Antes que las puertas del elevador sean abiertas, suelto la mano de Charles.Mamá me escribió para decirme que estarían desayunando en la cafetería del hotel. Hice una parada en mi habitación para cambiarme, ya me había duchado en la de Charles, tenía que estar presentable ante mi familia y no con la misma ropa de la noche anterior.
Le doy una rápida mirada al monegasco antes de salir. No quiero dejarlo pero me ha tocado despedirme de él en el cuarto del hotel, no sé cuándo será la próxima vez que vuelva a verlo, quedamos en seguir en contacto porque ninguno de los dos puede estar separado del otro.
—Espera —me impide seguir—. ¿Te gustaría cometer unos asesinatos conmigo?
No comprendo a que se refiere.
Charles me señala con la cabeza al pequeño grupo de siete personas que están cuchicheando en una esquina del pasillo.
Él se acerca a mí y con un rápido movimiento toma de mi brazo para arrastrarme con él.
Murmuran por lo bajo o eso intentan, puedo ver que es Norris quien habla sin parar.
—¿Qué pasa Lando? —le pregunta Daniel.
—Nada —responde su compañero.
—Vamos, no puedes dejarnos con el chisme a medio cocinar —George parece desesperado por saber lo que iba a decir Lando.
—Sí, sí puedo.
—Oh, vamos —prosigue Carlos—. Antes estabas habla y habla.
—No parabas de hablar como loro —se ríe Pierre.
Yuki asiente ante lo dicho por el francés.
—¿Con quién viste llegar a Charles? —interroga Daniel.
El piloto de la escudería papaya intenta comunicarse con sus compañeros a través de la mirada, intentando hacerlos callar porque nos ha visto y sabe que estamos parados justo detrás de ellos.
—Lando, nunca te quedas callado de golpe —lo mira extraño Yuki.
—Eso, Lando —dice Charles haciendo que sus compañeros volteen asustados—. Continúa con el chisme, estoy seguro que a Gemma y a mí nos encantaría saber.
Las mejillas de Lando se vuelven de un rojo Ferrari, jamás había visto al piloto de esa manera.
—Lo siento —se disculpa agachando la cabeza.
—Estás perdonado —hablo antes que Leclerc—, pero me gustaría saber una cosa.
—Claro, dime.
—¿Cómo es que se enteraron todos ustedes?
Lando es el primero en hablar.
—Lo descubrí solo —inicia—. El día que acompañaste a Russell y Lewis a reconocer la pista en México, al principio me llamaste la atención, nunca te había visto y tu cabello fue lo que tuvo que ver con la deducción... en cuanto Charles llegó, vi como evitabas verlo a toda costa, incluso, cuando preguntaron si se conocían, la forma en que Charles te miro me hizo recordar las fotos que estaban circulando de él con una chica misteriosa, esa chica de pelo llamativo como el tuyo.
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Heaven || Charles Leclerc
RandomGemma es una chica que suele pasar desapercibida muchas veces por el paddock. Muy pocos son los que saben que es hija de Susie Wolff. El año 2022 comienza a trabajar con los pilotos de F2 y F3, haciendo un buen trabajo como periodista y darle un po...