Eternamente

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Titiritalca era una ciudad bastante bulliciosa, pese a haber pasado una pequeña guerra donde las fuerzas celestiales y demoníacas participaron, se recuperaba de manera espléndida gracias al ser una ruta obligatoria, por su estratégica zona geográfica, para otras ciudades y pueblos; por lo tanto se creaba un gran dinamismo por el comercio, algo que la salvó de la destrucción.

La tarde estaba llegando a su fin, pero la vida en las calles seguía como si no importara que pronto el manto nocturno cubriría la ciudad. En este lindo escenario caminaban tres ángeles, ansiosos de llegar a su destino.  

-Queridos amigos, saben bien que si el Señor Manguera nos ve aquí tendremos muchos problemas- Un temeroso Policarpo caminaba detrás de la arcángel en el concurrido centro de Titiritalca. Sin embargo, su miedo era más por la información que revelaría que por el ángel supremo

Los tres amigos decidieron ocultar sus alas para hacerse visibles ante los humanos pues no era raro que algunas órdenes religiosas estuvieran en esos lugares, además así pudieron pasar desapercibidos para las fuerzas malignas.

-Esta bien si no quieres venir conmigo- le contestó de manera tranquila- Asumiré toda la responsabilidad si es necesario.- trató de tranquilizar Cindy al ver las dudas del pelinegro.

-Yo solo quiero cerciorarme que Tulio siga vivo- contesto Juanin con una pequeña sonrisa, se sentía tan feliz que la pandilla nuevamente se uniera.

Hacía algunos meses que Juanín había informado a Cindy y Policarpo sobre la localización de Tulio por lo que todos acordaron mantenerlo en secreto e ir a buscarlo, sin embargo, ya no se encontraba en el pueblito de Titirilquén. Todos se sintieron devastados pero la pequeña amistad que habían formado Amapola y Cindy resultó muy benéfica para ellos.


Flashback

-¡Al final venimos por nada!- se quejo Policarpo al ver el consultorio médico donde debería estar Tulio vacío.

Era completamente desafortunado pues había tenido que terminar más rápido sus deberes para poder coincidir  ye ir a ver al ex ángel mensajero.

-Era normal- susurro la pelirosa- Si Juanín le dijo  que yo decidiría que hacer con la información, lo más probable es que pensara que traería conmigo al señor Manguera.- La arcángel se sintió triste al pensar que su amigo nunca volvería a confiar en ella.

La arcángel lidiaba con sentimientos tan contradictorio, por una parte sentía que se merece el odio de Tulio y por otra parte añoraba su perdón. Lo único seguro era que deseaba ver a su mejor amigo una vez más.

-Puedo buscarlo en los pueblos cercanos pero llamaría la atención del Angel Supremo- pensaba en voz alta Juanin para tranquilizar a sus amigos.

-Esta bien, no te preocupes Juanin- la chica suspiro- No puede huir por siempre de nosotros y por la información que nos has proporcionado lo encontraremos primero antes que el Paraíso y Manguera. 

Los tres iban a desplegar sus alas y volver a su labor cuando cierta mujer de cabellos rubios se acercó a ellos curiosa de ver a la esbelta mujer con la que intercambiaba correspondencia.

-¡Oh, es una sorpresa vete de nuevo, Cindy!- Amapola que paseaba cerca del lugar se apresuró a llegar con el grupo para ver a la arcángel-  No recibí una carta tuya sobre que vendrías.

Juanin y Policarpo miraron a su amiga intrigados ¿La estricta arcángel había hecho amistad con una humana?

-Fue una visita rápida, Amapola, no pensaba quedarme todo el día en el pueblo... Solo venia a ver si estaba abierto este lugar.- trato de mantenerse amigable pese a que las miradas curiosas de sus amigos la estaban poniendo nerviosa.- Pero donde estan mis modales, disculpa, te presento a mis amigos: Juanin Juan Harry y Policarpo Avendaño.

Alluring SecretDonde viven las historias. Descúbrelo ahora