El viento silbaba, mientras rozaba sus orejas y provocaba un leve escalofrío. El suave aroma de los árboles y vegetación inundaba sus fosas nasales, algo familiar para él, pero al mismo tiempo desconocido. Mantuvo los ojos cerrados un poco más y asimiló que una vez más, su mente le había llevado a ese lugar.
— ¿Kiran?
Aquella voz se escuchó lajana, hasta que pudo abrir los ojos de manera repentina, ya que sintió una palmada justo en su nuca.
— ¿Qué te sucede? — un rostro conocido estaba justo a su lado, mejillas abultadas y sonriente.
— Estuve hablándote hace un rato y no respondías. ¿Aún estás enfermo?
— Ya no lo estoy, tan solo estaba meditando
— ¿Y puedo saber de qué?
Kiran negó con la cabeza y se levantó del tronco de leña, en el que había estado sentado.
— Cosas sin importancia — Zeke curvó una ceja y Kiran sonrió nuevamente —. Ve prendiendo la fogata, iré a tratar de conseguir la cena
— Está bien, pero ten cuidado, los aldeanos han comenzado a explorar el bosque. Parecen estar buscando algo y si llegan a ver cómo te brillan los ojos con la luz de la luna, entonces... intentarán matarnos... otra vez
Kiran tomó su arco y flechas, mientras asentía.
— No tardaré
Zeke asintió y seguido de eso, Kiran comenzó a adentrarse poco a poco en el bosque. Trató de ser lo más silencioso que pudo, para no ahuyentar a los animales, que pudieran ser la cena de esa noche.
Llevaba un buen rato caminando, tratando de encontrar al menos, una liebre; pero extrañamente, ningún animal estaba a la vista y cuando prestó atención al camino, se dió cuenta que estaba en una zona del bosque, que no reconocía en absoluto. Decidió caminar un poco más, acompañado de la luz de la luna y sentía de vez en cuando que algo lo miraba fijamente, desde las copas de los árboles.— ¿Qué haces aquí?
Kiran se asustó, al punto de sentir que estaba por vomitar su corazón. Buscó la fuente de aquella voz, sin éxito alguno.
— Yo... yo... ¡me perdí! — respiró agitado, apretando con fuerza el arco de madera que tenía en sus manos.
El dueño de la voz, salió detrás de un árbol, acercándose lentamente hacia él. La toga blanca de su vestimenta y su bello rostro, dejó casi embobado a Kiran.
— ¿Cómo podrías perderte?, estás demasiado lejos de tu especie — el hombre ladeó la cabeza y se acercó repentinamente hasta Kiran, provocando que este saltara —... Tus...
Kiran reaccionó rápidamente y se alejó del hombre, mientras le apuntaba con su arco. El hombre sonrió, provocando un escalofrío en Kiran.
— ¿Qué... Qué eres?
— Está bien, voy a presentarme — los ojos de aquél hombre, se volvieron completamente negros, provocando otro susto en Kiran —. Mi nombre es Hyunjin, soy hijo de Lilith y Abbadōn. Así que, eso me convierte en el segundo príncipe del infierno
Kiran bajó el arco y abrió levemente los labios, debido a lo que había escuchado.
— Seguro Zeke tiene razón y sigo enfermo — tocó su frente y mejillas —. Seguro estoy teniendo alucinaciones por la fiebre y por eso me he perdido
El demonio puso los ojos en blanco y suspiró, para transformarse en su forma semi-demoníaca.
Felix despertó de golpe, tomando aire bruscamente. Su respiración estaba agitada y su cabello estaba pegado a su frente, por el sudor. Giró su cabeza y pudo distinguir una figura masculina, sentado al borde de su cama. Enfocó la vista, dándose cuenta que se trataba de Hyunjin, que lo veía sumamente preocupado, además estaba extrañamente desaliñado y sostenía un paño húmedo.
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Demon's Revenge (Hyunlix)
FantasiaLa familia de Felix es brutalmente asesinada, traicionada y deshonrada a manos de quién menos se lo esperaban, convirtiéndolo en el último sobreviviente de la familia Lee. En su desesperación, busca la ayuda de un ser que le ayudará a cumplir su ven...