El miércoles en la mañana Jimin salió de su departamento para ir a la empresa. Desde el lunes en la noche Jungkook había estado casi un ochenta por ciento bien. Haciendo sus cosas con normalidad y sin sentirse mal, pero de igual forma había faltado el martes solo para "verificar" que estuviera bien.
—Fue muy raro no tenerte aquí diciéndome que soy un vago.
—Yo también te extrañe, Tae —dijo dando leves golpes en la mejilla de este. —Tráeme todo lo que necesite revisar, por favor.
Mientras Jimin trabajaba en su oficina, Jungkook estaba a nada de morir del aburrimiento.
Apenas eran las una de la tarde y él ya se había bañado dos veces, comido cuatro, barrido el piso que ya estaba limpio. Su leche de plátano se había acabado, hasta había hecho ejercicio por una hora y jugado con su pequeño conejo.
Por primera vez Jungkook no estaba feliz de tener tanta energía. Su cuerpo parecía querer sacar todo lo que no pudo en sus días de enfermo.
Él junto a su peludo amigo estaban en el sillón, mientras el conejo estaba comiendo un pedazo de lechuga Jungkook comía una zanahoria mientras buscaba algo que ver en la televisión.
—Que aburrido —se quejó, resbalándose en el sillón hasta quedar en el piso —¿Quieres jugar en tu ruedita? —Se levantó mirando al peludo.
Este solo lo miró terminando de comer su lechuga y acercándose a él pero solo para tratar de llegar a su zanahoria.
—Ten pues...solo piensas en comer —dijo dándole la verdura naranja. —¿Qué estará haciendo Jiminie? —Pensando en esto su teléfono sonó, viendo que era el —¡Jiminie!
Se escuchó una risa del otro lado —Hola Kookie, te oyes muy feliz. ¿Te has sentido bien?
—Demasiado bien para mi desgracia...
—Entiendo. ¿No quieres venir a la oficina? Digo...no es tan divertido, pero...
—¡Si! —gritó sin dejar que Jimin terminara de hablar —¡iré para allá, gracias!
Luego de cortar la llamada corrió hacia su habitación, dejando a su conejo en la jaula al estar dormido y comenzando a buscar algo de ropa para salir.
No importaba lo que se pondría, ¿0 sí?
A Jimin no le importaba, siempre le decía que se veía bien y le gustaba como vestía, entonces ¿porque ahora quería llegar con buena pinta a la empresa donde sabía todos lo verían llegar para buscar a Jimin?
Jungkook bajo del taxi frente al edificio, nunca había ido así que Jimin le dio instrucciones. Diciendo que caminara hasta los ascensores y tomara el de la derecha, que abría frente a la oficina de él.
La recepción era sencilla pero bastante elegante, techo blanco con buena iluminación, había una pared negra con el nombre de la empresa en letras grandes y doradas. Pasando por la recepcionista a quien saludo cortésmente camino hacia los elevadores, pero siendo llamado por esta.
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Mi Juguetito [Kookmin]
RomancePark Jimin es el CEO más joven y rico de Corea del Sur. Con gusto en dos cosas, su trabajo y el sexo. Aunque esto último no va como desearía. Desesperado por tener a alguien que lo complazca. Encuentra a Jungkook, un universitario tranquilo y bastan...