Jiminie's dad ♡ YoonTae

𝟚𝟙

Una sonrisa ladeada y victoriosa se forma en los labios de Yoongi al escuchar esa palabra, tenía grandes expectativas, pero dicha por Taehyung las ha superado con creces.

- Eres un cachorro travieso, Taetae — ronronea, subiendo sus manos por sus costados — hoy llegaremos hasta donde tu quieras — el menor asiente, subiendo sus brazos de forma automática cuando el beta arrastra la camiseta; se siente expuesto ante los ojos predadores de Yoongi, pero amado y deseado — tu piel es jodidamente hermosa.

Su cuello se ladea solo cuando el mayor lleva sus labios a la piel, sintiendo que sus manos le queman cuando las pasa delicadamente por todo su torso; un gemido involuntario sale de su boca al sentir dos de sus dedos en su pezón derecho, invitándole a enterrar la mano en sus cabellos blancos, extasiándose por momentos.

- No sé ni por dónde empezar Taehyungie — gruñe, abriendo la boca.

Sus dientes se clavan en la piel del menor, sin querer dejar una marca, pero deseoso de poseerlo en ese momento, aumentándose las ganas conforme los jadeos del castaño se incrementan más y más.

La mano libre del beta se baja sensualmente por su vientre, llegando al siguiente objetivo propuesto, para desabrochar su pantalón y dejando momentáneamente su tarea en el pezón, tirar de todo hacia abajo.

En cuestión de segundos tiene a ese hermoso muchacho completamente desnudo y todo para él, y solo puede empujarlo con delicadeza contra la cama; Taehyung siente morirse cuando el beta se agacha, quitándole los zapatos y deshaciéndose de la ropa que molesta.

Ve con expectación cómo sus dedos, largos y varoniles, desabrochan los botones de la camisa que lleva, mostrándole su nívea dermis y siguiendo por los pantalones, queriendo morirse cuando todo lo que tiene para ofrecerle se le muestra sin ninguna prenda que le impida mirarlo.

Aunque se confunde un poco, cuando lo ve darse la vuelta y rebuscar en su bolso; entendiéndolo segundos después, al ver la caja de condones.

- Sé que no puedes quedarte embarazado de mí — le dice, dejándola en la mesita — pero aun no somos pareja formal y esas cosas solo se hacen cuando estemos seguros de que lo que tenemos, cachorro.

El menor asiente, poniéndose de forma correcta en la cama para recibir entre sus piernas la anatomía del hombre al que ama; sus labios se funden en uno mientras las manos de Yoongi recorren cada parte del cuerpo del omega, que se eriza ante eso y por los miembros de ambos rozándose por el movimiento de caderas que hace el mayor.

Un gemido corta el beso al sentir Taehyung cómo su miembro es atrapado entre una de las manos de Yoongi, con un movimiento lento y sensual, que le hace delirar y mover sus caderas con más ímpetu.

- Pide por esa boquita, cachorro — ronronea, bajando sus besos al pecho; sus dientes atrapan el botoncito del omega, haciéndole arquear la espalda — o lo haré yo.

- P-Papi — jadea, con dificultad.

- Joder — bufa, encendiéndose por momentos.

El pezón es ahora mismo lo de menos, el cuerpo de Yoongi se baja solo, para agarrar las caderas de Taehyung, volteándolo sin dificultad; el omega, avergonzado hasta los huesos, entierra la cara en la almohada.

- Quiero verte — ordena, llevando ambas manos a sus nalgas.

El sonrojo llena la cara de Taehyung conforme la gira, encontrándose con la mirada felina del beta, que abre la boca y saca la lengua, dejando una lamida sensual y provocativa en la entrada de este; Yoongi disfruta como nunca antes de tener sexo con un omega, sintiendo cómo se estremece por sus movimientos, sin dejar de mantenerle la mirada, queriendo ir más allá.

Por eso su dedo se mueve solo cuando lo acompaña en la tarea de preparar a su menor, queriendo gruñir por lo estrecho y caliente que se encuentra el interior del contrario, celebrando ser el primero en poder hacerlo.

- P-Papi — jadea, apretando las sábanas debajo de él — m-más rápido.

Y pone toda la velocidad posible en su lengua y dedo, subiéndola a cada gemido desproporcionado que escucha y a cada espasmo que recibe en su digito, sintiendo que su polla duele a horrores.

Grande es su sorpresa cuando ve cómo el menor estira la mano, agarrando la caja de condones, para tirársela; sonriendo victorioso, sabiendo que es Taehyung el que lleva el ritmo de todo, le deja descansar unos segundos suficientes para ponerse adecuadamente el condón.

- Cambiemos de posición cachorro, te quiero encima de mí — ordena, terminando de ponérselo.

El menor se incorpora, haciéndose a un lado para que Yoongi se tumbe; con la vergüenza y la lujuria supurándole por todos los poros, el omega se acomoda, gimiendo cuando las manos del beta van directas a abrir sus nalgas.

- Hazlo a tu tiempo y a tu ritmo, soy todo tuyo, cachorro — ronronea, recibiendo un asentimiento.

Con vergüenza, Taehyung agarra el miembro del beta, para posicionar la punta justo en su entrada, apoyándose en el abdomen ajeno y comenzar a bajar; es cierto que Yoongi lo ha hecho con otros omegas y betas, pero la imagen etérea que tiene ahora mismo delante de sus ojos, jamás la olvidará.

Ese hermoso omega de piel canela, cuerpo perfectamente proporcionado, con el miembro duro y erecto, el sudor bajándole delicadamente y los ojos cerrados, bajando poco a poco para llenarse entero de él, es todo demasiado irreal.

- A-Ayúdame, papi — consigue decir, miedoso de bajar.

Entonces Yoongi se incorpora, agarrando de sus nalgas para empujar hacia abajo, bebiendo de ese gemido que Taehyung le regala conforme ambos están unidos de forma completa; y aunque acaban de empezar, el beta tiene clara una cosa.

No quiere volver a estar lejos de ese bonito chico nunca más.