Felix se despertó de golpe, con el corazón retumbando en sus oídos. Su vista era borrosa, pero se enfocaba poco a poco y cuando por fin pudo ver todo con claridad, sintió pánico al no reconocer el sucio lugar donde se encontraba. Ni si quiera había estado durmiendo en una cama, se encontraba en el suelo, amortiguando el frío con paja y un pedazo de manta vieja que evitaba la picazón por el material seco.
Intentó levantarse de golpe, pero era como si su propio cuerpo no le perteneciera y solo podía ver como espectador. Su cuerpo por fin se levantó, apenas sentándose y pasó sus sucias manos por su rostro. Notó que se encontraba en una muy modesta choza de paja y madera, ni si quiera tenía piso; era más pequeña que su habitación, solo contaba con otra cama improvisada a lado de la suya, una mesa de madera, una ventana improvisada, que era tapada por un trozo de madera y contaba con una sola entrada.— ¡Kiran!, ¿ya haz despertado?
Aquella voz le sonaba familiar, era Jisung por supuesto, pero le carcomía una duda enorme. «¿Quién carajos es Kiran? —pensó—.»
— Ya lo he hecho — contestó, con voz profunda, con su propia voz. Aquella respuesta, había sido más bien involuntaria —. Dame un poco de agua
Escuchó los pasos acercarse y justo como lo había escuchado, aquél hombre era Jisung, pero a la vez no lo era. Su rostro era idéntico al que conocía, con la excepción de tener cierto rastro de bello en el rostro y el cabello lo llevaba ligeramente largo, llegandole debajo de las orejas. Llevaba una túnica simple, demasiado gastada, con unos huaraches de piel que le había pertenecido a algún animal.
Jisung se acercó con un cuenco de agua y Felix lo tomó con ambas manos, viendo por fin su reflejo. Tenía su mismo rostro, también tenía rastro de bello facial y su cabello era negro, en vez de rubio; lo llevaba más largo que Jisung pero amarrado en una coleta. Notó que sus ojos eran rojos y pudo percatarse que los de Jisung también lo eran.— ¿Pasa algo?, pareció que veías un muerto
«Se dió cuenta — dijo en su mente—.»
— Solo... casi me voy con ellos
— Lo sé, tu cuerpo ardió, casi como si te estuvieran quemado vivo y sudaste como loco
— Zeke... — «¿Zeke?» — tal vez deberíamos largarnos pronto de aquí
— Estoy cansado de que nos mudemos y estemos escondiendonos. No tengo la culpa de que sean idiotas
— Lo sé, pero estaremos en peligro
— Odio que seas tan considerado con esos bastardos, fácilmente podríamos matarlos a todos
Su risa entridente sonó, provocando que el chico idéntico a Jisung le mirara con los ojos entrecerrados.
De pronto las imágenes llegaron a la mente de Felix, los recuerdos, recuerdos de aquella vida. Zeke y Kiran eran amigos casi desde su nacimiento, pertenecían a cierta comunidad, que tenía los ojos de un color peculiar, pero su pueblo había sido asesinado por la iglesia que insistía en que tenían tratos con el maligno.
«Incluso en esa vida, mi destino fue ser infeliz — pensó nuevamente—.»
Un sentimiento de tristeza se adueñó de su pecho y se dió cuenta que estaba sintiendo, todo lo que Kiran guardaba en lo más profundo de su pecho. Ya no se sentía atrapado en él, ahora era él.
Unos recuerdos, comenzaron a pasar de manera aleatoria, parando en uno exacto, donde se encontraba rodeado de árboles, en plena oscuridad del bosque y solo la luna le daba luz para no sentirse solo, se había perdido mientras buscaba cazar algo para él y para Zeke.— ¿Qué haces aquí?
Una voz conocida y desconocida al mismo tiempo, resonó hasta en el lugar más recóndito del bosque. Kiran se asustó, tratando de mirar a todos lados.
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Demon's Revenge (Hyunlix)
ФэнтезиLa familia de Felix es brutalmente asesinada, traicionada y deshonrada a manos de quién menos se lo esperaban, convirtiéndolo en el último sobreviviente de la familia Lee. En su desesperación, busca la ayuda de un ser que le ayudará a cumplir su ven...