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𝗛𝗲𝗮𝘁𝗵𝗲𝗿

Sería la primera vez en el Miyagi-Do tras el torneo.

No lo estaba pasando precisamente bien mentalmente desde el torneo, me sentía muy culpable.

La puerta de la caseta se abrió dejando ver a papá.

-Acercaos todos-dijo-. Me alegra mucho veros de nuevo. Teníamos un objetivo en el All Valley: derrotar a Cobra Kai. Y conseguimos un trofeo de campeón gracias a Eli.

Todos aplaudimos.

》Pero el resto no salió como esperábamos—bajé la mirada—. Dijimos que si perdíamos cerraríamos el dojo. Y... es lo que haremos.

Nos miramos confusos entre nosotros.

-A partir de hoy, cierro el Miyagi-Do Karate-continuó papá.

-¿Qué?-cuestioné incrédula.

¿Había dicho que me sentía mal mentalmente por el torneo? Pues ahora tenía otra razón para sentirme mal.

Yo era la culpable de que Miyagi-Do cerrara.

-Pero, señor LaRusso...-trató de decir Eli.

-Sé que no es lo que queríais oír, pero, con todo lo que pasa en Cobra Kai, mantener Miyagi-Do abierto sólo hará que os persigan.

》Chicos, tengo que protegeros. ¿Vale? Recordad lo aprendido. Este dojo cerrará, pero el Miyagi-Do seguirá viviendo dentro de vosotros.

-Genial. Pues me buscaré un trabajo para el verano-dijo Demetri.

Todos desalojaron el dojo excepto yo que me quedé ahí.

Me acerqué a papá.

-Este no puede ser su plan-mencioné.

-Estás decepcionada-dijo.

-Quiero arreglar las cosas-hablé-. Esto no pasaría si yo no hubiera perdido ante Tory. Es culpa mía.

-No, es mía-respondió mi padre-. Johnny no está y me toca arreglarlo. Llamé a Chozen porque ya no se trata del campeonato. Es la vida real.

-Puedo luchar-hablé.

-Esta no es tu guerra-contestó papá-. Sé de primera mano que a Silver no le importa poner a adolescentes en peligro. Debo manteneros al margen.

》Así que, por favor, confía en mí.

Negué antes de irme de ahí.

Me encontré a Sam en la salida.

—¿Vamos a casa a entrenar?—le pregunté.

Ella asintió.

[...]

Sam me lanzó dos patadas tal y como se veía en el video de mi pelea con Tory y yo las detuve, después, continuamos imitando el video hasta que llegó la parte donde Tory ganaba el combate.

-A ver, de nuevo-me dijo.

Comenzamos a pelear de nuevo hasta llegar a la misma parte.

-Joder, no sé-dije, exasperada, mientras me acercaba al ordenador para volver a ver el video.

-¿No crees que te estás martirizado demasiado?-me preguntó acercándose también.

-Miyagi-Do está cerrado por mi culpa-respondí—. Y Cobra Kai está creciendo, todo porque perdí ese estúpido combate.

-No es solo tu culpa, yo también perdí-dijo-. Pero por mucho que te eches la culpa, el dojo no volverá a abrir.

La miré en silencio.

De repente, su móvil comenzó a sonar.

-¿Miguel?-cuestionó-. ¿Dónde estás? ¿Estás bien? Te he estado llamando....

Por fin daba señales de vida.

》¿Has dado con él?... ¿Por eso has llamado? Tu madre está preocupadísima. No dijiste a nadie a donde ibas.

》Porque nos importas. Miguel, lo que haces es muy peligroso. Si tu madre y tu abuela se alejaron de él debían tener una buena razón.

》¿No me preguntas por el campeonato? ¿No vas a preguntar si Heather ganó o perdió?

》No lo hago, pero... creía que apoyarías al dojo.

Podía escuchar el tono molesto de Miguel aunque no entendiera lo que decía

》Sí, claro que las hay.

Sam colgó el teléfono, molesta.

—Venga, ponte de nuevo—me dijo ignorando la conversación con Miguel.

01•09•2023

𝕷𝖔𝖘𝖙 𝖎𝖓 𝖙𝖍𝖊 𝖋𝖎𝖗𝖊 || 𝕽𝖔𝖇𝖇𝖞 𝕶𝖊𝖊𝖓𝖊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora