So Cold And Warm

Capítulo 22. Una trampa

Luffy y Ace salieron del coliseo a toda prisa aún con las emociones a flor de piel. Sabo estaba vivo. Después de tantos años pensando que su hermano había muerto, habían podido hacer algo que pensaban que no volverían a hacer jamás. Escuchar su risa de nuevo.

*Flashback*

-¡SABO! -Gritaron ambos hermanos.

-¿Eres tú de verdad? -Preguntó Luffy rompiendo en llanto mientras su nariz comenzaba a gotear.

-Pensé que no volvería a verte jamás... -Susurró Ace.

-Yo... -El rubio se rascó la nuca algo avergonzado. -Perdí la memoria después del accidente...

Los morenos abrieron los ojos sorprendidos ante aquella confesión.

-Después de la explosión caí inconsciente al mar pero alguien me encontró y cuidó de mí. Crecí sin saber quien era antes de eso. Sólo sabía mi nombre porque lo ponía en mis ropas pero todo lo demás se esfumó. Sin embargo, después de la gran guerra de Marineford y su aparición en todos los periódicos del mundo, al leer vuestros nombres en las noticias todo volvió a mí de golpe. -Los ojos de Sabo se cristalizaron. -No puedo creer que estéis aquí chicos. -Dijo antes de abrazar a los otros.

-¿Qué estás haciendo aquí? -Quiso saber Ace al separarse.

-Ahora soy parte del ejército revolucionario y sabemos la mierda que se dedica Doflamingo a organizar en este lugar. Pienso participar ocultando mi identidad y acabaré con este circo.

-¿EL EJÉRCITO REVOLUCIONARIO? -Gritaron los dos morenos.

-¡Shhh! -Sabo tapó las bocas de sus hermanos con fuerza. -¿Podéis bajar el volumen? Esto está lleno de gente de la peor calaña. ¿Y qué demonios hacéis vosotros aquí?

-Vamos disfrazados para que nadie nos reconozca para poder acabar con el reinado del terror de ese idiota emplumado. -Dijo Luffy.

-¿Te refieres a Doflamingo? 

-Tenemos una cuenta personal con él por muchos motivos. -Agregó Ace.

-Entonces será mejor que no hagáis esperar a vuestros amigos. Yo me encargo de esto. Dejadlo en mis manos. -Respondió el rubio giñando un ojo a los otros mientras les regalaba una cariñosa sonrisa.

-Pero Sabo...

-Estaré bien. No estoy solo. Mi compañera Koala está conmigo y fuera tenemos más camaradas.

-¿Volveremos a vernos? -Preguntó Luffy triste.

-Oí Luffy. -Sabo elevó su barbilla para que el menor le mirara y después miró también a Ace. -No pienso volver a olvidaros ahora que sé que estáis bien y que los dos cumplisteis vuestro sueño. La próxima vez que nos veamos lo celebraremos y brindaremos juntos de nuevo así que ninguno puede morir aquí. Es una nueva promesa.

El pecoso sonrió mientras contemplaba a su hermano. Parecía un sueño pensar que aquél hombre que estaba ante él se trataba del mismo niño con el que tantas cosas había vivido años atrás. Sus ojos se llenaron de lágrimas y mientras Luffy no dejaba de moquear la ropa de Sabo sin soltarle, asintió feliz.

Es una nueva promesa.

-Nos vemos pronto. -Dijo antes de salir de allí junto al del sombrero de paja.

*Fin del flashback*

Ahora no podían permitir que todo lo que sentían se interpusiera en su cometido. Sabían que tenían que permanecer centrados y seguir el plan así que fueron por toda la ciudad en busca de sus amigos. Después de caminar varios minutos sin rastro de nadie escucharon los pasos apresurados de alguien que se acercaba a gran velocidad hacia ellos. 

Zoro.

-Por fin os encuentro. Las calles de este lugar maldito no paran de moverse. -Se quejó. Pero después calvó sus ojos en Luffy y endureció su semblante.- Tenemos problemas.

-¿Donde están los demás? -Preguntó el capitán sabiendo que algo había pasado.

-El plan sigue en marcha. Cada grupo está cumpliendo con su deber pero mientras nos dirigíamos a la fábrica de Slime, Torao escuchó a uno de los hombres de Doflamingo hablar sobre haber descubierto la posición del Sunny así que se fue al barco usando su habilidad antes de que ese desgraciado llegara para tenderle una trampa.

-¿Una trampa? ¿Qué quieres decir Zoro? ¿Dónde está Law? -Quiso saber el pecoso nervioso. Algo no iba bien.

-Ha vuelto a aparecer con uno de sus rooms y ha traído a Doflamingo con él. Están teniendo una batalla en el puente de la ciudad. 

Antes de que el espadachín pudiese continuar Ace comenzó a correr a toda prisa hacia el lugar que le acababan de indicar. Maldita sea, no esperaba que Law tuviera que encontrarse con aquel hombre tan pronto y rezaba a todos los dioses que existían para que el ojeroso se encontrara bien. Al acercarse al puente de Green Bit descubrieron con sorpresa que el lugar estaba gravemente dañado. Todo lo de alrededor parecía haber sufrido los daños colaterales de la batalla que estaba teniendo lugar. Además debido a la intensidad del combate y la rapidez con la que se movían los dos hombres que luchaban se había levantado una gran nube de polvo que imposibilitaba la visión.

-¡¡LAW!! -Gritó Ace presa del pánico al no ser capaz de distinguir las siluetas que se movían en ese puente.

Zoro se movió con rapidez y cuando estaba apunto de llegar al puente, uno de los hombres de Doflamingo apareció ante él interponiéndose en su camino. El espadachín miró a su enemigo con un brillo en la mirada y se preparó para desenvainar sus espadas. 

Sin embargo, todos los allí presentes se detuvieron en el acto al escuchar el grito desgarrador que salió de la garganta de Trafalgar Law. Apenas habían pasado unos segundos pero parecía que llevasen años en la misma posición. Ace sentía que su corazón estaba a punto de estallar y por un instante, sintió cómo su órgano dejaba de latir al ver el cuerpo del tatuado caer de bruces contra el suelo.

-¡BASTARDO! 

Puño de fuego dejó escapar una gran llamarada que envolvió su cuerpo al instante. Apenas un segundo después se encontraba junto al Shichibukai y le golpeaba con todas sus fuerzas en el estómago. El rubio se encogió sujetándose el abdomen y comenzó a toser llenando el lugar de sangre. Tras unos segundos su expresión de angustia cambio a una sonrisa de total sadismo.

-Así que tú eres la nueva esperanza de mi pequeño Traffy. -Comenzó ensanchando aún más su mueca. -Es una lástima que te espere el mismo final que a mi querido hermano Corazón. 

Al terminar de hablar se incorporó con rapidez y levantó su mano como si de un titiritero se tratase moviendo sus dedos y haciendo que unos finos hilos invisibles aparecieran junto al cuerpo de Ace. Sin embargo antes de que el primer hilo atravesara la piel del pecoso, su cuerpo desapareció para aparecer unos metros más atrás.

-¿Así que aún no estás muerto después de todo? -Preguntó Doflamingo dirigiéndose a Law mientras se carcajeaba. 

El tatuado movió su mano con lentitud y desactivó el room que acababa de crear mientras levantaba su dedo corazón hacia aquel hombre y mostraba una sonrisa ladeada. Ace volvió a correr hacia él sin importarle lo más mínimo la habilidad de su enemigo pero antes de poder llegar-

Un disparo.

Dos.

Tres.

Los ojos de Ace se abrieron de par en par mientras las lágrimas comenzaban a caer de ellos sin control. Su boca se secó de golpe y sintió cómo su corazón se partía en mil pedazos. Algo dolía y era un dolor mucho más profundo y punzante que cualquier otro dolor que hubiera experimentado antes. Zoro y Luffy parecían estar congelados por lo que acababan de presenciar sin embargo, el que alguna vez fue el segundo comandante de Barbablanca se lanzó hacia el rubio con rapidez mientras una gran llamarada hacía arder todo a su alrededor. La risa de Doflamingo no tardó en hacerse presente y con un movimiento increíblemente rápido, atrapó el cuerpo de Law y se marchó del lugar sin dejar rastro.