So Cold And Warm

Capítulo 30. Juntos

AVISOS: CAPÍTULO ZOSAN 

-¡ERO-COOK!

-¡SANJI! ¿Donde te has metido?

Sanji reconoció aquellas voces al instante y se tensó al sentir la nota de preocupación que había en sus palabras. Apretó sus puños mientras miraba al hombre que le acompañaba en esos momentos. Pekoms había ido en su busca por órdenes de Big Mom. Sintió un escalofrío al recordar la carta que recibió días atrás. Aquel papel informaba sobre el enlace matrimonial que tendría lugar entre la trigésimo quinta hija de Big Mom, Charlotte Pudding y uno de los hijos de prestigiosa familia Vinsmoke, Vinsmoke Sanji.

-¡Vamos Idiota cejas de caracol! ¡No puedes irte así!

Escuchar la voz de Zoro suplicando porque no se fuera le hizo volver al presente y dirigir su mirada hacia donde había escuchado a su nakama. Sus ojos escocían y sentía cómo sus piernas comenzaban a temblar haciendo que moverse fuera más difícil de lo que recordaba.

-¡Te necesito! ¿Me escuchas? Todos te necesitamos... 

Aquello le hizo dar un brinco mientras una lágrima escapaba de su ojo destapado de forma inevitable. Sanji dio un paso hacia el lugar de donde parecía proceder la voz de su nakama pero la mano de Pekoms sujetó su brazo frenándolo en el acto.

-No sé qué estás pensando hacer pero por tu bien y el del resto de tus amigos, te recomiendo que lo pienses dos veces. -Amenazó susurrando para no ser descubierto. -No tardarán en rendirse.

-Creo que Kuroashi-ya aún sigue aquí. No hay rastro de ningún tipo de barco por ninguna parte. -La acertada deducción de Trafalgar provocó que el león tronara su lengua molesto.

-¡SAAAAANJI! ¡Como tu capitán te ordeno que si estás aquí aparezcas de una vez!

-Por favor Sanji... -La voz de Zoro sonaba desesperada. -No puedes marcharte sin darme al menos una explicación de lo que está pasando...

-Vas a decir a tus amiguitos que has tomado la decisión de venirte conmigo y que quieres que te dejen en paz de una buena vez. ¿Me escuchas? 

El rubio se negó un par de veces sintiendo cómo Pekoms empujaba su cuerpo mientras ambos se dirigían a la costa de nuevo con la intención de salir de su escondite. ¿Cómo demonios iba a mirar a la cara a sus nakamas mientras les decía que quería irse de su lado cuando nada de eso era verdad? ¿Cómo iba a poder estar cerca de Zoro sin dejarse llevar por las ganas que sentía de quedarse con él? ¿Sería capaz de disimular lo suficiente el hecho de que su corazón se había roto en mil pedazos en el momento en el que supo que debía alejarse de sus amigos para protegerlos?

-¡Eres tú! -Luffy saltó sobre él abrazándolo provocando que el rubio se tensara aún más. -¿Qué está pasando? ¿Qué es todo eso de que te quieres ir?

-Sólo es la verdad Mugiwara. -Dijo Pekoms a su espalda.

Todo sucedió demasiado rápido y antes de darse cuenta de cómo había pasado aquello, Zoro sujetó el cuello de la chaqueta del león mientras su mirada brillaba con ira dispuesto a atacar en cualquier momento. Se relamió los labios antes de hablar y ese gesto provocó un escalofrío que se expandió por todo el cuerpo de Sanji.

-Dame una sóla razón para no cortarte en dos aquí mismo. -Gruñó amenazante.

-Zoro ¡Basta! ¡Suéltale! -Gritó el rubio interponiéndose entre los dos hombres.  -¡Él dice la verdad! Yo... -Al alzar la vista sus ojos azules se encontraron con los del espadachín y de pronto, sintió cómo las pocas fuerzas que tenía le abandonaban. -Yo quiero irme. -Susurró finalmente mientras volvía a clavar su mirada en el suelo.