No hubo palabra.
Obviamente.
Simplemente empezó a desvestirse.
Los tres allí presentes no quedamos de piedra. Tanto que tomó unos segundos, considerablemente largos, que alguno de nosotros reaccionara.
- ¿¡Qué haces degenerado!? – Seungmin fue quién dijo algo.
Minho se quitó la camiseta y se puso la suya, la cual dejé en la silla del escritorio con el resto de la ropa una vez que la lavé.
Se quitó los pantalones, me miró algo....¿preocupado? ¿vergonzoso? Aun así, se giró para darme la espalda y justo en el momento en el que fue a quitarse los calzoncillos, Chan le agarró las manos.
- ¡Songi! ¡Sal! – se apresuró a decir este.
Yo no me fui de la habitación, simplemente me puse de espaldas. Estaba intentando descifrar qué intentaba decir el chico con estas acciones. ¿No estaba a gusto con esa ropa? ¿Quería "vestirse bien" ya que "había visitas"? O puede que....
Minho pasó por mi lado, abrió la puerta del dormitorio y bajó las escaleras. Me giré chocando visualmente con las miradas de mis dos amigos, quienes estaban tan estupefactos como yo en ese momento.
Volví la mirada hacia las escaleras, había perdido de vista al chico. No fue hasta que escuché el chirrido de las bisagras viejas de la puerta principal cerrarse, que supe qué pasaba.
- ¡Minho! – dije bajando las escaleras.
Escuché los pasos de Seungmin y Chan detrás de mí.
Salí a la calle, miré a un lado y hacia el otro, pero no encontraba al chico.
- Como le pase algo al chico, Seungmin – me giré hasta quedarnos frente a frente – No te lo voy a perdonar.
Enfadada, volví a la búsqueda del chico dejando a mis dos amigos atrás.
- ¡M! – grité - ¡Min! ¿Dónde estás?
- ¡Espera Songi! – gritó Seungmin.
Yo le ignoré, pero segundos después, tanto él como Chan estaban a mi lado.
- ¡Min! – le llamó Chan.
- ¡M...Minho! – gritó dudoso, pero más fuerte mi otro amigo. Sonreí, aunque lo oculté.
- ¡Ya sé! ¡Venid! – dije mientras me dirigía al callejón en el que solía encontrármelo.
A toda prisa, fuimos hasta allí, pero al llegar al callejón no había absolutamente nadie. Y eso era muy raro, aunque no le di importancia debido a las circunstancias. ¿Dónde puede estar ese niño? ¿Tanto había corrido? No creo....
Tal vez....
- Somos unos tontos – susurré.
- ¿Qué? – habló Chan.
- Claro....no ha podido irse muy lejos, apenas le dimos tiempo para hacerlo. No está en el callejón y no está en la calle de mi casa....eso significa que se ha escondido por alrededor.
No los vi muy convencidos, aunque era una opción. Pero eso no evitó que, al menos, lo comprobáramos.
- ¡Minho! – grité una vez más al llegar a mi casa. - ¡Sal por favor!
- L....lo siento – dijo Seungmin en voz baja, y que se disculpara me sorprendió, aunque realmente Minho no lo escuchara. - ¡Venga mocoso, sal!
- ¡Niño! – habló Chan.
Vi unos arbustos moverse, y luego algo crecer.
Sonreí.
Le vi restregarse los ojos con la manga de la camiseta varias veces antes de andar hacia nosotros con la cabeza agachada.
- ¡Me has asustado idiota! – dije mientras le daba un golpe en el hombro.
Este se lo acarició, pero agachó más su cabeza en símbolo de disculpa.
- ¡Tsk! Estúpido....anda que irte de esa manera – habló Seungmin mientras le daba un golpe con el dedo en la frente – te queda bien el nuevo corte de pelo – dijo desviando la mirada.
Ese cumplido fue la manera de disculparse de Seungmin cara a cara. Obviamente no iba a decirle un "lo siento" o un "perdóname" al chico una vez lo tuviera de frente, pero su alago hizo como tal.
¡Hasta aquí el capítulo de hoy!
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AUTORA DE: Kaori, la esfera mágica.
EDITORIAL: Ediciones Arcanas.
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ESTÁS LEYENDO
Sin brillo en tus ojos - Lee Know (Minho) - Stray Kids
Fiksi PenggemarMiedo. Dolor. Oscuridad. Esas son las únicas palabras que Minho conoce. Abandonado, vaga por las calles día y noche en busca de algo que llevarse a la boca. Sus huesos están tan marcados que sus sucias ropas apenas pueden ocultarlos. Y su voz ya no...