Segundo libro de Inmune.
"Te protegeré, aunque eso signifique mancharme las manos de sangre."
- Leo vuelve a recordar todo su pasado y quien es en verdad. Ahora tiene la clara responsabilidad sobre sus hombros sobre cual es su papel y de cuidar aque...
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Después de la pelea...
La familia Cullen esperaba pacientemente a la llegada de Jane y el resto del séquito de Aro para que dieran por finalizada la tarea de haber derrotado a los neófitos que amenazan con que la humanidad supiera de ellos.
Una vez llegó la rubia con su hermano y el resto, se retiraron las capuchas de sus cabezas. Para unos pocos observadores les parecería una persona bastante seria la muchacha de cabellos rubios, pero tras sus ojos rojos como la sangre se podía apreciar el hilo del cinismo lo cual, todos los presentes eran más que testigos de lo que podría llegar hacer aquella menuda joven.
-Impresionante - habló con calma -. No había visto nunca un aquelarre estar intacto después de un combate de esta magnitud.
-Hemos tenido suerte - concluyó Carlisle con semblante serio.
-Eso lo dudo - soltó mordaz dejándolos callados a todos.
Alec, el hermano de Jane, mantenía una sonrisa entre burlesca como amablemente fingida mientras los observaba a todos.
-Nos hemos perdido un combate entretenido.
-Si - concuerdo Jane por lo dicho de su hermano -. No es habitual que resultemos innecesarios.
-Si hubierais llegado hace mediahora antes, habriais cometido vuestro cometido.
La sonrisa de los hermanos se ensancharon, mirándolo con gracia sobre el asunto el cual al vampiro lector de mente del clan contrario parecía molestarle.
-Qué pena - soltó con simpleza. Sus orbes rojos se fueron en dirección de Bree la cual estaba de espectadora esperando ser libre de todo ese asunto -. Os habéis dejado a una.
-Le hemos ofrecido asilo a cambio de que se rindiera - habló con rapidez y calma en su tono Carlisle.
-No tienes derecho hacerlo - le recordó mirándolo por unos segundos para volver a mirar a la recién nacida la cual, no tardó en caer al suelo gritando por el dolor inexplicable que sentía a causa del don de Jane - Porque has venido? ¿Quién te creó?
Esme cerró los ojos por unos segundos intentando no escuchar los gritos pero volviendo a mirar a la rubia actuó.
-No hace falta hacerle eso, os contara lo que necesitáis saber.
-Lose - dijo con diversión la rubia.
-No lo se - grito con dolor en el suelo Bree y con esfuerzo continuo hablando - Riley solo nos dijo que nuestros pensamientos no eran seguros.
Jane detuvo su don cosa que EDward aprovechó en dar información.
-Su nombre era Victoria. Tal vez la conocéis - apretó la mandíbula esperando a que dijeran algo al respecto, pero las miradas posibles y aburridas que le ponían los tres vampiros le hacía poner la piel de gallina a más de uno que observa.
-Edward - habló el patriarca de la familia semi girando su cuerpo en su dirección pero sin mirarle -, si los Vulturis hubieran sabido de la existencia de Victoria la habían detenido - Carlisle miró finalmente a Jane -. No es cierto, Jane?
-Claro - su comisura derecha se alzo por unos segundos para después girar ligeramente su cabeza hacia la derecha - Felix.
El nombrado tomó aire el cual no necesito para empezar a caminar con la clara intención de terminar el trabajo.
-No sabía lo que hacía - habló Esme y Jane detuvo con un gesto de mano a Félix - Nos responsabilizamos de ella.
-Darle una oportunidad - siguió Carlisle.
Jane estrecho ligeramente los ojos.
-Los Volturi no damos segundas oportunidades. No lo olvideis - su mirada cayo fríamente hacia Bella -. Caius estará interesado en saber que sigue siendo humana.
-Se ha fijado la fecha - hablo Bella con el ceño fruncido lo cual a Jane no le gusto su comportamiento.
-Encárgate Felix. Quiero volver a casa - dio por finalizada la conversación.
Feliz camino hacia la recién nacida y ninguno de los vampiros del aquelarre contrario se giró para ver cómo la vida de la pequeña muchacha era acabada por segunda vez. En cambio, Alec parecía bastante curioso observando lo que fue el campo de batalla. Lo que consiguió captar tras su sentido olfativo era un olor bastante peculiar en un punto del césped.
Giro ligeramente el rostro en dirección a su hermana la cual, al notar eso le miro de reojo esperando a que hablara.
-Hueles eso hermana?
Jane confusa tras su mirada decidió olfatear más a fondo el terreno. Los Cullen no pudieron evitar ponerse tensos pensando que habían sido descubiertos, pero lo que le dijeron fue más desconcertante.
-Circe - hablo con una sonrisa ligera pero visiblemente cínica.
-Disculpa? - pregunto confuso Carlisle.
-Lo que mi hermana quiere decir es que no os vamos a castigar por habernos mentido - hablo Alec con amabilidad fingida, los Cullen se miraron discretamente entre ellos sin saber bien qué estaba pasando -. Nosotros nos marcharemos. Ah! - inclinó la cabeza ligeramente - Darle recuerdos a Circe de parte de Aro, le encantará descubrir que sigue con vida.
Y como si de fantasmas se tratarán, los cuatro vampiros desaparecieron dejando un mal sabor de boca a la familia que aun sin entender a lo que se referian, se marcharon tal cual con su rapidez vampirica.
