Mi Juguetito [Kookmin]

🐇23.¿Enamorado?🐇

El amor en la adolescencia suele ser pasajero, no todos tiene la dicha de decir que tuvieron uno, eso puede ser algo bueno o malo.

La adolescencia te deja experiencia en algunas cosas y tener un amor a tal etapa te hace madurar en ciertas cosas, pasar la página y entender que muchas cosas no son tan sencillas como se pintan en los libros con finales felices.

El no tener tu amor de adolescencia no es tan grave, pero si te ayuda a no cometer ciertos errores en tus relaciones cuando eres adulto. Jungkook jamás tuvo un amorío en la adolescencia.

Al regresar de Italia las cosas no cambiaron mucho, aunque Jimin estuviera trabajando un poco más y Jungkook en la universidad. Había un problema, solo uno.

Jungkook se estaba sintiendo tan cómodo con la impredecible rutina de Jimin y él. Tanto que creía todo fuera un sueño. Jamás se había sentido tan feliz, había tenido sus encuentros, pero nada romántico, su interés jamás pasaba de lo físico, pero con Jimin era atracción en todo sentido.

No había nada de malo en eso, el amor es hermoso y más si es correspondido. Él pensaba que Jimin estaba enamorado de él, que correspondía sus sentimientos.

Porque Jungkook estaba locamente enamorado de él.

El problema es que siempre había una parte mala, nada podía ser color de rosa todo el tiempo, no entendía porque desde hace tanto sentía algo de miedo, esa tarde descubrió que era la pequeña cosa que lo atormentaba.

Todo había comenzado porque el sería el juguete sexual de Jimin, hasta el mismo había se había referido a sí mismo como un dildo. En su momento no le importaba, solo era gracioso.

Pensando si se debía formalizar su relación con el mayor, si por fin sentarse hablar de lo que estaba pasando entre ambos, aunque ya no solo actuaran como solo amantes el pensar que eso seguían siendo lo atormentaba.

—Eso es lo que deberán hacer para el proyecto —su profesora termino de hablar, dando por terminada la clase.

—¿Qué?

—En donde andas Jungkook, no apuntaste nada de lo que dijeron. —Hoseok, quien siempre se sentaba a su lado había notado lo ido que había estado esos días.

Aunque no había sido el único, el nuevo estudiante en su clase que se sentaba unas sillas más alado también había estado mirando al peli azul, notando que siempre parecía perderse en sus pensamientos.

—¿Me prestas tus apuntes?

Hoseok abrió su mochila, buscando la libreta en donde había apuntado, dándosela al menor. —Te esperare en los estacionamientos, recuerda que hoy vamos a comer los cuatro.

Sentándose nuevamente para escribir, sabía que si le tomaba foto la perdería y luego no sabría que debía hacer. Sin notar que alguien más seguía al fondo del salón siguió apuntando.