•1•

9.5K 288 11
                                    

𝗛𝗲𝗮𝘁𝗵𝗲𝗿

Entré con mis padres y mi hermano pequeño al club de playa.

—Los LaRusso—nos saludó uno de los amigos de mi padre.

—Hola—dijo mi padre para luego continuar hablando con él.

Aproveché para inspeccionar el lugar, pero no había ni rastro de mi objetivo.

Cuando mi padre dejó de hablar, caminamos hasta una mesa donde dejamos nuestras cosas.

—Mamá, voy al bar a por algo—le dije.

—Vale, cariño.

Me levanté de la silla para caminar hasta la barra del bar donde pude ver a Robby.

—Hola—lo saludé mientras me apoyaba en la barra.

Él me miró con una sonrisa.

—Por fin algo bueno en mi día—dijo—. Hoy está siendo un día demasiado estresante, esto está hasta arriba.

—¿Cuándo tienes un descanso?—le pregunté.

—En unos cinco minutos—respondió.

—¿Y no puedes empezarlo un poco antes?—cuestioné.

—No creo, el jefe la tiene tomada conmigo—respondió mientras preparaba un pedido—. Además, es el descanso largo así que, igualmente, estaremos juntos mucho tiempo.

—Bien, me esperaré—accedí, finalmente—. Luego coge algo de beber, anda.

Volví a donde estaban mis padres.

—Hola—me saludó mi padre—. ¿Hay algún amigo tuyo por aquí? Sino he visto a Aisha por la parte de abajo.

—Hay unos amigos aquí. Estaré con ellos—mencioné.

—Bien—me dijo con una sonrisa—. Cuando nos vayamos te llamaré. Sé que puedo confiar en ti.

Le sonreí.

》Voy a tratar de que tú hermano deje el Ipad de una vez.

—Suerte con eso—dije—. No recuerdo la última vez que vi a Anthony sin jugar a videojuegos.

—Pásatelo bien—me dijo con una sonrisa antes de irse.

Me giré para mirar el bar y pude ver cómo Robby ya salía, así que me acerqué hacia él.

—Por fin—dije detrás de él.

—Exagerada. No has tenido que esperar más de cinco minutos—dijo, divertido—. Ahora vamos para allá que hay menos gente, tengo algunas cosas para los dos.

Fuimos a una zona en la que apenas había gente y nos sentamos junto a una pared.

—Mira lo que tengo—me dijo sacando unos cigarrillos y algunas cervezas que habría tomado del bar.

—¿Qué es?—pregunté cogiendo un cigarrillo.

—Marihuana—dijo.

—Oh—hablé—. ¿Tienes mechero?

Él asintió y se encargó de encenderme el cigarro.

Le di una calada para inmediatamente notar lo fuerte que estaba.

—Joder—dije mientras tosía.

Le di el cigarro y el comenzó a fumar sin ningún problema.

Quizá me quedé mirándolo más de la cuenta, pero me encantaba verlo fumar.

Él se dio cuenta y se acercó para besarme, yo le seguí poniendo mi mano en su cuello.

—Ojalá no estuviese en el trabajo porque ese bikini te queda jodidamente bien—habló.

𝕷𝖔𝖘𝖙 𝖎𝖓 𝖙𝖍𝖊 𝖋𝖎𝖗𝖊 || 𝕽𝖔𝖇𝖇𝖞 𝕶𝖊𝖊𝖓𝖊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora