Cristina se agachó para quedar a la altura de la pequeña.
C: Yo me llamo Cristina, Cristina Álvarez. Mucho gusto Estrella
E: Igualmente (se acercó y depositó un beso en la mejilla de Cristina)
H: Mi amor ven aquí (tomándola de la mano) Les presento a Cristina la mujer que ha conseguido que la felicidad vuelva a mi vida. Esta en mi madre Dolores.
C: Encantada Señora Dolores (tímidamente extendiendo su mano)
D: Encantada pero dame un abrazo muchacha por favor.
Cristina sorprendida aceptó con gusto el abrazo de la madre de Heriberto y sintió el calor familiar que nunca había sentido con su madre, eso la relajó un poco.
H: Y éste es mi padre, Antonio.
C: Encantada Señor Antonio (extendiendo nuevamente su mano)
A: El placer es mío (dándole un beso en el dorso de la mano)
D: Vamos a desayunar por favor, vengo muerto de hambre.
C: Me van a disculpar, no me encuentro muy bien, con su permiso me retiro a la recamara, desayunen tranquilos en familia.
H: Cristina, ¿Qué te ocurre? (acercándose a ella preocupado)
C: No te preocupes, me recuesto un poco y se me pasa.
H: Te acompaño.
C: No ¿Cómo crees? Disfruta el desayuno con tu familia, en cuanto me encuentre mejor bajo.
H: Como quieras mi amor.
Heriberto le dio un beso de pico en los labios, acción que no pasó desapercibida para la pequeña Estrella.
Cristina subió a su habitación y se tumbó en la cama a llorar, pensando desconsolada que Heriberto tenía una hija y le había ocultado otra cosa importante de su vida. ¿Por que no tenia la suficiente confianza para contarle las cosas? Ella se había abierto a él con su experiencia del pasado y parecía que Heriberto estaba lleno de secretos.
Mientras tanto en el comedor una familia desayunaba sonriente mientras hablaban de lo que había sucedido durante estos meses.
D: Hijo, Cristina es una mujer muy bella y también parece buena persona.
H: Lo es mamá, Cristina es muy importante para mí.
E: ¡Heri! ¿Y yo soy importante?
H: ¡Claro que sí! Tú eres mi princesa y eso es muy importante. Ven aquí, siéntate conmigo.
Estrella se levantó rápidamente y se sentó en las piernas de Heriberto con una sonrisa de oreja a oreja.
H: Y ¿Como fue el viaje?
D: Todo muy bonito hijo, nos la pasamos muy bien.
R: Sí, hicimos un montón de actividades y conocimos muchos lugares.
E: Y fuimos a un lugar con toboganes muy grandes que estaban dentro del agua.
H: ¿En serio? ¿Y te lanzaste?
E: Siiiii, pero el agua estaba muy fría.
D: También fuimos a un zoológico, ¿verdad Estrella?
E: Siiii, había muchos animales, yo quería traer un mono pero elabuelo no me dejó (cruzándose de brazos)
A: Estrellita cariño ya te expliqué que los animales del zoológico no son para tenerlos en casa, esta prohibido.
E: Pues conmigo el mono se la pasaría muy bien.