo —le golpeó la espalda a modo de broma.

—¿Vas a ignorar todo lo que te dije?

—Una cosa a la vez, Hatsune, hay mucho que quiero decir, pero no esperes un "discúlpame" de mi parte, no me arrepiento de nada del pasado.

—Pues habla luego, Flower.

—¿Tienen algo más para comer? —miró directamente al dueño de la casa— se supone que eres el anfitrión hoy, ¿quieres que tus invitados se mueran de hambre? Ya es hora del almuerzo y no veo que estés preparando nada, ¿esperas que la visita haga todo?

—Para empezar tú no fuiste invitada.

—Lo fui por este de aquí —agarró a Kaito del hombro— él sí sabe ser amable con los demás.

—Solo encarga pizza y la pagamos entre todos, Gakupo, por favor.

Se levantó de mala gana a hacer el pedido.

Nuestro lindo amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora