Alluring Secret

Encontrado

Cindy paseaba de manera bastante melancolica a través del bazar de flores de Titirilquén, sus ojos demostraban tristeza al apreciar los lirios con toques blancos y dorados que tanto le recordaba a su amigo, guardaba la esperanza de encontrar a Tulio curioseando o solo perdiendo el tiempo en ese lugar donde inició toda la desgracia pero no había ningún rastro de él. 

Hacia más de dos meses en que el ángel mensajero había desaparecido de la faz de la tierra y ni con el libro de ángeles del señor Manguera se podía localizar. El cielo fue un total caos, Eusebio ordenó a todos buscarlo en cielo, mar y tierra pero no hubo rastro de Tulio. El ángel supremo se había hundido en una gran depresión pero aun así trataba de no descuidar sus labores; por su parte  Cindy se sentía bastante culpable de todo y solo quería abrazar a su amigo para pedirle perdón por participar en algo que desde el principio estuvo mal.

La arcángel tenía la esperanza de verlo con Juan Carlos pero aquel noble seguía su vida normal como si el ángel jamás hubiera existido y a ella solo le quedaba vagar en aquel pueblito que tanto amo su amigo como si fuera aparecer.

Pese a su entrenamiento tan estricto no pudo evitar que sus reflejos fallaran y terminara chocando con alguien.

-Lo siento, no fue mi intención iba bastante distraída- Cindy empezó a disculparse y tratar de ayudar a levantar a quien fuera consecuencia de su distracción.

-No te preocupes, se que es algo dificil caminar por estas calles y además no es como si fueras por el mundo tirando gente- una linda chica rubia le sonrió. Cindy se sintió rara al ver esos ojos azules que demostraban tanta sinceridad y no pudo evitar ruborizarse un poco.

-Aun así, disculpeme señorita....

-Amapola Polar, simplemente dime Amapola no me gustan los demás títulos u honoríficos.

-Mucho gusto, soy Cindy Miraflores.

-Un curioso apellido para el lugar en el que se encuentra- comento amablemente Amapola.- Siempre hay rostros nuevos en el pueblo por los festivales pero nunca la había visto a usted ¿Está de vacaciones?

Cindy sonrió con un poco de tristeza- Me gustaria que mi estancia en este lindo lugar sea por algo bueno pero realmente no, estoy buscando a alguien.

-Suelo ver a muchas personas, si me da la descripción podría ayudarla. El bazar no es tan grande y estoy segura que aparecerá- se ofreció Amapola.

-No es que nos hubiéramos separado en estos momentos, señorita Amapola- escapó de sus labios aquel honorífico- Como puede ver servimos al templo- señaló sus blancas vestiduras- Nos hemos criado juntos como hermanos pero hubo un problema en la abadía por lo que no lo hemos encontrado en algunos meses y él solía venir aquí. Tenía la esperanza de verlo deambular por aquí pero solo me he llevado un poco más de tristeza desde su partida.

La rubia la miró con algo de tristeza- Lamento mucho escuchar eso, quiero ofrecerle mi ayuda soy ayudante de la policía de aquí tal vez con una descripción pueda ayudarla por su algún día vuelve a este pueblo.

Cindy pareció dudar un momento pero asintió, algo de ayuda humana vendría bien- Su nombre es Tulio Triviño, es un adulto joven bastante alto y delgado, piel pálida, siempre viste de blanco, ojos dorados y bastante... inocente- quería decir que era tonto pero eso se lo guardó para ella misma, no como un insulto sino con cariño.

Amapola tomo nota mental, tenía una excelente memoria por lo que aquella descripción le sonaba bastante familiar, sin embargo, nada venía a su mente ante la mención del desaparecido- Gracias por confiar en mí, no puedo imaginar el dolor que estas pasando y espero que la persona que busques aparezca pronto.