Mis días con Stiles (editando)

Capitulo 5

Despierto con el nombre "Liam" en la boca. Debí de haber soñado con el.
Es mi ex novio, cuando rompimos, sus problemas con la ira se desataron y casi me golpea, pero después se detuvo, como de golpe, y se desmayo. Cuando despertó, sus recuerdos estaban borrosos. No se quien le dijo pero según el, yo lo había golpeado. Desde allí, se ha puesto peor su ira. Hace unos 4 meses lo expulsaron, ya que en un ataque de ira, destrozo el carro del entrenador. Es muy bueno en lacrosse, por eso me enamore de el. Pero con el tiempo ambos nos cansamos de que el tuviera que estar entrenando todo el tiempo. Y después de unos 3 meses de estar juntos, lo deje. Desde ese momento me odia demasiado.
Reviso el reloj 6:30 y suena el despertador, lo pago de golpe y prendo la lamparita de mesa. Me siento y estiro los brazos por arriba de la cabeza, mientras bostezo.
Me preparo una buena ducha.
Salgo de la regadera y elijo mi ropa con mi cuidado, no quiero causar malas impresiones así que  tomo algo casual: unos jeans, una blusa azul de manga corta con un bordado en el centro y zapatos negros de meter. 
-Daniela, ¿ya tienes todos los papeles?-me grita mi padre mientras desayuno un plato de cereales con leche.
-Si- respondo con la boca llena.
Baja mi madre por las escaleras.
-¿En donde están?-me pregunta
-En...-me distraigo, trae puesto el vestido que uso cuando se casó mi hermano, tiene, o bueno, tenía una mancha de sangre en la boca del estomago, ya que nos asaltaron de camino a la iglesia y a mi madre le pegaron un balazo. Ese día sentía que mi mundo se venía encima, ella estuvo a punto de irse, de dejarme. Lo que mas recuerdo es la desesperación de estar en el hospital sin tener ningún resultado de mi madre. Muevo la cabeza tratando de quitar esos pensamientos de mi cabeza.
-¿Que?-me pregunta viendo su vestido amarillo, muy hermoso por cierto-¿Crees que lo voy a desperdiciar? Baje unos cuantos kilos y por fin entre en el.
La sigo mirando.
-Oye, tenemos que superar eso-me anima-Hoy en especial tengo que ir muy bien, mi apariencia decidirá si me quedo o no en el trabajo.
-Así que aún no obtienes el trabajo-digo
-Tu padre si, yo tengo hoy mi entrevista.-asiento. 
-Los papeles están sobre mi tocador.
-Los voy a llevar a tu escuela mas tarde, solo tienes que presentar esto en dirección y listo te dejaran entrar.-me dice dándome un papel pequeño.
Asiento.
Subo al coche y mi padre ya esta arrancando, tiene que llegar temprano al trabajo y yo no ayudo mucho en el aspecto "puntualidad".
-Prepárate para la nueva escuela- dice mi padre cuando estamos parados en la puerta.
-Si-digo y dejó escapar un largo suspiro.
-Vamos, no debe estar tan mal-dice mi padre moviéndome la rodilla con la mano.
Sonrío, pero no estoy segura de que se vea real.
Salgo del coche y observo a los demás estudiantes que entran. Algunos felices, otros desanimados.
"Preparatoria Beacon Hills" dice una lápida en el suelo, con un rústico modelo.
Entro a las instalaciones y busco la dirección.
Cuando la encuentro alguien, no se quien, me planta un beso en la mejilla.
-Oye, amigo ¿que te sucede?-dice una voz desde atrás, volteo y me encuentro con un tipo alto, un tanto musculoso que viene hacia mi.
-Pareces el juguete nuevo, eres nueva ¿no es cierto?-me pregunta y asiento.
-Bueno, soy Danny-me dice mientras me estrecha la mano.
-Yo soy Daniela
-Mucho gusto, tocaya.
Reímos
-Si no tienes con quien estar el día de hoy, son problemas, mi mesa está disponible.-me comunica de forma amable.
-Gracias. Supongo que ahí estaré.
Asiente y se va.
Bueno, no fue tan difícil hacer un amigo nuevo.
Entro a dirección y me dirijo con la secretaria.
-Emm... Buenos días, me dijeron que con esto podía entrar-le entrego el papel que me dio mi madre-Mi madre entregará los papeles mas al rato.
-Ah, si eres la nueva
Lo dice como si dijera "bicho raro".
-Si- respondo suspirando.
-Aquí esta tu horario-me dice tendiéndome una hoja con los horarios.
Los reviso, a la primera hora tengo química, genial comenzare el día en mi materia preferida. ¿Se entiende el sarcasmo?
Busco el salón cuando un grupo de alumnos me llama la atención, ya que bueno una de las que están ahí, es pelirroja, de las pocas en toda la escuela. Noto que hablan en un volumen muy bajo, quizá escondan algo, pero bueno, no debo meterme en lo que no me llaman.
Sigo mi camino y encuentro el salón que me toca. Entro y casi no hay alumnos pero una cuarta parte del salón ya esta ocupada. Observo a mis compañeros.
No es cierto. Liam esta sentado en la parte de atrás h alado con un chavo morenito. No me ha visto, me siento rápidamente en una de las primeras bancas tapándome la cara con las manos, me alboroto un poco cabello, para que no parezca que soy yo y me reconozca.
De todas las escuelas que existen, tenía que entrar exactamente a esta y, de todas las clases me tenía que tocar química con el. En esta materia siempre asignan parejas y según, en esta escuela las cambian diario, me tocara con el algún día.
Entra el profesor.
-Buenos días alumnos, hoy veremos...-se detiene y me mira sorprendido-Tenemos una nueva alumna, usted debe ser la señorita...mmm... Robertson ¿no es cierto?
Siento las miradas de todo el grupo sobre la espalda, estoy segura de que Liam ya se dio cuenta.
-Si-digo sin ánimos y sin levantar demasiado la voz.
-Bueno, hagamos su primera clase divertida y dinámica, ¿qué tal si todos se presentan con su compañera?
-Si-escucho una voz, la de Liam-Perderemos clase.
El profesor le manda una mirada furibunda y después una amable a mi.
-¿Le gustaría pasar?
Me levanto y volteo hacia mis compañeros, evitando a Liam, esta distraído, tal vez ni siquiera se haya dado cuenta de que estoy aquí.
-Me llamo Daniela Robertson-pronunció mi nombre y Liam voltea a verme, detenidamente, si no se había dado cuenta de que estoy aquí, seguro, ya lo sabe. Me examina y por un momento nuestras miradas se cruzan, duramos unos segundos así, pero el desvía la mirada-Tengo 17 años y acabo de mudarme.
Noto las miradas de todos, tal como lo imaginaba "bicho raro". Excepto una, una chica, de tez blanca y cabello negro, ojos rasgados, me sonríe, es una sonrisa sencilla pero sincera.
Me topo con su mirada y le sonrió.
Después de varias presentaciones por fin le toca a la chica de ojos rasgados y es a la primera a la que pongo atención.
-Mi nombre es Kira Yakimura-dice- Me mude aquí hace unos meses y mi padre trabaja aquí.
Después pasa Liam.
-Me llamo Liam-se dirige a mi, me ve, demasiado-Pero ya me conoces.
Vaya que lo conozco.
-Bueno, terminamos. Ahora habrán su libro.
Después de la clase mas aburrida del planeta salgo del salón. Busco mi  número de casillero  en el desastre de mochila que traigo. Paso por todos los casilleros sin poder encontrar el mío.
Kira pasa a mi lado y me toca el hombro para detenerme.
-A 107 ¿Eh?
-Si-respondo.
-Yo estoy al lado, ven te diré donde esta.
Asiento y la sigo.
-Es aquí-me dice
-Gracias.
-Cuando quieras y entonces ¿de dónde vienes?
-De...
-¡Kira!- la llama un tipo alto un tanto moreno.
-Si, ya voy Scott-dice dirigiéndose a el-Tengo que irme, pero hablamos luego ¿si?- ahora se dirige a mi
Asiento y se va con Scott.
De nuevo sola, perfecto.
-Oye, eres nueva ¿ya te dieron tu visita guiada?-me pregunta un chico de estatura mediana-Me llamo Jeff, te ayudare a adaptarte.
-Gracias.
Me da el recorrido mas largo de mi vida, ni siquiera pongo atención, solo me fijo en como todos me miran, como ya he dicho muchas veces "bicho raro".
-Y aquí terminamos-me dice-A la hora del receso largo te espero en mi mesa ¿de acuerdo? Algunos amigos estarán allí, para ayudarte a adaptarte y después podrás ir con quieras.
-Si, muchas gracias.
Recuerdo a Danny, le dije que estaría con el. Tal vez ni siquiera recuerde eso. Pero comeré con Jeff y los demás, haré amigos nuevos. 
Me siento en una banca, esperando a que suene el timbre para entrar a mi próxima clase.