ARES
Mi madre lleva fuera de casa todo el día, me había platicado que iba a tener varias asuntos en el hospital, yo en cambio tuve citas y reuniones con varios miembros del consejo, esto con el asunto del que ya me habían autorizado mi intercambio; conozco a mi madre, yasser y Darren, se que ocultan algo, les dejaré que me lo cuenten y ya sabremos resolverlo si es un problema, ya en este momento solo espero a que llegue, he preparado la comida yo mismo, le di el día libre a Olga, nuestra cocinera ya que quiero hablar con mi madre a solas, un momento madre e hijo, pedirle consejos y que me guíe por el buen camino del romanticismo, el tiempo se acaba y debo demostrar a Di que aunque estemos lejos lo nuestro puede funcionar.
-Pero mira nada más, que hermoso luces con delantal y todo sucio, vaya que estos días fuera del hospital han servido de mucho, mi pequeño gasparin.
-Tenias demasiado sin decirme así.
Le respondo a mi madre al verle llegar.-Recuerdo muy bien que las últimas veces que preparaste de comer tú solo te bañaste en harina y mira ahora preparas comida sin repetir la escena.
-Igual si quieres lo puedo hacer para ti.
-Que tiempos aquellos Arnold, que tiempos aquellos.
-Dejemos de pensar en cosas del pasado, tomé asiento y a comer que necesito hablar con ud.
-No habrás hecho otra de tus ocurrencias, ¿Verdad?
-En lo absoluto, sólo que.... Este como decirlo...quiero pedirle un consejo.
-Haber habla, en qué te puedo ayudar.
-La comida se enfría, mejor habrímos una botella de las que Yasser tiene en la Caba y hablamos.
El tiempo pasó volando, pronto ambos limpiamos la mesa, lavamos los platos y nos dirigimos al despacho de yasser, era momento de que hablara con la persona a la que le tenía más confianza en el mundo.
[Recuerdo muy bien aquel día que le confesé que me gustaban los chicos, estaba en segundo grado de bachillerato, actualmente estaba en dos actividades extracurriculares, natación y fútbol y en ambas actividades estaba Xander, el chico que me gustaba o bueno eso lo descubrí después, todo fue muy confuso, ambos éramos amigos, nos caíamos bien, salíamos de vez en cuando, íbamos a fiestas, todo muy casual y divertido, recuerdo bien que en una fiesta, en quinto grado ya estábamos algo ebrios, Xander no se podía quedar de pie mucho así que accedí ayudarle.
-vaya que has bebido demasiado colega.
-No lo suficientemente, sabes que me marcharé en los próximos meses, debo de aprovechar mis días aquí, con mis amigos.
--Me dio una par de palmadas en mi cachete izquierdo-- amigo miraste a Sara, no te quitaba la mirada en toda la tarde, sobre todo cuando te arrojaste a la piscina, vaya cabrón que cuerpo atlético.-Anda ya, Xander, deja de decir tonterías te llevo a tú casa.
Todo el camino Xander no dejar de decir incoherencias, que tenía a la mujer que quería a mis pies, que si había estado con alguna chica, que si había besado algún chico, obviamente que al escuchar esas palabras mi cuerpo se estremeció sobre todo por qué el era el que me gustaba o eso creía en ese momento.
Llegamos a su casa, una mansión enorme, su padre se dedicaba en la construcción, era un ingeniero muy reconocido en la ciudad, entramos a su casa, no había nadie, lo dejé en su habitación y cuando me disponía a marcharme...
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Antes De Que El Otoño Llegué
RomansaEsta no es una típica historia de un enfermero, un medico y el amor, es algo más haya que jamás debe de suceder en un hospital de tercer nivel, ¿sucederá lo pensado? ¿Serán felices? ¿Donde queda la ética? ¿Habrá más que amor?