CAPITULO 10

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El compromiso entre Cate y Gianna se fortaleció a medida que pasaban más tiempo juntas. Exploraron Nueva York, compartieron risas y confidencias, y lentamente empezaron a abrir sus corazones el uno al otro.

Una tarde, mientras paseaban por Central Park, Cate decidió hablar sobre Sandra, la sombra que seguía acechando su mente.

- -Mirando al horizonte- Gianna, necesito ser sincera contigo sobre Sandra. A pesar de lo que siento por ti, no puedo dejar de pensar en ella. Hay una conexión que no puedo ignorar.

Gianna asintió, sabiendo que este era un tema delicado. Aunque le dolía, comprendía la complejidad de los sentimientos de Cate.

- -Con empatía‐ Cate, entiendo. No puedes apagar tus sentimientos de la noche a la mañana. Lo que compartimos es especial, pero sé que hay asuntos pendientes. Solo quiero que sepas que estoy aquí para apoyarte en lo que necesites.

A medida que los días pasaban, Cate se encontraba atrapada entre dos mundos emocionales. Por un lado, estaba Gianna, quien le brindaba amor y apoyo incondicionales. Por otro lado, Sandra seguía siendo una parte arraigada de su corazón, una conexión que no podía negar.

En una noche estrellada, mientras cenaban en un restaurante acogedor, Cate tomó una decisión que cambiaría el rumbo de su vida.

- -Mirando a los ojos de Gianna- Gianna, he estado reflexionando mucho sobre nosotros y sobre Sandra. No puedo negar lo que siento por ti, pero también debo enfrentar lo que siento por ella. Necesito hablar con Sandra, aclarar las cosas y entender lo que realmente está en mi corazón.

Gianna sonrió con tristeza, sabiendo que este era un paso necesario para Cate.

- -Con comprensión- Cate, te apoyo en esta decisión. Tu búsqueda de la verdad es valiente, y no importa lo que suceda, estaré aquí cuando estés lista.

La noche continuó con la promesa de un nuevo amanecer. Cate estaba decidida a enfrentar sus sentimientos y comprender el misterio de su corazón, sin importar las incertidumbres que el futuro pudiera traer.

Después de su cena en ese restaurante acogedor, Cate decidió que era hora de enfrentar sus sentimientos y aclarar las cosas con Sandra. Aunque su relación con Gianna se había convertido en algo significativo, la conexión con Sandra seguía siendo una sombra constante en su mente.

Cate se armó de valor y llamó a Sandra para concertar una reunión. Sandra aceptó, y eligieron encontrarse en un tranquilo café en el centro de la ciudad.

- -Con mirada seria- Cate, he notado que has estado distante últimamente. ¿Qué está pasando?

- -tomando una respiración profunda- Sandra, necesito ser honesta contigo. Ha habido algo que he estado sintiendo desde hace mucho tiempo, algo que nunca te he dicho.

Sandra frunció el ceño, esperando una revelación.

- -Con sinceridad- Desde el día que re encontré borracha en la sala, he estado confundida. Querías besarme, Sandra. Y eso ha estado atormentándome. No puedo evitar pensar que hay algo más entre nosotras.

Sandra se quedó en silencio, sorprendida por las palabras de Cate. Después de un momento, respondió.

- -Con voz temblorosa- Cate, yo también he sentido algo especial desde ese día. Pero tenía miedo de arruinar nuestra amistad.

Cate y Sandra compartieron sus sentimientos y preocupaciones en el café, y finalmente llegaron a un entendimiento. Aunque no sabían con certeza qué depararía el futuro, habían dado un paso importante hacia la honestidad y la comprensión mutua.

Mientras tanto, Gianna estaba esperando en casa, preocupada pero dispuesta a darle espacio a Cate para resolver sus sentimientos. Sabía que las decisiones del corazón no siempre eran fáciles, pero estaba dispuesta a apoyar a Cate, sin importar el resultado.

- -En sus pensamientos- Cate, toma el tiempo que necesites para aclarar tus sentimientos. Estaré aquí cuando vuelvas.

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En una noche calurosa, Cate aceptó la invitación de Gianna para ir a su departamento. La terraza con una piscina era el lugar perfecto para relajarse y conversar en privado, ya que numca nadie iba arriba. Cate se encontraba en el agua, sumergida hasta la cintura, mientras Gianna se sentaba en el borde de la piscina.

- -Nadando hacia el borde- Gianna, necesitaba un lugar tranquilo para pensar. Gracias por invitarme aquí.

- -Sonriendo- Siempre estás bienvenida, Cate. Esta terraza es mi refugio personal. ¿Cómo te sientes?

- -Suspira- Estoy tratando de procesar todo lo que sucedió en esa conversación con Sandra. Es abrumador.

Cate se apoyó en el borde de la piscina y miró a Gianna con un gesto de incertidumbre en su rostro.

- ‐Con cariño-Entiendo, Cate. A veces, enfrentar nuestros sentimientos y tomar decisiones es lo más difícil que podemos hacer.

Mientras charlaban, la luna se reflejaba en el agua. Cate jugueteaba con el agua mientras pensaba en su conversación con Sandra.

- -Mirando a la piscina- Siento que estoy en una encrucijada, Gianna. Por un lado, está mi conexión con Sandra, una amiga de toda la vida. Y por otro, está esta conexión intensa que siento contigo.

- -Con paciencia- Cate, nadie puede tomar esta decisión por ti. Pero quiero que sepas que, pase lo que pase, respeto tu proceso y estoy aquí para apoyarte.

Cate se acercó a Gianna y le tomó la mano con gratitud.

- -Con determinación- Gianna, te valoro mucho y lo que compartimos es especial. Pero necesito tiempo para entender mis sentimientos y tomar una decisión.

Gianna asintió con comprensión y se levantó del borde de la piscina. Se acercó a Cate y le dio un suave beso en la mejilla.

- -Con dulzura- Tómate el tiempo que necesites, Cate. Estoy aquí cuando estés lista.

Mientras la noche caia aun mas y la brisa calurosa soplaba suavemente, Cate y Gianna compartieron un momento de tranquilidad y entendimiento en la terraza junto a la piscina, sabiendo que el camino de sus corazones aún estaba por descubrirse.

Decisions to be made Donde viven las historias. Descúbrelo ahora