"When I'm with you, hell feels like heaven"
Sobrevivir a un apocalipsis ya es difícil sin tener que preocuparse de romances adolescentes, pero, ¡oh sorpresa! Ariadne Jones se enamoró de Carl Grimes.
Ahora tiene que sobrevivir el fin del mundo y al b...
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—Ey, ¿estas bien?—repitió mi mamá al entrar a nuestra carpa, donde me encontraba sentada, muy distraída en mis pensamientos para notar su presencia.
—Shane está equivocado—dije, finalmente volteando para verla en los ojos, con, lo adivinaste: ¡lágrimas cayendo por mis cachetes!
—Lo está, pero no tenemos manera de salvarlo—respondió ella mientras se acercaba a mi para intentar desocupar mi mente de tales pensamientos.
Dos horas después que el grupo saliera a la ciudad, se comunicaron por la radio para informarnos que estaban atrapados, rodeados por caminantes. Shane, como Buena persona que es, decidió que lo mejor era dejarlos y no arriesgarnos.
Pero ninguno iba hacerle caso y dejar que sus familiares mueran, por lo que la mayoría de personas estaban enfurecidas por la decisión del auto-proclamado líder.
Daniela, quien acababa de regresar de cazar con Mark, entró a nuestra carpa rápidamente. —Bien, ya se como salvarlos—Interrumpió ella, caminando en círculos mientras observaba el suelo, ordenando sus ideas—Los caminantes son atraídos por el ruido, así que si los atraemos con música a volumen podríamos...—
Como si Dios, o quien sea que estuviera allá arriba, la hubiera escuchado; su voz fue superpuesta por el sonido de la alarma de un carro que resonaba por las montañas.
Todos salieron a investigar alarmados, pues tal sonido atraería caminantes. El sonido provenía de un carro rojo que se acercaba rápidamente hacia el campamento. Todos nos tensamos al verlo estacionarse a las afueras de nuestro campamento.
Segundos después, Glenn salió del auto con una sonrisa plasmada en su rostro. Si cabello despeinado debido al viento que le había caído al salir con tanta velocidad y un brillo de emoción en sus ojos.
Mi hermana corrió hacia él y lo abrazó, dejando pequeños besos en sus labios como siempre lo hacía cada vez que regresaba de una expedición.
—¿Micheal?—preguntó mi mamá junto a las dudas de los demás, especialmente Amy, quien no paraba de preguntar sobre Andrea. Glenn asintió y pronto una camioneta se acercó, logrando que a todos los presentes se les pongan los pelos de punta, esperando ansiosamente a sus familiares.
De esta salieron Morales, Jacqui, y todos los que habían ido a la expedición a Atlanta, excepto Merle.
Mi mamá y yo corrimos a abrazar a mi papá y este nos recibió con brazos abiertos, levantándome ligeramente mientras acariciaba el cabello de mi madre.
Una vez que nuestro reencuentro terminó, pude notar como Carl lloraba junto a su madre, afectado al ver como todos saludaban a su familiares felices y el aún seguía sin saber de su padre, quien probablemente estaba muerto.
