Demon's Revenge (Hyunlix)

confrontation pt. 2

La pequeña casa de la anciana, era cálida y la personalidad de la anciana, también lo era. Había tenido la amabilidad, de preparar dos tazas de té, para ambos hermanos; cuando lo probaron, sintieron una calidez que hacía mucho tiempo, ninguno sentía.

— Sentimos mucho causarle tantas molestias

— No es ninguna molestia, al contrario. Si no les hubiera encontrado, no hubiera podido llegar a salvo a mi casa — la anciana les extendió un pequeño cesto, con algo de pan —. Coman algo, seguro ha pasado mucho tiempo, desde que pudieron probar bocado

— Le agradecemos su hospitalidad

Ambos hermanos tomaron una pieza de pan y dieron un mordisco, provocando que la anciana riera por la expresión de gusto.

— Me alegra retribuirle, aunque sea un poco. Aún cuando usted es muy joven, ayudó a la prosperidad de ambos ducados y ha sido de gran ayuda, para su alteza el duque

— Me alegra saber, que usted piense eso

— No soy la única que lo piensa, mi señor. Todo el ducado está agradecido con usted, pasamos épocas muy oscuras, cuando la familia Lee de Divus pereció, fue lo mismo para el ducado vecino. El rey ni siquiera fue capaz de ayudarnos lo suficiente y como si fuera poco, todos los ducados de los alrededores nos robaban y también al ducado de Caelum

— Yo... realmente no supuse, que la hubieran pasado tan mal. Pensé que la ayuda de mi padre, les había servido

— Mi señor, no quisiera blasfemar el nombre de su difunto padre, pero realmente él tenía muy mala fama en ambos ducados. Aunque, creo que esos rumores, son de conocimiento suyo

Soojin arrugó la frente al escuchar eso y buscó la mirada de su hermano tratando de obtener alguna explicación. En cambio, Changbin mantenía la mirada en el piso, mientras pasaba saliva.

— Acaso, ¿Nuestro padre hizo algo malo?

Changbin negó nervioso y dejó escapar una risilla.

— A veces la gente tropieza, hermana mía

La anciana guardó silencio y comprendió de inmediato, que aquello era un acto de cariño, que el joven tenía con su hermana.

(...)

Después de haber cabalgado un buen rato, los cuatro hombres y el adolescente llegaron al ducado de Divus. Pronto pudieron darse cuenta del gran alboroto, guardias y civiles peleaban en contra de los invasores, que por dezgracia iban ganando. El quinteto se detuvo a una distancia considerable, mientras analizaban la situación. 
Ambos miembros de la familia Lee de Divus y el heredero de los Han de Caelum, desenvainaron las espadas que traían consigo. Felix miró en dirección a Hyunjin, tratando de darle una indicación que rápidamente entendió.
El mayordomo sacó una pistola y apuntó hacia el cielo para detonar el arma, provocando que todos detuviesen el alboroto.

— ¡A todos aquellos que no sean parte del ducado de Divus, se les ordena bajar sus armas y rendirse!

Algunos civiles, habían aprovechado la distracción para poder escapar; mientras algunos guardias del ducado, forcejeaban aún con los forasteros.

— ¡No obedecemos órdenes de pecadores e impostores!

Los tres nobles tensaron las mandíbulas y sus sirvientes miraron con furia, a todos aquellos que apoyaban lo que había dicho aquél hombre. Felix miró a su alrededor, notando que habían civiles heridos en el suelo y algunos, ya no parecían moverse; sintió su sangre hervir y empuñó la espada con más fuerza.

— ¡Entonces tendrán que aceptar las consecuencias, al haber insultado al ducado! — gritó Jisung, mientras bajaba del caballo y miraba en dirección a ambos demonios — Ya saben qué hacer