CAPITULO 4

145 12 0
                                    

SAN:Hay que denunciarla. -le dijo Sandra mientras manejaba-

Cate no le respondió, solo se quedó viendo a la ventana del auto.

SAN:¿Cate me estas escuchando? [...] ¡Cate!

CATE:¿Qué? -la mira-

SAN:¿En que estas pensando?

CATE:En nada.

SAN:Bueno, escúchame. Hay que denunciar a esa mujer.

CATE:No, San.

SAN:¿¡No!? Cate, te rompió la cara.

CATE:Ya esta, ni siquiera se como se llama. Además, ella no fue la única que golpeo.

Cate en todo el trayecto a la casa estuvo en silencio. Cuando llegaron se nego a comer y fue directamente a su habitación para descansar, pero no pudo. No podía dejar de pensar en la chica que la atendió en el hospital. Su nombre no dejaba de pasar en su mente, "Gia". Esos ojos almendrados marrones, su nariz respingada, esos labios carnosos y su sonrisa recta y blanca. Su estatura media, su pelo castaño, y su piel bronceada, hacían que Cate esperara con ansias ese lunes.

....................................................

Por fin había llegado ese lunes tan esperado. Cate estaba apunto de irse cuando Sandra la freno.

SAN:¿Vas al hospital?

CATE:Si.

SAN:Te acompaño... vamos.

CATE:No, no. -dijo con rapidez- O sea... no hace falta, iré sola.

SAN:Yo no tengo problema en acompañarte, vamos.

CATE:San, no. Quiero ir sola.

Sandra la miró confundida, pero le hizo caso y se quedó.

SAN:Bien, como quieras. Avísame cuando llegues, cuídate.

CATE:Si, si.

Cate se fue. Cuando llegó al hospital preguntó directamente por Gia.

CATE:Hola, vengo a ver a la doctora Gianna.

RECEP:Cate Blanchett. ‐dijo la recepcionista muy sorprendida-

CATE:Si, eh... ¿la doctora Gianna esta?

RECEP:Eh, eh... ¡Si, si esta!

CATE:Ah, ¿y me puede atender?

RECEP:Eeeh, no.

CATE:¿No? Pero si me dijiste que esta.

RECEP:Si, pero esta en cirugía.

CATE:Aah, ¿y se tardará mucho?

RECEP:Déjeme ver. -reviso unos papeles-
Bueno, acá dice que puede tardar entre 3 o 4 horas.

CATE:Oh...

RECEP:Pero podemos hacer que la atendía otro doctor.

CATE:No, no. Bueno, vengo cuando ella esté libre. -se estaba por ir pero volvió- ¿me podrías hacer un favor?

RECEP:¡Si, obvio! Lo que quiera...

CATE:¿Le puedes decir cuando salga que yo vine?

RECEP:Si, si, si.

CATE:Gracias... -sonríe- que tengas una linda mañana. -se va-

RECEP:Tu... tu igual.

Cate volvió a la casa.

SAN:No tardaste nada... -notó su amiga-

CATE:Si, es que [...] Había bastante gente y recién en unas 3 o 4 horas me atenderian.

Decisions to be made Donde viven las historias. Descúbrelo ahora